• Lavander Haze • F1

054; ERES MI EVANGELINE

『54』

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— Pierre... – no sabía si era la emoción por la carta o por tenerlo enfrente

Pero estaba que le temblaban las piernas.

— Joyeux Noël ma belle – camino hasta  ella quedando un poco separados
— Feliz navidad mis ojitos – ¿Era normal sonreír tanto – ¿Tu familia no se...
— debía darte tu regalo personalmente ma Belle – ella nego con la cabeza
— sabes que no es necesario
—

la reina más bella por aquí – se acercó a ella sujetando su mano con cuidado – ¿Me quiere solo a mi? –

¿Cuántas veces se lo había dicho? ¿cómo es que aún lo recordaba?

— ¿Me permites está pieza? – jamás dudaría en aceptarlo

En celular tocó el play justo en dónde le había cantado al inicio.

— siempre hay un método de amar – el corazón comenzó a dar brinquitos – y te amo Alliée –

Con su mano izquierda sujeto la cintura y con la derecha la mano de la mexicana para comenzar a moverse al ritmo del saxofón que sonaba, le dió una vuelta haciéndola soltar risitas nerviosas pero era un sentimiento que no había sentido más que solo con el.
Los ojos de Pierre brillaban al observar cada facción de ella, le fascinaba por completo y sin duda, haría esto y mucho más por ella solo por mantener esos bellos recuerdos con ella.

— mira el cielo encender – fueron parando poco a poco – t'aime Alliée

Las familias observaban desde la ventana escondidos entre las cortinas la escena que estaba armando el francés, y Karime no estuvo más que emocionada por su hija, deseaba tanto que su pequeña no sufriera mal de amores y sabía que con el francés eso sería imposible, quería que su hija quedará en buenas manos cuando ella no estuviera más.

— ¿Seguimos con nuestra oportunidad juntos? – Ally rio despacio
— me dices 'te amo' y luego preguntas eso – enarco una ceja – siempre vas a obtener un si de mi ojitos – el brillo fue más

Se agachó un poco mirandola pidiendo permiso para su siguiente paso el cual ella no nego y termino de romper el espacio entre ellos, teniendo el beso que tanto anhelaba Pierre, aquel que le hizo saber que ella era tan correspondiente de su amor.

...

David escuchaba atento con una mirada sería intentando intimidar al francés que realmente si lo estaba intimidando pues lo hizo tartamudear algunas veces, pero realmente le parecía tierno el hecho de que Pierre le estuviera pidiendo permiso para que Ally y el fueran pareja, eso le dejaba en claro sus valores como hombre.

— solo si usted me lo permite – trago saliva

David no era un hombre malo, era ese tipo de hombre que al verlo en la calle te daba la apariencia de estar siempre molesto pero es todo lo contrario, sus hijos le decían que era como un peluche que se dejaba chantajear con mazapanes.

— lo dices como si estuvieras pidiéndome la mano de mi hija – soltó una risa burlona quitando el ambiente tenso
— eso...será más adelante – a David se le borro la sonrisa
— no hagas nada que mi hija no quiera – el francés nego rápidamente – ambos sabemos que Alonso fue un imbécil – el asintio de acuerdo – no quiero que mi hija salga lastimada...aunque bueno son cosas que en algún momento van a pasar – suspiro
— desde que la conocí siempre me ha gustado – David sonrió – no la haría llorar jamás
— aveces no nos damos cuenta Pierre – pauso dejando su tequilero en la mesita – pero las hacemos llorar...por experiencia lo se – recordó algunas discusiones con Karime – pero son etapas ¿sabes? – los ojos azules lo observaban atento – no todo será miel sobre hojuelas y es algo que debes tener presente – Pierre asintio

Ay, la historia de David y Karime era algo que Martin y Ally tienen muy presente.
Los Yazbek no aceptaban a David, pero este último era el mejor amigo de Luis que bueno, fue el cupido en esta historia.

Pero está es historia para otro capítulo.

— has feliz a mi hija – Gasly asintio sin pensarlo – respetala y...amala como dices hacerlo – sonrió
— gracias señor Sante... Sánchez – David soltó una suave risa
— de que ...ahora ve con mi hija de seguro te espera – Pierre asintio y antes de irse estrecho la mano con David

Un suspiro pesado salió de el que lo hizo llevarse una mano al pecho, cerró sus ojos un momento recordando a sus hijos cuando eran más pequeños, Ally jugando al té con su mamá y Martin jugando béisbol con el, o las primeras veces que llevo a Ally al karting, el brillo en sus ojitos cuando tuvo su primer coche para competir.

Su hijo Martin estaba a un mes de casarse teniendo un buen futuro en el béisbol, su pequeña princesa estaba triunfando en el mundo del motor sport, Karime y el hicieron un excelente trabajo con sus hijos.

Los amaron, los apoyaron.

Y eso estaba dando sus frutos.

— aún recuerdo sus sonrisas distraídas al ir a la escuela

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¿lloramos?

Ustedes: