capitulo 12

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Bajo las colchas de esa aplica cama se encuentra una pequeña figura, sonriendo y pataleando repetidamente era su manera de expresar que se encuentra alegre. Confuso ante todo lo que le a pasado pero alegre.

Se encuentra de esa manera porque no hace mucho probó comida deliciosa que no había probado, mejor dicho que no sabía que existía. Que el chocolate se pueda derretir en su boca lo dejo sorprendido, los adultos solo lo veían y sonrían al ver esos ojos brillantes.

También les daba mucho pesar que Fenny no fuera lo suficientemente alimentado en su casa, el doctor les hizo saber a lo señores Koch, que Fenny está desnutrido. Está falto de calcio y de vitaminas. Escuchar eso fue para que Arlon y Xiao se pusieran todavía mas furiosos con esa familia Kendy.

Si fuera por ellos ya los hubieran eliminado del mapa sin embargo, Huang les pidió que esto se lo dejarán él. Quién se encargará de hacerles pagar será únicamente él. Pero antes tiene que verificar que Fenny no sienta nada por su familia. Huang no quería herir a su querido de ninguna manera.

—Esto se siente como un sueño.—Sigue sonriendo.—Mi pequeño amigo tenía razón (está hablando de 015) él no me estaba mintiendo cuando me dijo que un día, conocería a un príncipe.—A su mente viene el rostro sonriente de Huang.—Que el me ofrecería su mano y yo debería aferrarme a ella.—Recuerda cuando conoció a Huang.

Desde el momento en que se encuentro con la mirada de Huang, el pequeño Fenny quiso abalanzarse sobre Huang. Sentía como su pecho se enloqueció al ver ese par de hermosos ojos. Fue raro y es por eso mismo que Fenny no quiso prestarle atención a esa extraña sensación.

‹No llevo mucho tiempo en este lugar pero me siento mas feliz que cuando vivía con mi familia, en esta familia todos me tratan amable, cálidamente mientras me sonrien sin doble intensión, sin maldad en sus ojos.

Eso es desconocido para mí y al principio me desconcertó tanta amabilidad, creía que me estaban haciendo confirmar en ellos para luego estrellarme con la pared de la ruda realidad. Que aquí no soy nadie pero no fue así, los empleados, padres, abuelos, y el propio Huang, todos ellos se preocupan por mí. ¿Por qué? ¿Por qué me tratan de está manera? Es por eso que tengo miedo.

Miedo de encariñarme de todos ellos y no quererme ir de este lugar, principalmente de Huang. Hay una extraña sensación en mi pecho cada vez que me habla dulcemente, cuando dice mi nombre con aquella mirada inocente y amorosa. ¿Por qué se preocupa tanto por?

En instante me preguntó si el traerme a su casa, fue idea de él porque tal vez vio en mi la tristeza que se desborda. Después de todo, él desde el momento en que me vio supo que era niño y no niña. Huang vio mi verdadero ser.› Sonríe suavemente.

Huang le comento que mientras vive con ellos no es necesario que se vista de niña, el dijo eso mientras le mostraba el inmenso guardarropa. Fenny nunca había visto tanta ropa bonita y de diferentes colores lo mismo sucedía con los accesorios, zapatos. El pequeño quedó fascinado aunque Huang tuvo que convencerlo para que lo tomara todo.  

—¿Fenny, estás despierto?—Toca la puerta.

El mencionado nerviosamente llevó su mirada a la puerta, sentándose bruscamente sobre la cama, no esperaba que Huang lo vinera a visitar de está hora.

—¿Sí?—Corre a la puerta al escuchar que Huang estaba por irse.—¿Qué necesitas?—Abre la puerta.

Fenny abrió sus ojos ampliamente al ver la cola y orejas del pequeño Huang, está sería la primera vez que Fenny ve la parte bestia del contrario.

—¡Hermoso!—Él ya estaba tocando la cola del contrario.—Suave y peludito.

—F-Fenny...—Tartamudeo.

Destruyendo las pequeñas historiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora