Animales || Ohmnanon

53

🦁➖️

Me apoyo en la pared, junto al lavabo, agradecido porque Jimmy siempre sabe que decir.

—Yo comprendo lo que dice, no sé si puedo rechazarlo siendo tan inferior.

—Si va a ponerse en esa posición porque no quieres salir con él, tú estás por encima —le dice dándole un beso en la frente— ¿Quieres que te compre una botella de agua?

—Estoy bien —responde Nanon haciendo un puchero.

—La traeré de todos modos.

Aclaro mi garganta, cuando estamos solos, pensando en lo que voy a decir.

Es que estoy enojado.

—¿Estabas almorzando con él? —le pregunto parándome en frente.

Jimmy ya hizo el trabajo de empatizar y darle una charla motivacional.

Yo quiero respuestas.

Sé que sí, porque desvía la mirada.

—No sabía como decirle que no —dice soltando un suspiro.

—Es simple aprender, abres la boca y le dices que no —le explico irritado— así evitas socializar con los idiotas.

—Él era amable —susurra sin mirarme.

—Sí, ya escuchaste la razón.

Ahora quiero golpearme, porque está triste de nuevo.

—Lo siento —dice haciendo un puchero pequeño.

—No es tu culpa —le aclaro acercándome y agarro su rostro— me molestó escucharlo porque él creía que estabas disponible para intentar algo.

Agarro su labio inferior con mis dientes, y jadea abriendo la boca.

Lo sostengo para besarlo, presionando mi cuerpo con el suyo.

—No lo estás —agrego respirando con dificultad contra sus labios y él me mira a los ojos.

Me invadió por un momento la necesidad de decirle que Nanon no va a salir con alguien más.

Porque no puede hacerlo.

Desde que Dew se acercó, mi parte animal no podía tolerarlo, porque los leones somos extremadamente territoriales.

—Le había dicho que no quería salir otra vez con él —me explica haciendo un mueca— no me importa nadie que no seas tú.

—¿De verdad?

—Estoy enamorado de ti —dice evitando mi mirada.

—Bueno, escogiste bien —respondo alejándome— porque yo si soy el premio mayor.

Sonrío, porque se ríe.

—¿Lo eres?

—Sí, y tienes mucha suerte realmente.

—¿Por qué? —me pregunta con curiosidad.

Leí el otro día en internet que cuando te enamoras, el cerebro le indica al corazón sustancias químicas que aceleran sus latidos.

Eso explica porqué estoy a punto de sufrir un colapso ahora que voy a decirle como me siento.

Me sorprende la cantidad de cosas que he aprendido solo para intentar entender lo que me sucede cuando Nanon está cerca.

No leía por mi propia voluntad desde el colegio, soy casi alérgico a obtener conocimientos nuevos.

—Porque yo también estoy enamorado de ti —le digo casi temblando, por lo nervioso que estoy.

Él me mira, y sé que está triste.

—Si estás bromeando...

—No es una broma —suelto interrumpiéndole— yo estoy enamorado de ti, ¿está claro?

Cierro los ojos, porque me besa él, y quiero ignorar todo en mi vida a cambio de sentirme así todo el tiempo.

No me había sentido feliz desde que murió mamá, hasta que Nanon entró a mi vida.