Extra · ¿Por qué me escogiste?

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Era una fiesta muy especial, la mejor oportunidad de Arendelle para conocer nuevos socios comerciales y quizá ganar alguna alianza con los reinos más fuertes. Honeymaren y Elsa cruzaron el mar para pasar unos días bebiendo hasta caer desmayadas, comer hasta reventar y bailar hasta quedarse sin pies. La velada era hermosa. Los músicos tocaban una canción suave y lenta, perfecta para el final de la noche. Honeymaren continuó apoyada en el hombro de Elsa mientras bailaban juntas, Elsa se inclinó un poco para besar la frente de su novia y justo entonces la música terminó para que los músicos agradecieran al público y marcharse. Las parejas se separaron después de unos segundos. La mayor tenía la mirada cansada, amaba pasar la noche en vela con su amante, pero a veces necesitaba una buena noche de descanso. Honeymaren entendió el cansancio de Elsa y se dirigieron a la habitación que les fue asignada.

—Han sido días pesados —mencionó Honeymaren quitándose los molestos zapatos de tacón. Jadeó de alivio cuando se deshizo de las molestas prendas ajustadas sobre su cuerpo. Elsa, la cual yacía en la cama con un cojín sobre el rostro solo bostezó y se acomodó mejor.

—Mañana hay más cosas que hacer —continuó Elsa —. Por favor, ya ven a dormir.

Honeymaren se estiró antes de entrar en la cama con Elsa. Su cuerpo crujió y la platinada siseó.

—Estoy segura de que eso no es sano. Acércate, voy a darte un masaje.

— Pensé que tenías sueño —Elsa bostezó un segundo después, pero le hizo una señal a Honeymaren para que se acercará. La morena obedeció e hizo lo que Elsa le pedía. Se recostó boca abajo y dejó que la mayor sobara su espalda con las manos frías. Un rato después volvió a bostezar —Ya puedes parar. Necesitas dormir —le sugirió Honeymaren y Elsa aceptó.

Elsa se acurrucó cerca de Honeymaren y ambas se cubrieron con la sábana. La noche transcurrió con velocidad, al despertar se bañaron y cambiaron para asistir a la reunión de la mañana. Fue terriblemente aburrido, pero Elsa tenía la habilidad de parecer presente en una conversación y dar las respuestas adecuadas aunque en realidad no haya prestado la más mínima atención. Cómo era costumbre, después de la reunión y antes del baile de la noche, las princesas, reinas y acompañantes eran libres de pasear por el país. Elsa ya conocía los mayores atractivos de la ciudad y llevó a Honeymaren de paseo, colmándola de regalos, besos y caricias durante el viaje. Elsa observó que Honeymaren se había detenido a ver los puestos de un local, específicamente un suéter de lana pintada.

—¿Lo quieres?

—Nah, solo me pareció lindo el color —Honeymaren estaba dispuesta a seguir adelante, pero cuando se percató, Elsa ya le había comprado el suéter —. Oye.

—¿Recuerdas que será invierno cuando regresemos al bosque? Necesitas cubrirte —la mayor se inclinó para darle el regalo y de paso robarle un beso, pero la princesa Agatha; la anfitriona, las interrumpió.

—Disculpe, Majestad, la necesitamos en una pequeña reunión informal. Mis guardias pueden escoltar a su... Pareja, de vuelta al palacio.

— Hm, está bien —Elsa se giró de nuevo hacía Honeymaren y le dio un fugaz beso en la mejilla —. Te veo más tarde.

Honeymaren no tenía más opción que aceptar. Se despidió de ella y tal cómo dijo la princesa, un guardia la llevó de regreso al castillo. Pasaron algunas horas y al cabo de un tiempo los invitados regresaron. Elsa se mostró más seria de lo usual, desconcertando a Honeymaren. Cuando le pidió una explicación, ella aclaró que solo seguía cansada y decidió ir a dormir un rato antes de que iniciara el baile de esa noche. Honeymaren aceptó esa excusa y comenzó a dar vueltas por los pasillos, mirando las pinturas de las paredes en marcos dorados, hasta que un grupo de mujeres la llamó. Ella las podía reconocer, eran las amantes de príncipes, duquesas y otros miembros de la nobleza. Se acercó a ellas y le invitaron algo de beber. Se sentó en medio de ellas, en el único lugar disponible en el pequeño grupo. Durante un rato la conversación fue agradable, hasta que el tema principal se volvió hacía Honeymaren.

Elsamaren • One-shots (songfics)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora