𝙙𝙧𝙖𝙘𝙤 𝙢𝙖𝙡𝙛𝙤𝙮

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(editado)

Greyback sostenía del brazo a Harry y a Hermione mostrándoselos a Narcisa Malfoy como si fuera un trofeo. Scabior y un carroñero más me tenían a mi y a Ron

La madre de Draco pasaba sus ojos por cada uno de nosotros intentando reconocernos o reconocer a Harry, ya que este estaba completamente hinchado por un hechizo que Hermione le había echado en aquel bosque.

—Llévenlos adentro —ordenó.

A fuerzas de empujones y patadas, nos obligaron a subir unos anchos escalones que daban a la entrada de la mansión.

—Síganme —indicó Narcisa mientras nos guiaba por el vestíbulo—. Mi hijo Draco está pasando las vacaciones de Pascua en casa. Él nos confirmará si es Harry Potter.

La mirada de mis amigos se posaron fugazmente en mi. Al escuchar el nombre de Draco mi corazón se aceleró y mis pulsos eran cada vez más rápidos. Él podría ayudarnos. Él nos sacaría de aquí.

Cuando entramos todos en la gran habitación, dos personas se levantaron de sendas butacas colocadas ante una ornamentada chimenea de mármol.

—¿Qué significa esto?

Reconocí al instante la voz de Lucius Malfoy. Empezaba a asustarme de verdad y podía notarlo también en mis amigos. No veía cómo íbamos a salir de allí.

—Dicen que han capturado a Potter —explicó Narcisa sin emoción alguna—.  Ven aquí, Draco.

No me atreví a mirar a Draco directamente, aunque pude notar una figura más alta que yo aproximarse a nosotros. Era él, no había duda alguna. Su rostro, pálido y anguloso, con su cabello rubio claro. Tenía ganas de correr a abrazarlo, besarlo y no apartarme de él, pero tenía que controlarme, echaría todo a perder.

—¿Y bien? ¿Qué me dices, muchacho? —preguntó el hombre lobo.

Por primera vez en aquel momento Draco dirigió la mirada donde me encontraba y sentí una punzada en mi estómago. Los ojos de él se clavaron en los míos, pero no parecía alarmarse, sólo sentía miedo en su mirada. Miedo y desesperación.

—¿Y bien, Draco? ¿Es él? ¿Es Harry Potter? —preguntó Lucius Malfoy con avidez.

—No sé... No estoy seguro —respondió Draco.

—¡Fíjate bien! ¡Acércate más! —Lucius Malfoy estaba tan ansioso que sorprendió a todos—.   Escucha, Draco, si se lo entregamos al Señor de las Tinieblas, nos perdonará todo lo...   

—Bueno, espero que no olvidemos quién lo capturó, ¿Verdad, señor Malfoy? —terció el hombre lobo, amenazador.

—¡Por supuesto que no! ¡Por supuesto! —Lucius Malfoy se acercó lentamente a Harry y un grito ahogado salió de mi boca. El carroñero que me tenía agarrada tiró de mi—. ¿Qué le hicieron en la cara?

—No fuimos nosotros.

—Aquí tiene algo, Draco. Debe ser la cicatriz, tensada... ¡Ven aquí, Draco, y mira bien! ¿Qué opinas?

Draco se acercó lo suficiente a Harry, podía notar su temor, su miedo, su reticencia. No pude no pesar en los momentos que pasamos en Hogwarts, el amor que nos rodeaba, el amor que sentíamos el uno por el otro, el amor que se desvaneció.

—No lo sé —insistió el chico, y se retiró hacia la chimenea donde su madre contemplaba la escena.

—Será mejor que nos aseguremos, Lucius —le dijo Narcisa a su esposo—. Tenemos que estar completamente seguros que es Harry Potter antes de llamar al Señor de las Tinieblas. 

harry potter || one shots y fragmentosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora