Capitulo 64

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—¿Cómo piensas atacar contra el sino tenemos una ubicación?—habla Armand mientras que me mira como me quito la sudadera quedando en una camiseta negra de manga corta con un logo de un equipo de fútbol que ni yo misma conozco, pero la cual es cómoda y holgada para que la tela no roce ninguna de las cicatrices que llevo descubiertas.

Doblo tranquilamente la sudadera mientras que en mi mente pasa el plan que está trazado incluso desde antes de llegar aqui, el cual es el único que tengo seguro por ahora.

—Eso déjamelo a mí—hablo mientras que levanto mis ojos hacia los de mi padre, se que el sabe mas de lo que habla, al igual que la llamada que hice fue delante de él, seguramente le aclaro muchas cosas—vosotros intentar descubrir porque el coronel ha accedido a trabajar con Kalid —ordeno algo que me servirá en un plazo de tiempo muy corto.

Si sabemos el porque despues de tanto tiempo está colaborando con la mafia, podremos romper esa alianza que tanto nos perjudica ahora.

—El coronel no tiene familia para que esté amenazándolo—dice Armand mientras que me pasa una carpeta donde está toda la información de el—tiene que haber sido por voluntad propia, a lo mejor ha pensado que a través de él puede destruirnos más fácilmente—habla mi hermano haciendo que mis ojos vayan hacia el y de mi nazca una sonrisa ante sus palabras.

Por propia voluntad, es completamente imposible, ya que muchas personas lo han intentado y se ha negado completamente.

Y que ahora se buenas a primeras trabajé mano a mano con Kalid, es demasiado extraño, debe haber algo más para que el actúe así.

—Hay algo que lo está atando al griego —habla mi padre captando nuestra atención por completo—tu hermana tiene razón—sigue hablando mientras que deja su copa en la mesa, se levanta con elegancia y camina hacia el panel para pararse enfrente de el—hace muchos años cuando lo destinaron aquí, con el venía una mujer sumamente hermosa—dice haciendo que frunza el ceño al no saber esa parte.

Me acerco a el lentamente y me pongo a su lado mirando la foto del coronel como el mismo hace, pero prestando atención a cada una de sus palabras.

—Era un policía que no se dejaba comprar de ninguna manera, eso le hizo ganarse muchos enemigos hasta que eso ocasionó que mataran a la chica—dice mientras que me mira de reojo viendo como le prestó toda la atención—fueron exactamente los griegos, tomaron venganza después de que el se metería en lo más hondo de la organización en una misión encubierta—dice mientras que se separa del panel y camina hacia la puerta dando por finalizada esa historia que no tenía conocimiento de ella—asi que muchachos por propia voluntad no puede ser, su odio hacia todos nosotros tiene una causa muy dolorosa para el—dice por último antes de cruzar la puerta y dejarnos a los dos solos de pie y totalmente perdidos ante este giro de la situación.

Como pensaba debe haber algo que le está haciendo ayudarlo aunque lo odie, entonces si logramos descifrar eso podemos actuar en consecuencia sin arriesgarnos.

—Me tocará hacer de espía—dice Armand con cansancio mientras que se levanta hasta que  se pone a mí lado—¿Estas bien?—me pregunta antes de que su mano vaya hacia la mía mientras que observa la piel de mis brazos descubierta.

Sus dedos trazan la línea vertical que hay en mi muñeca inconsciente, parte de ella la tapan como siempre las pulseras que llevo, pero aún asi sigue estando ahí.

Cuando la delinea por completo hace que tenga un escalofrío haciendo que me separé de el inmediatamente, seprandome por completo de él y caminando hacia la mesa mientras me concentro en otra cosa que no se la sensación que he tenido.

—¿Donde está Di Luca?—pregunto cambiando totalmente de tema, necesito hablar con él antes de irme, necesito seguir formando este rompecabezas.

El no habla, simplemente suspira mientras que va hacia el portátil que está aún lado mío y vuelve a teclear hasta que me pone otra serie de cámaras en una de las pantallas.

El sacrificio de la reina (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora