Magia.

257 35 7
                                    

☾⋆⁺₊ Todobaku haciendo magia es tipo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

☾⋆⁺₊ Todobaku haciendo magia es tipo...✩°

Cinco de la tarde, un fin de semana, hora pique donde ya no tienes nada para hacer más que dormir, jugar, leer un libro, probablemente hacer tarea o preparar la cena con cinco horas de anticipación. O, en el caso del cenizo, aprender a hacer magia, claro.

— Shōto mira. 

El nombrado levantó la mirada de su libro para ponerle atención al chico que se encontraba sentado en su silla frente al escritorio, como acostumbraba a hacer. Entre sus manos tenía una baraja de cartas, la cual el bicolor podía reconocer como aquella de su personaje favorito de cierto juego. Hacía ciertos movimientos extraños pero atrayentes con estas, hasta que las volvió a reunir, ordenadas.

Katsuki se levantó y caminó hasta la cama, sentándose a un lado del menor en cuanto este le hizo espacio. Entonces, colocó la baraja de cartas sobre el colchón y miró atento al bicolor.

— Haz un corte.

Shōto lo miró algo confundido, sin saber exactamente a qué se refería. El mayor esperó varios segundos antes de explicarle silenciosamente cómo era hasta que comprendió, así que tomó la mitad de las cartas y las dejó a un lado. El lindo diseño del dorso de ellas le llamaba mucho la atención: era la silueta de un gran gato al medio mostrando sus filudos dientes y todo el fondo eran rombos de al menos tres distintos tonos de rojo.

— Bien, ahora mira la última carta de este montón — ordenó, apuntando las cartas que pertenecían a la parte de abajo de la baraja — y, sin mostrarme, dejala sobre este otro. — apuntó entonces al siguiente, volteando su mirada hacia un lugar x en el cuarto. El menor asintió e hizo lo qur le había pedido.

Analizó su carta con mucho detenimiento para poder memorizarla bien, puesto que era un diseño completamente distinto a los que se conocían mundialmente. Una vez lo tuvo grabado en su cabeza, lo dejó donde le había indicado su prometido. Un pequeño "listo" salió de sus labios, dándole a entender a Katsuki que ya podía voltear.

Entonces este tomó el montón de abajo y lo puso sobre el otro, donde había dejado su carta el bicolor, cortó dos veces más de manera dispareja y luego levantó su mirada, completamente concentrado, hacia su pareja.

— Siento que una carta se dio vuelta.

— ¿Eh? — Shōto ladeó levemente su cabeza, sin comprender. Se sentó en el colchón, para prestarle más atención a lo que hacía el mayor, y observó lo que seguía.

— Sí, mira.

Entonces deslizó todas las cartas sobre la cama y, efectivamente, una de ellas estaba volteada. La expresión confundida y a la vez maravillada del bicolor provocó una ligera sonrisa en el cenizo, quien apartó las cartas que estaban sobre aquella volteada boca arriba y tomó el resto entre sus manos.

— Pero... esa no es mi carta. — anunció Shōto entonces, algo desconcertado.

— Ah, claro... Dije que una carta se había volteado, no que era la tuya. Esta es mía, es mi guía. — le dedicó una sonrisa de superioridad mientras dejaba aquella frente al chico. Era un cinco, ¿de qué? Shōto no tenía idea, pero era un cinco. — Y mira, me está diciendo la carta que siga cinco más adelante.

Una pequeña mueca de no entender nada se dibujó en el rostro del menor ante aquella frase. Cuando el mayor comenzó a contar carta por carta hasta la que ocupaba el lugar de aquél número, se quedó completamente estupefacto, recalculando todo.

— Es esta, ¿no? — Shōto asintió lentamente, observando atento la carta que anteriormente había tenido que memorizar. La tomó entre sus manos para poder analizarla nuevamente, procurando que fuese la misma, y así era. — Ah, también, mira esto.

Entonces lo dejó aún peor cuando su vista se dirigió a las cartas que yacían boca abajo frente a él sobre el colchón. El cenizo dio vuelta cada una de ellas bajo la atenta mirada heterocromática de su prometido, quien soltó un pequeño chillido de sorpresa al ver los cuatro ases.

— ¡¿Cómo mierda hiciste eso?!

Shōto se exaltó "levemente". Se inclinó sobre las cartas y las tomó una por una, analizandonas, queriendo encontrar la forma de que su chico las hubiese hecho aparecer allí, pero no entendía nada.

— Magia~. — ambos chicos se miraron, uno con una sonrisa satisfecha por su "gran" truco de magia —el cual había aprendido apenas unos minutos antes—, y el otro asombrado como si de un niño pequeño se tratase.

— ¿Me enseñas?

Katsuki asintió antes de reunir todas sus preciadas cartas para acomodarlas y comenzarle a explicar.

El resto de la tarde se la pasaron de aquella manera, el cenizo mostrándole y explicándole los pocos trucos que sabía al bicolor mientras este se maravillaba con cada uno de ellos.

Al final no tocó más su libro.

Me compré las cartas de Lyney y voy a ser esa en unos días queriendo aprender a hacer truquitos de magia JAHAJAJAKSKD

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me compré las cartas de Lyney y voy a ser esa en unos días queriendo aprender a hacer truquitos de magia JAHAJAJAKSKD.

En fin.

Por cierto, para los que quieran aportar con ideitas para capítulos, como cositas específicas que quieran ver acá, en mi tablero hay un formulario y la weá para que me pidan cosas, es el mensaje más largo de los más recientes.

Esoo buenas noches.

Comenten mucho btw pq me deprimo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 06 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

TodoBaku In...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora