Nuestros pasos son leves, al igual que nuestros ojos ven las llamas que cubren parte del bosque, eso nos da toda la visión de nuestro alrededor mientras que el amanecer vuelve aparecer por el horizonte.
A pasos lentos y seguros caminamos lejos de la cueva en la que hemos estado todo este tiempo, esperando que llegarán ellos, por eso ahora debemos movernos, intentar contactar con ellos nuevamente, debemos coordinarnos para que todos salgamos vivos de aquí.
Mis ojos observan como el caos se ha desatado en la otra punta de la isla, pero en cambio los disparos se escuchan más cercanos, por eso debemos mantenernos en movimiento constante.
Damien me mira mientras que sus manos siguen en mi cintura sujetándome y cubriendome con su cuerpo, es extraño mirarlo con otros ojos en estos instantes, al igual que pronunciar su verdadero nombre en mi mente, pero aún así su mirada sigue siendo la misma de todo este tiempo, eso es lo único que no se siente extraño.
Miro sus ojos y veo que no cruza ninguna emoción, pero aún así se que está preocupado por la situación en la que nos encontramos, al igual que intenta transmitirme calma ya cual el no tiene.
Ambos sabemos que estamos muy lejos de los nuestros, ahora se que somos del mismo bando, ya no hay ninguna duda sobre sus intenciones, me ha demostrado que somos un equipo en todo momento.
El me deja apoyada en un árbol mientras que no deja de observar a nuestro alrededor, escucha como los drones siguen sobrevolando el cielo pero aún así parece que no están en la misma área que nosotros.
Me pasa el teléfono y yo enseguida marco el número qué me se de memoria, mientras que no dejo de mirar a todos los puntos que hay en nuestro entorno sin concentrarme en ninguno.
—¿En qué punto os encontráis?—habla Armand al segundo de contestar la llamada, sonrió levemente mientras que escucho a su alrededor todo el caos, haciéndome saber que el está en el campo de batalla—Marcell o como te llames cabron, dime cómo está mi hermana en este instante —habla con desesperación haciéndome saber que el tampoco sabía de la relación que tenía el con mi padre.
Mi mirada vuela a él que sonríe levemente al escuchar a mí hermano, veo como en sus ojos se expande el cariño que también le tiene a él.
—Estoy perfectamente nene—hablo mientras que mis ojos enfocan un dron, haciendo que mi brazo se apriete contra su cuello y el se de cuenta enseguida, ocasionando que nos cubra entre los arbustos más cercanos de un solo movimiento—no hay mucho tiempo, hay drones cubriendo todo, estamos en la otra punta de la isla que habéis empezado a destruir—digo en susurro mientras que observo como el está muy cerca de nosotros, lo siento en el aire, el tiempo se nos acaba.
Escucho a mí hermano maldecir comenzando a dar órdenes a diestra y siniestra mientras que escucho muy cerca nuestra que los disparos avanzan a paso veloz.
—Entrare en el sistema operativo de los drones, intentaré reducir las coordenadas que tenemos gracias a la señal—habla mientras que respiro sabiendo que pronto estaremos juntos —hemos cubierto toda la isla, estamos cazando a esos hijos de puta—habla con rabia mientras que se escucha otra voz a sus espaldas.
—Debes ser moviéndote, los federales y la dea están atracando sus barcos en la otra punta de la isla—maldigo por lo bajo al escuchar las palabras de mi padre.
Lo que me faltaba en estos momentos, el tener también aquí en medio a un ejército de policías con una sola misión.
Capturarnos a todos.
La mano de Damien se pone sobre mi boca cuando voy a hablar, haciendo que me calle y siga su mirada hacia un claro cercano que nos deja ver el bosque.
Dos hombres totalmente armados de Kalid se han parado mirando para todos lados, llevan una radio en la que puedo escuchar de aquí otra vez su voz.
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El sacrificio de la reina (+21)
Teen FictionUna chica que luchó tanto para desvincularse de la mafia, que solo ansiaba la paz de las pequeñas cosas de la vida.. Quién le diría a ella que se sacrificaría por las personas que más amaba, que dejaría absolutamente todo para adentrarse en las fila...