harry potter || one shots y fragmentos

𝙩𝙝𝙚 𝙢𝙖𝙧𝙖𝙪𝙙𝙚𝙧𝙨

El cumpleaños número 20 de Idaris había logrado reunir a la vieja banda de Hogwarts y ella creía que no podía existir mejor celebración que esa. Compartir su día junto a sus amigos era increíblemente especial.

—No sé si es el mejor regalo —dijo Idaris viendo las botellas de alcohol—, pero por lo menos pasaremos una agradable noche.

—¡Claro que pasaremos una agradable noche! —exclamó Sirius mientras terminaba de colocar todas las latas y botellas en el centro de la sala—. Yo siempre me encargo de eso, linda. Feliz cumpleaños.

Idaris recibió un beso de Sirius en la frente y se concentró en aquel muchacho que revisaba la heladera de su departamento.

—¿Se te perdió algo, Remus?

La cabeza del hombre lobo apareció por arriba de la puerta de la nevera.

—Muero de hambre —respondió sonriendo tímidamente—. ¿Tienes algo por aquí?

—Las pizzas estarán en unos segundos, ve a la sala de estar.

Remus cerró la puerta de la nevera y se dirigió donde todos sus amigos se estaban acomodando.

—¿Alguno vio a Peter? —preguntó Idaris al ver que todos se encontraban allí, menos aquel muchacho.

—Creo que está en el baño. Anda un poco raro últimamente —respondió James—. Pero debe ser por los padres. La madre anda un poco mal de salud.

—Oh, pobre —dijo Marlene apenada—. Intentemos que se olvide un poco de eso. 

—Me parece que tú te olvidaste de llevar abrigo —comentó Sirius mientras veía sin disimulo el escote de la rubia—. Pero no te preocupes, me encanta.

—Cierra la boca, Sirius —dijo Lily con una sonrisa mientras se sentaba al lado de su novio—. Bien, ¿Comenzamos?

Peter apareció en el salón un poco consternado y bastante apagado. Todos los presentes se miraron, pero ninguno hizo un comentario al respecto. Idaris hizo aparecer las pizzas sobre la mesa ratona y destapó una botella de cerveza para cada uno mientras elegían un lugar para sentarse y charlar sobre todo un poco.

Marlene se sentó enfrentada a Sirius, mientras que Peter estaba sentado solo en el sillón individual frente al cuarteto de James, Lily, Idaris y Remus.

—Antes de empezar a beber y a comer, brindemos por nuestra más brillante estrella —dijo James mientras subía su botella en el aire—, o sea yo.

—¡Por James! —dijeron todos al unísono mientras reían.

—Es broma, es broma, aunque muchas gracias por aceptar que soy la estrella más brillante en su vida. Es todo un halago.

—Eres más bien nuestro pedazo de mier...

—Bueno, bueno —lo interrumpió Idaris a Sirius—. No quiero insultos en esta casa.

Sirius le hizo un gesto burlón a su amiga y alzó la botella en el aire.

—Un brindis por nuestra querida amiga Idaris Reeves, que siempre nos llena nuestra vida con amor, luz y muchos colores —recitó divertido—. Felices veinte a la más grande del grupo.

—¡Felices veinte!

Todos subieron sus botellas al aire y dieron un gran sorbo festejando el cumpleaños de una de sus mejores amigas.

—¡Bien! Ahora a jugar —dijo Marlene coqueta mientras se arrodillaba en su asiento y tomaba una porción de pizza.

—Oh, no. Sabes como terminará esto. Todos desnudos  —comentó Sirius negando con la cabeza.