"Everything Has Changed"

Capítulo 38

Pero Nicola no despertó ni se movió, solo soltó un gruñido.

-Hey Nicola ¿Qué haces durmiendo aquí? Ve a tu habitación.
-M... no - murmuro entre dormido - debo esperar a Angie...
-Nicola- rió bajo - soy yo... ya estoy aquí ahora ve a dormir a tu habitación.
-¿Ya estás aquí? - Abrió poco a poco los ojos para ver a la chica - Diablos, me quede dormido - se enderezo en el sofá - lo lamento Angie.
-No te preocupes, Mario me trajo.
-¿Mario? ¿Ya está todo mejor con él?
-Algo así... mañana te cuento mejor - sonrió - ya es tarde... ve a dormir.
-Si... mejor - sonrió - tengo bastante sueño - se destello los ojos.
-Entonces hablamos mañana - se levanto del sofá.
-Claro - repitió la acción de la chica.
-Buenas noches - se acerco a él para poder besar su mejilla - que duermas bien - camino en dirección a la puerta del apartamento.
-Dulces sueños - le dijo sonriente.
-Igual tu - dijo antes de salir del hogar de Nicola, para entrar a su apartamento.

******

-¿Entonces ya arreglaron todo entre ustedes?
-Al parecer si... la verdad, si... ya está todo bien con Mario
-Entonces... ¿Qué es lo que te tiene de esa manera?

Se quedo en silencio un instante pensando un poco, quería decirle a Natalie lo confundida que estaba entre Mario y Nicola, con respecto a los sentimientos que comenzaban a crecer por Nicola pero no se atrevía, bueno Natalie era su mejor amiga y podía confiarle cualquier cosa, pero de cierto modo no era capaz de decirle sobre Nicola.

-Dime, ¿qué ocurre? ¿Tienes algo que contarme? - insistió Natalie.
-No lo se... es que Natalie.
-¿Qué?

La miro en silencio mientras sus nervios comenzaban a consumirla, cada vez que se ponía nerviosa sus manos sudaban, y eso era lo que estaba ocurriendo en ese instante.

Bajo sus manos y las deslizo suavemente por su pantalón sin que nadie lo notara, pero para su mala suerte Natalie lo había notado.

-No entiendo - miro confundida - estas nerviosa, ¿Que sucede? ¿Algo te incomoda? - seguía insistiendo.

Tomo aire armándose de valor para hablar.

-Debo confesarte algo - la miro seria.
-¿Qué cosa?
-Pero debes prometer que no se lo dirás a nadie, ni me miraras extraño o me trataras distinto diciéndome cosas malas tal vez, porque se esto es malo, lo que me está pasando no es nada bueno y yo...
-¡Angie! - la interrumpió alzando un poco la voz - puedes confiar en mí.
-Ok - respiro profundo - creo... creo que me estoy enamorando de Nicola- se mordió el labio inferior e hizo una mueca.

Natalie se quedo mirándola sin decir nada, con los ojos bien abiertos de impresión.

-Que tú... dices que - balbuceo - es... ¿Hablas en serio?
-¡Claro que hablo en serio!
-Pero... ¿Y Mario?
-Mario aun es mi novio, aun lo quiero pero ahora que paso más tiempo junto a Nicola, es como... - suspiro - me confundo.
-Es... - dijo Natalie sin poder hablar.

Había quedado impresionada con la confesión de su amiga, nunca creyó que ella le diría algo así, pues Angie siempre se vio tan enamorada de Mario, que no pensó que fuera capaz de enamorarse de otra persona.

-¿Por qué te impresiona tanto? Si hasta tú me molestabas diciendo que me gustaba, que no me creías cuando te decía que no sentía nada por él...
-Sí, lo decía de broma, jugando... pero no creí que fuera a ser verdad.
-Bueno ahora lo sabes, es verdad - agacho la mirada algo avergonzada.
-¿Y qué? ¿Pretendes hacer algo con esto? ¿Qué te de un consejo o algo así? - Dijo Natalie mientras Angie levantaba la vista posándola en ella.
-Eh... no, no haré nada yo solo quería decírtelo, necesitaba contárselo a alguien.
-¿No harás nada?
-¿Que quieres que haga? Si soy yo solamente la que está confundiendo sus sentimientos, nadie más. - Natalie asintió con la cabeza y escuchaba con atención lo que decía su amiga - A Nicola no le pasa lo mismo, yo para él soy solo su vecina, su amiga... y Mario, bueno Mario es mi novio - se encogió de hombros - supongo que está enamorado de mi.
-Claro que Mario está enamorado de ti, es muy obvio - rió suave - pero ¿quién te asegura que Nicola no lo está?
-Nat, es obvio también.
-¿Por qué? Nicola te trata bien, es tierno contigo.
-Sí, el es un chico tierno, simpático y me trata bien, pero él es así, así se comporta con las chicas pero eso no quiere decir que yo le guste... además hay que ser sinceras Nat, esto no es una novela donde todo sale bien, donde la chica se enamora de un chico lindo que es su amigo y que él también la ama en secreto, y que lo mantienen oculto hasta el final donde deciden decir todo lo que sienten y terminan juntos y felices... esto es la vida real.

******
Tres semanas después...

-No he querido decirle nada a Natalie- dijo Yaco e hizo una mueca incómoda.
-¿Por qué? - pregunto confundido Nicola
-Porque no, Angie es su mejor amiga y de inmediato le contaría.
-¿Estás seguro de lo que viste?
-No un cien por ciento, pero si un ochenta, no es la primera vez que los veo Nicola...
-Es un idiota, definitivamente no la merece - dijo enfadado.
-Estoy de acuerdo contigo, por eso quiero que tu se lo digas.
-¿Yo? No, yo no puedo.
-¿Por qué no?
-Porque... - pensó - que tal si no es cierto, que tal si te equivocaste de sujeto, no quiero mentirle a Angie.
-Entonces averigüémoslo.

Durante este tiempo, Yaco había visto a Mario salir con una chica que justamente no era Angie, salían a comer, a ver alguna película o cosas así.

Se preguntaran ¿como Yaco sabe esto? Bueno, Yaco trabaja en la misma empresa de Mario y un día lo vio pasar tomado de la mano con una chica, primero no creyó que fuera él, pensó que tal vez se había confundido de sujeto pero días después lo volvió a ver y se aseguro que era Mario.

No dudo en decírselo a Nicola, pero si dudo en decírselo a su novia Natalie, pensó que si se lo decía a Natalie, ella se lo diría de inmediato a Angie y encararía rápidamente a Mario, y bueno él no quería que eso fuera así, no quería que le dijeran a Angie hasta estar bien seguro de lo que había visto así que supuso que Nicola lo ayudaría pero Nicola tampoco se atrevía a decirle a Angie sin tener las pruebas suficientes, y necesitaría una ayuda más además de Yaco.

-¡Es un estúpido! - Golpeó enfadada la mesa Jazmín- lo sabía, siempre supe que era un idiota, un ¡imbécil! Lo detesto mucho más que antes.
-¿Entonces nos ayudaras? - pregunto Nicola.
-Claro que los ayudare.
-Hay que idear un plan - propuso Yaco.
-Cierto... ¿pero cuál?
-Miren, yo lo puedo vigilar de adentro en la empresa y ustedes de afuera - miro a ambos - porque muchas veces lo he visto salir a la mitad del día y como ahora es el co-jefe, se aprovecha de su puesto y sale a la hora que sea del trabajo, incluso hay veces que ni va.
-¡Es un mentiroso! - Seguía diciendo enfadada Jazmín- a Angie siempre le dice que tiene que trabajar todos los días hasta tarde, es un...

-Ya - la interrumpió Nicola- calma, sabemos que lo odias al igual que nosotros, pero compórtate.

-Sí, lo siento... pero es que ese chico realmente me saca de mis casillas.

Nicola la miro por un instante y rió, le causaba risa la actitud de Jazmín, la actitud de chica mala.

-¡No te rías!
-Lo lamento... pero es que te haces la niña ruda y te sale tierno - le apretó las mejillas.
-¡Suéltame idiota! - Le quito las manos - ¡yo soy así de ruda y no me veo tierna!
-¡Déjense de tonterías! - Alzo la voz Yaco - parecen niños pequeños - rió bajo - pongámonos serios en esto, hay que planearlo bien.
-Bien - dijeron Nicola y Jazmín al unísono.
-Entonces, lo dejamos así, yo lo vigilo desde la empresa y ustedes desde fuera. Nos mantendremos en contacto diciendo donde esta, llamándonos, por mensajes de texto, etcétera - los chicos asintieron - ¿por cuánto tiempo lo vigilaremos?
-Yo digo que por una semana - propuso Jazmín- si al pasar la semana, notamos que Mario realmente está haciendo lo que pensamos, se lo diremos a Angie.

Nicola poso los codos sobre la mesa y se despeino el cabello con ambas manos, teniendo la mirada baja.

-Angie no se merece esto - levanto la mirada mirando a Yaco y Jazmín.
-Claro que no se lo merece - dijo Jazmín.
-Ella es una gran chica, es dulce, tierna... ¿y este idiota le hace esto? - Dijo Nicola- no valora a la mujer que tiene a su lado, es un imbécil.
-Por eso haremos esto - dijo Yaco- para que Angie se dé cuenta de quién es realmente el chico a quien llama "novio"

Y el plan comenzó, al otro día por la mañana Yaco se dirigió al trabajo igual que siempre, llego allá, saludo a la gente en la oficina y se sentó en su puesto, se quedo ahí un par de minutos hasta que vio llegar a Mario, disimuladamente se levanto y lo siguió, lo siguió hasta que este entro a su oficina, pero antes saludo a su secretaria tiernamente con un beso en la mejilla y le susurro algo al oído haciendo que la chica sonriera tímida.

Con los ojos entre cerrados comenzó a caminar lentamente para atrás alejándose de ahí, volvió a su puesto y marco rápidamente a Nicola quien aun estaba durmiendo.

-Hey Nicola...
-M... - dijo dormido.
-Ya sé quién es la chica con la que Mario engaña a Angie.
-M... - volvió a decir.
-¡Oye amigo despierta! - alzo mas la voz.
-Sí, si te escucho...
-Al parecer la chica es la secretaria de Mario.
-¿La secretaria? - hablo con la voz más clara.
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