Luz Intermitente [Vmin]

063: Tiempo.

Okay, hola.

Está es una nota rápida, solo para decir un par de cosas.

Primero, no busquen una secuencia de tiempo real aquí, si bien voy a poner el avance de los meses para darnos un poco de orientación, no sigue una línea de tiempo particular porque esta parte cuatro es, más que nada, para ver un trasfondo de personajes y ciertas situaciones que nos llevan a como se desarrollan las cosas a futuro.

Segundo, planeo que no sea una parte muy extensa porque los capítulos en sí serán más largos que antes, pero espero que me tengan paciencia porque hay algunas cosas que quiero contar, así como otras que quiero suprimir, cosas que estaban en el au de twitter que no afectan el transcurso de la historia, pero que no tienen mucho que ver aquí. Lo he hecho antes, pero probablemente aquí se note más.

Con eso dicho, disfruten la lectura, y por favor, no olviden comentar [lloro si no comentan]

[Mayo...]

Taehyung movió la pierna incesantemente en un pequeño gesto nervioso, mordiéndose el labio inferior mientras esperaba que su noona le respondiese la llamada, cuando aquello pasó, no se contuvo.

―Noona, noona, ¡Noona! ¡Seulgi noona! ¡Mi noona! ¡Gi noona!

― ¡Dios! ―la escuchó quejarse audiblemente y luego un golpe hueco en lo que seguro fue su frente contra alguna mesa. ― ¡¿Qué quieres, mocoso?! ¿No deberías estar, no sé, estudiando?

Hizo un puchero inconsciente, aun si ella no podía verlo, lo hacía, porque esa era su mejor arma contra su agría forma de ser.

―Háblame bonito, noona, no me grites.

La escuchó gruñir por lo bajo. ―Taehyung...

Se encogió poquito entre los hombros, porque una cosa era él como Kim Taehyung el empresario, y otra muy diferente ser solo Taehyung, el mocoso insolente al que su noona de vez en cuando le halaba las orejas.

―Bueno...tengo un periodo libre hasta dentro de unas horas...―inició en un tono de voz tímido, sonando poquito avergonzado. Quizás algo soñador. ―Y casualmente Jungkookie sale entre ese periodo libre, así que pensaba-

―No.

Eso lo hizo refunfuñar y pronunciar más el puchero en sus labios.

― ¡No me dejas decir lo que quiero!

―Si es para Jeon, nada.

Rueda un poco los ojos antes eso.

―Solo quiero que le pidas a uno de los choferes que lleve mi auto hasta el colegio de Jungkookie, de allí me lo llevó yo y...―pasa un poco de saliva por lo siguiente que va a decir, acariciando el tanque de su adorada Wanda, como si la estuviese consolando. ―Y que se lleve a mi dulce Wanda.