El sacrificio de la reina (+21)

Capitulo 56

El café amargo que saboreo hace que mis sentidos de activen aún más, hace que pueda pensar con un poco de objetividad.

Observo otra vez las personas que me miran atentamente,esperando una reacción mía al saber todo lo que ha ocurrido este periodo de tiempo en el que mi mente ha estado en otro sitio.

Suspiro mientras que me echo hacia atrás en el sofá donde estoy sentada, ocasionando que Sindy que se encuentra a mí lado haga lo mismo que yo, mientras que se queda observando todo pero sin mencionar nada.

No se ha separado de mi en ningún momento, yo creo que es porque ambas sabemos que mi estado puede cambiar, puedo ser un peligro para mi misma en estos momentos, aunque me encuentre mucho mejor y haya avanzando junto a ella, todavía no estoy completamente bien.

Mis ojos se dirigen hacia Armand lentamente el cual se encuentra enfrente mi, esta sentado al lado de la persona que me ha salvado la vida, y la cual hace unos momentos he logrado descubrir que es un gran amigo de él.

Dexon Messina, mi Salvador y el  actual general de una bases militares más importantes de este país.

Mi mirada se dirige hacia el de nuevo mientras que mi mente trae los pocos recuerdos de el que tengo, son muy leves ya que cuando yo descubrí mi familia y empecé mi vida aquí, coincidimos muy pocas veces, y el no era el mismo que es ahora, su aspecto ha cambiado demasiado, por eso no lo he reconocido.

A mí mente también me llegan recuerdos de esa época, donde mi hermano me contaba de él, me contó como su conocieron y que el se fue a Rusia poco tiempo después de que yo estuviera en este país, en cambio ahora me cuentan que siempre han tenido contacto además de que el a sido nuestro aliado en muchas ocasiones.

Respiro profundamente mientras que dejo el café sobre la pequeña mesa, mientras que empiezo a intentar aclarar toda la información que me han dado en pocos minutos, lo cual me lleva a preguntar una cuestión que todavía no logro procesar.

—¿Estáis totalmente seguros de que Kalid está dándole caza a su padre?—pregunto mirando directamente mirando a mí hermano y dándole una vista rápida al general el cual está totalmente callado solamente observándome.

—Estos días han caído varias empresas importantes de la mafia griega, además de que su padre salido del país tres días después de que te rescatamos, en ese tiempo se había mantenido escondido, pero según la información que nos ha llegado, Kalid lo encontró y hubo una emboscada que le tuvo que hacer huir—habla Dexon mientras que señala a uno de sus hombres, los cuales se mantienen de pie a ambos lados de él, le pasan un iPad el cual pone sobre la mesa.

Mi mirada va hacia la pantalla, veo una tabla con bastantes números rojos, igual que el pasando, y me enseña fotos de varias propiedades suyas totalmente destrozadas, en las imágenes se pueden visualizar hasta mercenarios totalmente muertos, eso me quiere decir que han perdido mucho poder en poco tiempo.

Algo sorprendente.

Nunca pensé que Kalid atacará directamente contra su padre, su obsesión ha llegado a un nivel aún más superior para iniciar una guerra contra los suyos, sin parase a pesar de que el estaría perdiendo el poder que tanto ama.

Miro a mí hermano una vez que he levantado la vista del iPad, el ha permanecido en silencio todo el tiempo, mientras que su amigo me informaba de todo lo que ha pasado, solo ha acotado un par de cosas, pero no ha dicho mucho más.

—¿Habéis tenido algún contacto con él estos días?—le pregunto directamente sin andarme con rodeos, esquivando esa pregunta por más tiempo, no me sirve de nada.

Necesito poner en marcha un plan definitivo para acabar con esta mierda cuanto antes, por eso debo saber qué tan mal estamos en esta cuestión.

—Llegamos hasta aqui sin ser detectados, en ningún momento ha sabido donde te encuentras, aunque intento rastrearnos no tuvo éxito, por eso tuvo que parar y recurrir ha ponerse en contacto conmigo para saber de ti, lo ha echo varias veces —habla al fin mientras que se levanta del sofá y se pasa una mano por el pelo mientras que camina hacia una ventana que da vista al mar, donde se coloca de espaldas a todos—simplemente le hemos dicho que estás viva pero que necesitas un tiempo para recuperarte y para superar todo lo que ha ocurrido —habla sin dirigirme la mirada mientras que mira hacia el exterior totalmente calmado, sus manos están en sus bolsillos parace relajado mientras que habla del tema, pero aún así se que le cuesta recordar todo igual que a mí.