La hija de Tony Stark y Los Vengadores 1 y 2

Capítulo Veinticinco

- ¡Mateo! -grita Steve

Steve y Nath se apresuran a correr, pero yo vuelo hasta ellos.

Llego antes y esta Mateo sentado en el suelo junto a Stark quitándose la máscara. Pero Stark no mostraba ninguna señal de vida.

- ¿Stark?- Steve se acerca a Tony y lo da vuelta, que estaba boca bajo en el suelo. Le quita la máscara y tiene los ojos cerrados.

- ¡STARK!- grita.

Sigue sin dar señales de vida. Cuando de pronto el reactor volvió a dar luz y fue abriendo los ojos lentamente. Todos damos supimos de alivio.

- ¿ya estoy muerto?- nos reímos.

-si sigues así, muy pronto lo estarás.

Cuando Mateo trata de levantarse apoyando la pierna derecha en el suelo, se queja de dolor y vuelve a caer.

- ¿que te pasa? -pregunta Steve

-me duele la pierna.

Su traje se abrie y salir, Stevenlo ayuda a levantarse y a llevarlo hasta el Jet. El traje de Mateo fue camino solo detrás de ellos.

-¿a ti no te duele nada?- le pregunta Nath a Stark.

-no, estoy perfecto- se levanta y trata de encender los propulsores pero no le funciona- yo si, pero la armadura no, vamos, que hay que trabajar.

Subo al Jet y apenas lo hago Stark enciende el Jet y partimos. voy nuevamente al fondo del Jet y me siento viendo lo que hacían los demás.

Bruce iba de un lado a otro, un momento con Mateo y otro con Clint, Nath esta junto a Clint y Steve esta parado detrás del asiento del piloto hablando con Stark.

-¡Sam!- me llama Mateo, lo miro y me hace señas con la mano de que me acerque. me levanto y me siento a su lado.

-¿como te sientes?

-bien, duele un poco, pero no es nada.... Te quería decir-dice cambiando el tema- que me gusto lo valiente que fuiste luchando con los robots.

-ni siquiera era necesaria la valentía en ese momento, estaban desarmados, y eran solo pedazos de metal.

-entonces tuvimos suerte de que solo sean pedazos de metal- nos reímos.

Cuando llegamos a la torre, Stark deja el Jet en el techo y bajamos.
Estar en el elevador se sentía como estar en casa, pero cuando se abrieron las puertas había alguien sentado en el sillón, solo se veía su cabello rubio por encima del respaldo.

- al fin llegan- dice levantándose mostrando una sonrisa grande al verme.

-¡tío Thor!- grito y corro hacia el para abrazarlo. Cuando lo suelto veo el martillo apoyado en la mesa que esta en medio de los sofás. Me acerco y trato de levantarlo, pero no lo logro.

- algún día podré levantarlo y gobernar tu mundo.

-parece que ya te contaron todas las historias ¿no es así?- asiento con una sonrisa.

-¿que haces aquí?, ¿en donde estuviste?

- en Asgard, y me entere de que estaban teniendo problemas y pensé que necesitarían mi ayuda.

-bueno, me alegro de que estés aqui- dice Steve dejando a Mateo en uno de los sofás y saluda a Thor con un golpe suave en el hombro.

- por favor, ¿a eso le llamas dar la bienvenida?, ¡abrazo abrazo abrazo!- aliento y se abrazan, Stark también se acerca a Thor y lo amenazó con la mirada para que lo abraze y lo abraza. A Nath no le tengo que decir nada, por que antes de poder decir algo lo abraza. Si tuve que alentar a Bruce y a Clint.

Después de unas horas de lectura, y los demás dándose un descanso. Bajo a la cocina y busco algo de comida. Encuentro unas Galletas dulces y me las llevo conmigo a la habitación. Justo cuando cierro la puerta de mi habitación alguien toca.

- ¡pasa!- la puerta se abre y Nath entra.

- hola manzanita, ¿como estas?

- excelente ¿y vos?

z bien bien....quiero hablarte sobre lo que hiciste en la base de Robatob.

- ¿que fue lo que hice?- digo con una voz de inocencia.

- salir corriendo del Jet sin haber tenido ningún plan.

- había un plan, entrar y matar a todos.. Y ¿sabes que fue lo mejor de ese plan?..¡Que funcionó!- grito con emoción.

- funciono porque por suerte no estaban armados..sino todos estaríamos muertos.

-entonces agradecemos a la suerte.

-¡Sam!, ¡tomate lo en serio!, ¡de verdad que sos igual a tu padre!

- ¿y eso no te gusta?

-¡no!, ¡no me gusta para nada.!, ¡a veces me gustaría que fueras un poco más seria como tu madre!

-¡a mi también, pero nunca puedo, siempre traté de ser seria, pero mi sentido común es hacer estupideces, y dejarme llevar!. Si no te gusta eso, te invito a salir- digo señalando la puerta.

-no, no, lo siento.- suspira- solo.. Para la próxima.. espera hasta tener claro un plan en el que todos estemos de acuerdo.

-si, esta bien.

-Buenas noches.

-Buenas noches.

Cuando se va me vuelvo a la cama con el libro y mi cena de galletas.

-señorita Sam, el señor Stark pide que vallas a su laboratorio. - me dice Jarvis.

- suspiro enojada, ¡no hay paz nunca!

- dile que estoy en camino.

Dejo el libro a un lado en la cama y me levanto, me llevo conmigo las galletas y me como una mientras camino hacia el laboratorio.

- ¿que pasa?- digo llegando al laboratorio y veo a Stark sentado en su silla de siempre atrás de la mesa de siempre,con el brazo izquierdo sobre la mesa y lleno de sangre.- ¿pero que te paso?, ¿eso fue por la caída?, porque en el Jet no te vi ni un rastro de sangre.

-no, no fue por eso, esto me lo acabo de hacer yo, y necesito tu ayuda.

- ¿para que?, ¿para cortarte el brazo en dos?

- solo ven aquí.

Me acerco más a la mesa con manchas de sangre y su brazo bañado en sangre.

-¿no te estas desangrando?, sería mejor que venga Bruce.

-Bruce se fue, por eso te necesito a ti. Y con una mano sola no puedo. ¿me ayudas o no?

Yo: no se, ¿que necesitas?

-agarra ese balde- apunta a un balde negro del otro lado de la habitación- y llena lo de agua.

Hago lo que me pidió y le entregó el balde lleno de agua. Stark mete un trapo dentro del balde, el trapo empapado de agua se lo llevo al brazo y lo limpia. Cuando ya esta limpio de sangre, se ven dos cortes en todo el largo.

-¿porque te hiciste eso?

-deja de hablar y ve por vendas al laboratorio de Bruce.

este tipo esta loco de remate-pienso.

Voy corriendo al laboratorio de Bruce y encuentro un botiquín de primeros auxilio, vuelvo al laboratorio de Stark y lo dejo en la mesa.
Abre el botiquín y saca una botella pequeña con un papel pegado que dice alcohol, se tira media botella encima de los cortes y hace muecas de dolor, saca las bendas y me las da. Le cubro el brazo con ellas y espero que eso sea el final.

- ¿ahora me puedes decir porque te hiciste eso?

- no fue a propósito. Me corte sin querer arreglando la armadura- lanzo un suspiro.

¿fue un suspiro de alivio?

Termino mi labor con Stark y vuelvo a mi habitación después de decirle buenas noches