La chica de cristal

Capítulo XCII: Huída

...Alexa...

Florecita.

Sus palabras no dejaban de retumbar en mi cabeza, se habían vuelto un eco que en vez de disminuir, aumentaba y verdaderamente me estaba afectando. Sabía que él disfruta al ver mi reacción y eso era lo que yo no quería, no permitiría que hiciera esto, que con sus tontos jueguitos se terminara saliendo con la suya. Y aunque hacía un gran esfuerzo por no escucharlo, su voz entraba en mi cabeza, derrumbando todo a su paso. Tanto así que ni siquiera me había dado cuenta que había disparado hasta que escuché el estruendo.

Di un respingo y abrí los ojos como platos, Scott también se había alarmado, supongo no esperaba que dispara. La bala no dio contra nada en específico pero al menos sirvió para sacarme del shock.

-deberías tener más cuidado con eso-me dijo-no es un juguete

-yo sé lo que hago-hablé con voz firme, sorprendiéndome-

Pensé que empezaría a divagar.

-pues no me lo parece-respondió él-dime, ¿cuántos años tenías la última vez que te vi?

Mordí mi labio inferior con demasiada fuerza, tanta que lo solté de golpe.

-seis años-di un respiro-así que sabías que seguía con vida, maldito

-no todo el tiempo-explicó con tranquilidad-yo nunca le doy importancia a los equipitos de zona, mucho menos a uno conformado por niños como ustedes pero, de un tiempo a otro se volvieron lo mejor en su división, entonces pensé que tenían futuro

-menos parloteo-mascullé-al grano

-cuando envié a Elián con ustedes, los investigué un poco-me dijo-Kate Bell fue un nombre que se me hizo muy familiar pero al cual no di importancia, no hasta que comenzó a pasar tiempo con mi hijo

-¿nos seguías?-arqueé una ceja-

-Ian-sonrió-

Rayos.

-primero pensé que simplemente estarían saliendo-rió un tanto fuerte-pero luego me enteré de tu vecinito de enfrente y supe que no

La sangre se me heló al escuchar eso.

Tu vecinito de enfrente.

Sabía que mis presentimientos no eran por gusto.

-entonces decidí investigarte-siguió hablando-y ¿qué crees que descubrí?

-lo sé muy bien-lo miré con odio-

-¿sabes?-se me acercó un poco-creí que con todas esas amenazas que les envié se darían por vencidos pero son tan necios. Típico de los adolescentes

-sabía que esas misiones no fracasaban por gusto-gruñí-

-en efecto-él asintió-incluso lograron convencer a Freddy de unírseles y mandé a seguir a su "amigo" pero tampoco funcionó. También pensé en hacer lo mismo con ese vecino tuyo, y con Brianna para alertar a Max, pero no quise gastar hombres por gusto

-las vas a pagar todas-apreté mi arma-todas y cada una de las que nos hiciste

-pero tranquilo, me encargaré de que tengas una celda a tu altura en la cárcel-escuché después de tanto la voz de James-irás a dar a la prisión de máxima seguridad del estado y quiero ver que te escapes de eso

-linda reunión familiar-nos dijo-sin embargo, ¿cómo planean hacer eso? tal vez la policía me busque y quieran verme tras las rejas como ustedes pero, en gran parte estoy limpio