Soñé que recogía conchas cuando la vi tomando el sol sobre las piedras negras. Corrí todo lo que pude para verla de cerca, pero escapó. Comencé a trabajar de pescador junto con mi tío, y un día me dejó ir yo solo porque él estaba enfermo. Algo atoraba mi red de pesca, y cuando pude sacarla del agua, la vi, la misma sirena. Logró romper la red y huir.
Nadie me creyó, pero un mes después salió en las noticias una foto deella que un turista pudo tomar.