Diez; Incomodidad

3.4K 156 28
                                    

—¿Y bien?

Todos miramos a nuestro jefe expectantes. Le acababa de presentar mi idea y llevaba varios segundos en silencio.

Se recostó sobre el respaldo de la gran y aparentemente cómoda silla y se balanceó un poco, mirándonos de uno en uno hasta detener su vista sobre mí.

—Buen trabajo, Bieber —Sonrió y pude respirar tranquilo—. Me gusta, está bien darle un enfoque distinto.

—Entonces, ¿vamos a presentarles esta idea? —preguntó Megan.

—Bueno, ahora deberíais trabajar en algunos carteles. Nos pidieron ambas cosas.

—De hecho, yo he pensado algunas cosas para eso —dijo Brooke esta vez.

—Genial, puedes trabajar con Bieber en ello —ordenó mientras revisaba algo en su iPad.

Mi cara debió ser un poema en ese momento. ¿Trabajar con ella juntamente con Megan y Ethan? Bien. ¿Trabajar a solas con ella? La cosa se complicaba.

—Pero, Brooke estaba trabajando con Megan en los carteles del festival. —Quise excusarla.

—Según tengo entendido solo queda retocar alguna cosa y enviarle el diseño a los clientes, ¿no es así? —Miró a Megan.

—Umm... Sí, señor. —Mordió su labio y me dedicó una mirada de disculpa.

Lo comprendía, no podía mentir a nuestro jefe diciéndole que no había completado el trabajo que le habían mandado hacer.

—Entonces no creo que haya problema. La señorita Hayes es bastante capaz de hacer eso ella sola. A no ser que la señorita Price tengo algún problema con eso. —Alzó una ceja en dirección a la castaña.

—N-no. —Negó con la cabeza.

Genial.

—Pues ya sabéis qué hacer —Se giró hacia Ethan—. ¿Cómo va la web?


Salimos de la sala de reuniones varios minutos más tarde, nuestro jefe se despidió de nosotros para ir a su despacho y concretar una reunión con Hugo Boss a finales de semana para presentarles nuestra idea.

—Megan, ¿cuando termines con lo de los carteles podrías echarme una mano con una cosa de la página? —Le pidió Ethan.

—Claro, no tardaré mucho. —Sonrió.

—Pues ya estamos divididos —Pasó un brazo por encima de los hombros de la morena—. Hasta luego parejita —bromeó alejándose con Megan.

Pero a mi no me hizo ninguna gracia.

—¿Vamos a tu despacho o...?

—Sí, mejor vamos allí —dije mientras empezaba a andar seguido por ella.

Abrí la puerta de mi pequeño despacho y cuando Brooke entro tras de mí la cerró.

Estar encerrado a solas con ella, lo que estaba deseando.

—¿Tú tienes alguna idea en mente? —Me preguntó mientras se sentaba en una de las sillas que había delante de mi escritorio.

—No, estuve demasiado ocupado retocando el guión gráfico y ni me paré a pensar en ello. —Froté mi ojo derecho.

Aquella noche tampoco había podido dormir casi. Me encerré en el despacho y no salí de allí hasta que Rachel me avisó de que la cena ya estaba lista. Cenamos, recogí todo y volví al trabajo a pesar de la petición de mi novia de que me quedase con ella un rato a ver la televisión. No lo dejé hasta que a no sé qué hora de la madrugada Rachel apareció en la puerta del cuarto medio dormida y prácticamente me arrastró hasta la cama.

Flatline • jbDonde viven las historias. Descúbrelo ahora