Capítulo LXXVII: De compras

1.7K 136 4
                                    

...Lucas....

En la noche después de comer junto con Adrián, Daniel y mamá, tuvimos una última ronda de videojuegos que por un grandioso milagro gané; hasta yo me sorprendí pero según mi amigo, él me dejó ganar. Es un pésimo perdedor.

En fin, mamá fue a hacer dormir a Daniel y yo me fui a mi habitación, estaba cansado, me dolían un poco los brazos y la espalda, cargar toda esa madera de arriba a abajo para la casa del árbol me dejó exhausto. Me di una ducha algo larga, me coloqué una pantaloneta gris y dejé la camisa en un extremo de la cama, ahora mismo no me place ponérmela. Simplemente me tiré en mi cama y me dormí al instante.

🍁🍁🍁

A la mañana siguiente escuché como alguien tocaba la puerta de mi habitación, gruñí y me cubrí con la colcha por completo, no tenía intención de levantarme, aún me gana el sueño. Siguieron tocando la puerta y realmente no quería despertar, bufé ya algo molesto y cerré mis ojos con mayor fuerza. Pronto dejé de escuchar ruidos y mi sueño comenzó a volver de a poco, cuando mis parpados estaban a punto de cerrarse en ese profundo sueño, escuché girar unas llaves y la manija de mi habitación.

-Lucas...-escuché la voz de mamá-

-hmm...-gruñí un poco nuevamente-

-vamos a ir de compras con Daniel-me dijo-así que...

-que les vaya bien-interrumpí con mi voz de recién levantado-traigan comida

-nada de eso jovencito-sentí como jalaba mis sábanas-

Giré a verla y de apoco abrí mis ojos, se adaptaron a luz algo ténue de mi habitación y la que provenía del pasillo. Fruncí el ceño ligeramente e hice por sentarme en la cama.

-pero mamá...-me quejé adormilado-¿por qué tengo que ir?

-porque es el único momento que tengo para estar con ustedes-me respondió-

-¿dónde quiere ir Daniel?-me llevé la almohada al rostro-

-anoche me dijo que el cumpleaños de Jine se acerca-dijo mamá en semblante risueño-quiere comprarle un lindo regalo, y nueva ropa para él

Rodé los ojos y asentí.

-estaré listo en media hora-me resigné-

-buen niño-ella me sonrió y salió de la habitación-

Me paré de la cama y arrastré mis pies hasta la puerta del baño, con toda mi pereza encima intenté quitarme la pantaloneta sin dormirme parado, a la final nunca me puse la camisa. Terminé por ducharme en 15 minutos y cambiarme en 10 más, los otros 5 los usé para peinarme y guardar mis cosas.

Miré la hora antes de bajar.

-8:45 a.m-dije-¿quién sale de compras a esta hora en domingo?

Cerré la puerta y bajé las escaleras con algo de prisa, ya que me habían despertado al menos quería comida.

-listo, mamá-le dije una vez en la sala-quiero desayunar

-lo haremos fuera-me respondió-

Levanté una ceja y caminé hasta llegar con ella, estaba sentada en el sofá, peinando el cabello de Daniel.

-pero tengo hambre-hice puchero-

-lo sé-me miró-ya nos vamos, tranquilo

-Buenos días, Lucas-Dani me sonrió animado-

-¿Qué onda, enano?-le hice señas con la cabeza-

-¡mamá nos llevará de compras!-levantó sus bracitos-

La chica de cristalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora