La hija de Tony Stark y Los Vengadores 1 y 2

Capítulo Treinta y Uno

-Me rindo- dice oliver levantándose del suelo como por décima vez. se frota quitándose la arena de la ropa. 

Estamos en la playa, le enseño a oliver simples trucos y movimientos de boxeo, y después enseñándole algunas llaves siempre terminaba en el suelo, nunca lograba soltarse de mi o tirarme, tampoco con Emma. Emma se reia en ocasiones del fracaso de Oliver. 

-Vamos, lo hacías bien al principio- lo animo 

-Lo hacias lento, no tengo muy buenos reflejos.

-Se nota- dice Emma sentada en la arena a unos metros de nosotros. 

-Anda, un intento más, recuerda, usa tus piernas y el impulso de tu cuerpo, usa tu propio peso para ayudarte. - le recuerdo y lo volvemos a intentar. 

me acerco a oliver para atacarlo el logra esquivarme, me toma de los brazos y con con su peso se tira hacia atrás, yo volteo en el aire y termino en el suelo con un buen golpe. 

-¡Oh dios!, ¿estás bien?- me estira la mano para ayudarme a levantarme. la acepto y me levanto, me sacudo la arena. 

-¡Lo hiciste!- digo olvidando su preocupación por mi. Emma mira boca abierta desde su lugar. 

-¡Lo hice!- festeja contento. voltea para mirar a Emma y su reacción, y de sorpresa lo tomo por la espalda, le empujo las piernas con la mía y cae al suelo. Emma rie y yo tambien, Oliver se levanta y se sacude.

-Muy chistosas - dice y ríe con nosotras. 

Después de un rato estando sentados relajados en la playa, estaba cayendo la noche, al sol le quedaba unos minutos para ponerse y mucha gente había venido a la playa especialmente para ver la puesta del sol. luego de esos minutos el sol se había ido, los rayos iluminaban el océano y se veía muy hermoso. Mi madre había venido también para ver la puesta, y se quedo con nosotros, abrazándola mientras el solo se iba, me hizo acordar las veces que íbamos a la playa en el verano, para ver la puesta, son recuerdos muy hermoso, que pensaba que no iba a volver a vivir con ella, y aquí estamos, juntas de nuevo.

Pasó una semana, y ya faltaba un dia para el esperado campeonato, Emma y yo le hemos dado clase todos los días hasta el momento, había progresado bastante en poco tiempo, pero obviamente los demás concursantes son mejores que el, y sin duda que nosotras. Oliver no tiene ninguna fe de ganar nada, y asustado, nunca había peleado antes. En cambio, aunque Emma y yo no ganemos, estamos emocionadas por volver a pelear, sentir la adrenalina y mejor, no morir al final. 

-¡Mañana es el dia!- dice Emma mientras volvíamos de la playa. 

-si, que emoción- dice sarcástico Oliver. 

-Al menos a mi no me daran una paliza. 

-No lo puedes asegurar. 

Emma me mira y yo le doy una mirada diciendo que tiene razón, no podemos asegurar nada, aquí todos llevan mas años de practica que nosotras. 

La competencia estaba dividida por edades, eso significaba que nosotros vamos a competir contra máximo peleadores de 21 años, luego estaban de 22 a 30, de 31 a 40 y de 41 hasta 50. También hacen una competencia para niños armando un ring en la habitación de fiestas de alado.  

Cuando llegamos a la mansión vamos directo a la cocina para cenar, al terminar Emma y yo nos despidos de Oliver y entramos a nuestra habitación, nos cambiamos y nos acostamos, listas para la pelea.