CAPITULO XIV "ANFITRIONES"

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— ¿Fuego? Eres un idiota. — Gib rió mientras me palmeaba la espalda. — ¿Cómo vas?

— Seguimos sin sexo. — más risa.

— ¡Que sínico! ¿Así lo aguantas, Barby? — la saluda. — gusto en verte werita.

— Así me gusta — respondió junto con una sonrisa. Le saludó con un beso de mejilla y un abrazo —. ¿Qué tal estás? Oí que Sam despertó su lado maternal o algo así.

— Ya sabes cómo es, es inútil que yo te quiera argumentar algo diverso, aunque no, aun no hay bebé, creo que conmigo es suficiente. — reímos. — Primo ¿Que dicen las terapias?

— No por favor. — dijo asqueado.

— Aquí el míster es como el cambio de estaciones, un día sí me colabora y al otro no.

— Deberías decirle a tía Amy que te preste uno de sus pelotones — dijo Sam apareciendo detrás de Gib.

— ¡Sam! — las dos chillaron como lo que son, unas mujercitas bellas de Dios con pulmones para tres personas y me quedo corto —. Ay no sabes la falta que me has hecho. ¡Por fin tengo a mi loca prima!

Rió — ¿Loca yo? — le metió un pequeño empujón en el hombro —. Tú eres la loca, rubita.

— Que bello, ¿Que hicimos para merecer este castigo, que diga, esta bendición, primo?

— Cantante y guitarrista, por cierto, tengo tu regalo de cumpleaños, no te la vas a creer. — aplaude.

— Venga la lluvia de regalos.

— ¿Cuándo nos vamos a México?

— Vamos Renan, estas entre los tulipanes.

— Prefiero los agaves.

— Jack es quien sabe cuándo partimos. En caso de que te lo perdieras, te informo que ahora a mi hermanito le agarró por ser el mandamás.

— ¿Nuestro Jack? ¿Hablamos del mismo Jack que es tímido y que casi que no habla con muchas personas? ¿Ese Jackson?

Asintió — El mismito que nunca se aparta de sus audífonos.

— Wow... — dijo sin creérsela.

— Es el efecto Palacios, solo mira a tu prima. — dijo Gib con orgullo. — Somos imparables, sin embargo nos iremos pronto, mi cumpleaños es mañana en México y no quiero cumplir acá.

— ¿Qué no se supone que eres nacido en Europa? Al menos eso es lo mi esposo dijo — sonrió mordiéndose el labio inferior —. No me cansó de repetir eso.

— A nadie le importa que haya nacido ruso, soy mexicano, irlandés y español, soy una hermosa abominación ¿O no Sam? — le besa la mejilla.

— Cabe constatar que fueron sus palabras — todos nos reímos.

▬SHOOT ME DOWN: OR LOVE ME HARDER ▬PARTE 3.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora