*Este capítulo cuenta con material que puede incomodar a algunos lectores. Se recomienda leer con precaución.
(***)
Todo había sido un desastre total. Su pequeña treta para pretender un matrimonio se había vuelto en su contra convirtiéndolo en un matrimonio real por obligación. Honeymaren sabía que era una mala idea desde el principio, sin embargo parecía ser un inocente juego que solo serviría para quitarles uno o dos problemas de encima al precio de sumarles más caos a sus vidas. Elsa se sentía avergonzada, no sabía cómo el engaño había escalado a esa magnitud.
Su "luna de miel" se había convertido en una triste noche. Ambas recordaban entre espejismos de sus ilusiones lo que realmente había pasado, había trozos fuera de lugar y uno que otro recuerdo mal guardado. Elsa le había pedido a Honeymaren ayuda para fingir un matrimonio falso y quitarse a la prensa que le buscaba un esposo a diestra y siniestra, el pago para Honeymaren serían joyas y tesoros o cualquier recurso que solicitará si mantenían la farsa el tiempo suficiente para que los periódicos se rindieran en su búsqueda por comprometerla a la fuerza. Aunque habían logrado su cometido, se envolvieron en un peor problema. Ahora la prensa suplicaba a gritos que Elsa y Honeymaren se casaran para darle punto final al asunto y así fue tras un arrebato de juicio en el que ambas habían sido descubiertas besándose a escondidas en una zona del bosque tras las colinas.
Con las fotografías y titulares del periódico en cada hogar del reino se vieron forzadas a cumplir y anunciar una boda, comprometerse y vivir su luna de miel.
Honeymaren llamo a Elsa con un grito de rabia tras enterarse que su noche de bodas era en habitaciones separadas.
— ¿A esto le llamas luna de miel? He visto animales más apasionados que esto - mostró la madera crujiente, el techo agujereado y el apenas acogedor fuego de las débiles velas.
— Claro que el sitio es horrible, es una posada en medio de la nada. Solo descansaremos esta noche y mañana al amanecer retomaremos el camino a la cabaña de mi abuelo para seguir disfrutando nuestra apasionante luna de miel - su voz ronca de impotencia le parecía atemorizante. Durante los meses que conocía a Elsa jamás la había visto de ese modo. Errante, desmotivada, furiosa, amenazante —. Tampoco me encanta dar vueltas en una habitación vacía cuando se supone tengo a mi esposa a un lado.
— Estamos arruinadas.
— No dije eso, Honeymaren.
— ¡Oh! Disculpe, su alteza - hizo una burlona reverencia y Elsa retiró la mirada conteniendo su rabia —. ¡Soy tu esposa y no te haz dignado en verme a los ojos desde que estuvimos en el bosque hace una semana! ¿Cómo planeas corregir el desastre que hiciste?
— El desastre que hicimos - corrigió subiendo la voz.
— ¡Fue tu error! Tú fuiste la que me beso - recordó evitando mencionar que ella correspondió e incitó a otro beso. Encendiendo sin querer una pequeña llama que ansiaba volvieran a unirse.
— ¡Ya sé que lo arruine! Arruine tu futuro.
— No... - interrumpió recapacitando, dejando que la llama en su interior siguiera con más fuerza que antes —. Yo fui quien arruinó tu futuro. Querías deshacerte de los pretendientes para ser libre de esto y te termine atando igual.
— Honey, espera.
— Sé que no sientes lo mismo, pero yo estoy ardiendo. Ardo por ti.
— ¿Ardes por mi? - quedaron en silencio apenas un segundo antes de que Elsa volviera a hablar para hacer una confesión —. Yo ardo por ti. Me tienes ardiendo por ti. Desde hace tanto tiempo que mi cuerpo se quema con cada minuto que pasa.
Quedaron anonadas, aunque hubo juegos y coqueteos entre ambas durante su treta, ambas podían jurar que solo eran eso, juegos durante su artimaña para engañar a los periodistas.
Honeymaren fue quien dio el primer paso al frente para tomar las manos frías de Elsa.
— ¿Es verdad? - pregunto apenas con un hilo de voz. Elsa inclinó la cabeza hacía abajo uniendo su frente con la morena.
— Es verdad - admitió débilmente, dejando que sus acciones hablaran por ella. Volvió a besarla de forma desesperada, ansiando ser detenida antes de perder por completo la razón, pero no fue así. Ambas se necesitaban la una a la otra. El fuego que las consumía desde el interior no podía ser apagado con palabras.
Honeymaren profundizó el encuentro dirigiendo sus manos hacía la nuca de Elsa. La platinada, con sus manos libres opto por presionar a su compañera contra su cuerpo. Siendo insuficiente su contacto, dudó de si era correcto continuar.
En ese momento, la morena se volvió más atrevida y buscó los lazos del vestido que portaba la platinada. La ojiazul dejó que sus deseos tomarán el control, sostuvo a la morena y la alzó en brazos para recostarla en la cama con mantas oscuras y almohadas maltratadas por el tiempo. Incluso si no era un cuarto de cinco estrellas, ambas solo ansiaban aliviar el fuego en su corazón. La platinada descendió para cubrir su cuello y busto con besos y suaves mordidas que dejaban marcas apenas visibles con la luz de las velas.
Por primera vez en su vida, realmente sentía que ardía. Realmente había fuego calentando su corazón. Acaricio la pierna de la morena por debajo del vestido.
Bastaron segundos para quedar en camisón, anhelando consumar su unión. Honeymaren le dio vuelta a su esposa, quedando sobre la platinada. El intenso rubor en ambas delataba que ya estaban listas para lo que fuera a suceder. Entre besos y caricias que escalaban por sus muslos hasta el vientre y debajo de este.
Suspiraron tras romper un acalorado beso, al recuperar el aliento siguieron explorando sin pudor la piel desnuda de la otra. El deseo ardiente en sus ojos resplandecio con hambre.
— Quiero que me mires a los ojos - ordeno firmemente antes de presionar sus manos contra el gastado colchón.
Finalmente se encaminó despacio por su cuerpo hasta que el fuego ardiente que las consumía fue aliviado.
La cera de las velas se agotó casi por completo, apenas dejando un destello en la oscura habitación.
Elsa exhaló con la voz tambaleante. Dejó que el sudor de su frente se limpiara en la almohada.
Honeymaren la observo un instante con una sonrisa.
— ¿Hm?
— ¿Qué es lo que decías... Sobre la cabaña de tu abuelo?
Elsa no pudo evitar reír después del comentario. Se tomó un segundo para recobrar su voz tranquila y dulce.
— Dije que nos iremos al amanecer, y disfrutaremos nuestra apasionante luna de miel como es debido - repitió e inesperadamente Honeymaren se acercó más a ella para volver a besarla.
— Falta mucho para el amanecer... ¿Algo que quieras hacer mientras esperamos? - tocó su abdomen, haciendo que sus dedos desfilarán hasta llegar a su clavícula.
(***)
*Nota: Andaba en tiktok viendo clips de series geis y me salió la canción Burn for you de Bridgerton y me eche la serie para conocer el contexto y salaverga, ninguna telenovela me tenía así de impactada. Me inspiró tanto la canción del musical que decidí escribir este one-shot. Anduve en sitios turbios de Internet pa saberle al smut y aún así no me animo a escribirlo xd LOS QUE ME LEIAN DESDE 2017 PORFA, KALLENSE EL OSICO :( Por qué me da pena y me desaparezco de wattpad.
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Elsamaren • One-shots (songfics)
DiversosTodos los songfics publicados aquí serán Elsamaren (Elsa x Honeymaren) de la película Frozen II. •Los one-shot no comparten continuidad entre sí, por lo tanto se pueden leer en cualquier orden. •Algunos one-shot pueden contener material explícito...