...Alexa...
-no lo creo-escuchaba aún su voz en mi cabeza-no eres tan mala como aparentas, me lo has demostrado, detrás de todo eso que quieres proyectar hay una chica algo rota que necesita ayuda, yo podría ayudarte si me lo permites.
Tonto, tonto, tonto, Lucas Blake.
Llegué a casa y me escondí en mi habitación, algo que no hacía hace mucho.
Me quedé mirando al techo pensando en nada, aguantando lágrimas, todo porque nadie jamás me había dicho algo así. Nadie se daba cuenta de que yo era como era para esconder a aquella niña llena de miedos que vio morir a su madre. Y es que...¿Quién se preocuparía por alguien como yo?
Una que otra lágrima rodó por mi mejilla, las sequé al instante e inhalé profundo.
No tengo tiempo para ser débil ahora, así que me repetí mil veces "estoy bien, no es nada", tal vez logré creerme mis propias mentiras.
Me di una ducha para enfriar mi cabeza y si era posible mi corazón pues desde comencé a sentir un "cariño" especial por Lucas toda mi vida se ha venido abajo. Aunque también desde que me enteré que tengo un hermano. Salí de la ducha, me puse un pantalón negro para dormir, una blusa gris y un suéter fino también de color gris, medio medio peiné mi cabello y bajé a la cocina por algo de comer.
Me senté en el sofá con un platón de cereal, solo por el simple hecho de que me dio flojera hacerme algo de comer. Estaba viendo un poco de la típica programación de la televisión hasta que recibí una llamada a mi celular.
-habla-dije sin muchas ganas-
-Hola, Kate-era la voz de Sebastián-
-¿Qué quieres?-me metí cereal a la boca-
-hoy a las 11:30 p.m en la esquina de la mansión-me dijo-
-¿Para?-pregunté-
-robo de armamento-me explicó-Hall quiere ver nuestras habilidades, menudo tonto
-estás celoso de que alguien mejor te robó tu puesto-le dije burlona-
-me vale ese chavo-bufó-es un pesado
-y tú otro-le dije-
-ya, Kate-me dijo-deja eso
-vale-me acomodé en el sofá-¿trabajará todo el equipo?
-sí-respondió-Max y Nicholas ya anduvieron rondando la zona y nos informaran esta noche, James dijo que las municiones y armas las tendría listas, y bueno...Brianna hizo lo que debía hacer
-¿puedo preguntarte algo?-dejé mi cereal de lado-
Nunca he hablado más de unas frases o palabras con Sebastián, no somos precisamente amigos pero, desde que trato con más con Brianna me he preguntado a que se debe las peleas entre Sebastián y ella.
-dale-me dijo él-
-¿por qué Brianna y tú se odian tanto?-le pregunté-no lo recuerdo así hace algunos años
Hubo un corto silencio que me hizo dar más curiosidad aún pero la respuesta de Sebastián no me dijo nada.
-eso no importa-respondió él-debo colgar, nos vemos Kate
Colgó la llamada y me dejó con la duda encima.
Tendré que indagar con Brianna, lo cual será más difícil aún.
Llegada la noche me alisté para ir al trabajo, unos jeans negros, unas botas del mismo color, una blusa azul y una chaqueta. Tomé la mochila en donde guardo las armas y municiones; y salí rumbo a la mansión.
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La chica de cristal
Teen FictionA veces perdemos el rumbo, quedamos confundidos y perdidos. Olvidamos quienes somos y de donde partimos. Nos tiramos al camino de la vida sin saber si quiera a donde parar. Y es cuando encontramos junto a quien caminar. Alexa deberá aprender que la...