(editado)
—No tengo ganas —respondió Remus acostándose en la cama.
Sus tres mejores amigos lo miraron instantáneamente.
—¿De qué hablas? —preguntó James.
—Estás realmente lunático —dijo Sirius sorprendido.
—Es todo culpa de Hayley.
Remus le gruñó a Peter antes de cerrar las cortinas de su dosel. Cuando estaba a punto de cerrar los ojos, las cortinas se abrieron de par en par y sus tres amigos aparecieron junto a la luz de las velas. Remus bufó.
—Déjenme dormir.
—Oh, no. Claro que no, Lunático. Explícanos por qué motivo no quieres ir con nosotros a Hogsmeade.
Sirius y James se encontraban con el entrecejo fruncido interrogando al hombre lobo que los miraba con los ojos entrecerrados. Peter tenía la cabeza ladeada, como si estuviera apoyando a su amigo. Eso reconfortó a Remus.
—Porque quiero descansar. Mañana es un día muy largo y debo prepararme para... esos días —dijo intentando sonar convencido.
—Los días duran lo mismo siempre, cerebrito y, además, ese día no llega hasta dentro de una semana. Así que ahora sal ya mismo de la cama, vístete y ven con nosotros a Hogsmeade —espetó rápidamente James mientras le quitaba las sábanas a Remus.
—He dicho que no.
Lupin volvió a acobijarse y cerró la cortina esperando que sus amigos se fueran por fin, pero ésta volvió a abrirse. Remus se tapó la cabeza con la almohada cansado de ellos.
—Ya mismo llamaré a Hayley y le diré que por su culpa te tenemos así, tonto y aburrido.
Remus sabía que Sirius no lo decía en serio, no llamaría a Hayley ni aunque él dijera que no quería leer un libro nunca más en la vida. Y si realmente la llamaba, Remus no hubiera tenido problema con eso, tenía ganas de verla, de tenerla cerca y tener una excusa para hablarle.
Lupin no supo en qué momento sus amigos lo dejaron en paz, pero fue tanta la tranquilidad que había en la habitación que se preocupó. Capaz los muchachos ya se habían ido a Hogsmeade a escondidas.
Observó por entre las cortinas y estaba en lo correcto, los chicos ya se habían ido.
No tenía mucho sueño y lo único que pasaba por su cabeza era Hayley y su hermoso rostro, su preciosa risa, su forma de mover el cabello... La extrañaba demasiado.
Remus entendió que, aunque se quedará acostado viendo el techo de la cama, no podría dormirse más rápido, así que decidió bajar un poco a la sala a tomar agua y calentarse con la chimenea.
Salió lentamente de su habitación pensando en qué travesura se estarían metiendo sus amigos en ese momento y sintió arrepentimiento de no haberlos acompañado, pero no sé sentía con las fuerzas suficientes para disfrutar el rompimiento de las reglas.
Al bajar las escaleras escuchó murmullos en el piso de abajo. Hablaban rápido e intentaban, casi sin éxito, no gritar.
—Es tu culpa, Hayley, si tú no hubieras terminado con él ahora mismo se estaría yendo con nosotros.
—¿Crees que me importa? Es su decisión si no quiere irse con ustedes, no es mi culpa.
Remus bajó unos escalones más para escuchar con total atención.
—Está destruido. ¡No quiere venir con nosotros! ¿Desde cuándo Lunático no quiere venir con nosotros? Desde que terminó contigo.
Lupin puso los ojos en blanco ante las palabras de Sirius.
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harry potter || one shots y fragmentos
Fantastik𝙋𝙚𝙦𝙪𝙚𝙣̃𝙖𝙨 𝙝𝙞𝙨𝙩𝙤𝙧𝙞𝙖𝙨 𝙙𝙚 𝙡𝙤𝙨 𝙥𝙚𝙧𝙨𝙤𝙣𝙖𝙟𝙚𝙨 𝙙𝙚 𝙃𝙖𝙧𝙧𝙮 𝙋𝙤𝙩𝙩𝙚𝙧. (𝐀𝐝𝐞𝐦𝐚́𝐬 𝐚𝐝𝐚𝐩𝐭𝐨 𝐩𝐞𝐪𝐮𝐞𝐧̃𝐨𝐬 𝐟𝐫𝐚𝐠𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐥𝐢𝐛𝐫𝐨𝐬 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐭𝐢𝐞𝐧𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐚 𝐥...