"Everything Has Changed"

Capítulo 49

Al día siguiente, cerca de las diez treinta de la mañana, Angie se encontraba desayunando cuando Nicola llegó sin aviso a su apartamento.

-Bueno días - saludó sonriente mientras cerraba la puerta tras él.

-Buenos días - respondió Angie.

-Que bien que ya estas levantada - se sentó junto a ella.

-Aun no me levanto - tomó un trago de café - estoy en pijama... - se señaló.

-Oh, cierto - dijo Nicola - cuando termines tu desayuno levántate rápido y con ropa cómoda - sonrió.

-¿Para qué?

-Saldremos.

-¿Dónde?

-Es sorpresa - le sonrió.

Cuando terminó su desayuno, hizo lo que Nicola le había pedido antes, se vistió con algo cómodo una blusa suelta y unos short. Dejó su cabello suelto y se maquilló un poco.

-Lista.

-Perfecto - sonrió - vamos.

Salieron del apartamento y subieron al auto de Nicola, anduvieron una hora hasta que llegaron a un lugar, era hermoso. Estaba lleno de arboles por todos lados, habían flores, se podía oír el canto de los pájaros... en fin, era un lugar hermoso y tranquilo, al aire libre.

-Llegamos - dijo Nicola estacionando su auto a un lado.

 Angie bajó del auto y miró todo a su alrededor con la boca entre abierta.

-¿Te gusta el lugar? - preguntó Nicola acercándose a ella.

-Es... es hermoso - lo miró sonriente.

-Me alegro que te guste - sonrió también.

-Pero, ¿por qué vinimos aquí?

-Ven... sígueme.

Camino entre unos arbustos y árboles, Angie lo seguía al mismo ritmo que él caminaba mientras más avanzaban, más claro se podían oír los sonidos. Era el sonido de agua cayendo como de una cascada, pasaron un par de árboles antes de que llegaran a su destino.

 Nicola miró a Angie sonriente antes de avanzar un poco para dejarla ver tan hermoso paisaje, Angie sorprendida miró el lugar y sonrió.

-Qué lindo...

-Sabía que te gustaría - sonrió ampliamente Nicola.

Frente a ellos había una especie de lago con una pequeña cascada de un lado. Adornado todo el lugar con el hermosos color verde de los árboles, y el colorido de las flores.

-Pero aún no entiendo cual es el motivo por el que me trajiste hasta acá.

-Bueno, cuando era pequeño acostumbraba a venir todos los domingos con mí bis abuela a este lugar. Le encantaba estar al aire libre, en contacto con la naturaleza - miró a Angie - y aquí fue donde aprendí a nadar, y aquí te enseñaré a nadar a ti - sonrió.

-Pero Nicola...

-Vamos Angie, quiero enseñarte a nadar, y este es el mejor lugar.

-No lo sé Nicola.

-Por favor - se acercó frente a ella y tomó sus manos - di que si - la miró fijo a los ojos.

 Angie desvió la mirada llevándola al lago y luego nuevamente a Nicola, se miraron por un instante en silencio hasta que Angie aceptó.

-Está bien - sonrió al mismo tiempo que Nicola.

-¡Genial! - dijo alegre.

-Si... pero hay un problema