Debo irme acostumbrando, desde ahora en adelante, los momentos entre Divanny y yo serían silenciosos y bastante agónicos, como ahora, que estamos sentados a menos de un metro de distancia y pues, no hay más qué decir y así fue durante un par de horas hasta que su papá decidió apartarla del entorno.
— Ya despertó ¿Quieres verlo? — no sé ni siquiera porque le dije que si a mi mamá, me levanté de la silla y la seguí. — ¿Estás bien, corazón?
— Si mamá, no te preocupes.
— Al fondo, ya sabes, tengo que ir con Sam y Gib.
— De acuerdo. — seguí el camino al más allá (al fondo) y entré a la habitación, Adam no se ve bien del todo. — ¿Se puede?
— Si se quiere... — me dijo, entré y me senté a su lado, Adam me miraba esperando que dijera algo extraordinario que por supuesto no voy a decir jamás.
— ¿Qué? ¿Quieres mi gratitud? La tienes, pero no más. — sonrió, creo que está un poco satisfecho.
— Sigues sin saber cuidarte la izquierda.
— Si, lo sé, no soy bueno con la izquierda, por lo regular Gib va por ese lado, aunque ese cabrón es bueno aunque esté parado de cabeza y ebrio.
— Es verdad, lo es, es bueno en lo que hace.
— Si no te hubieras metido seguro le estaría haciendo juego a mi corazón helado.
— No, no lo creo, no creo que hubieras muerto.
— Ya te dije que tienes mi gratitud. — suspiré. — gracias, Adam.
— No fue nada, somos una familia, Gib lo dijo antes de que se armara la tercera guerra mundial.
— De todas formas, no tenías porque hacerlo, te lo agradezco, mi mamá no gana para sustos conmigo.
— Es una excelente médico, por cierto, aunque creo que la que me operó fue tu tía Malke.
— Ella también sabe lo que hace. — esto es demasiado, yo me largo, me puse de pie. — bien, espero que mejores pronto, Adam, el equipo te necesita.
— Si, yo también espero mejora rápido, gracias, por venir.
— De nada, nos vemos. — salí de la habitación, apenas había cerrado la puerta cuando me topé de frente con Divanny, la miré unos segundos, suspiré para mi adentros y la evadí por completo.
— ¿Es así?
— ¿Es así, qué? — dije con un poco de molestia.
— ¿Es así como termina? ¿Así es como valoras el que haya desafiado al mundo por ti?
— A ti te importó una mierda y yo no he metido eso en el tema, tú misma lo echaste a perder, así que te sugiero que sigas tu camino, vuelvas a quién perteneces. — señalé la puerta de Adam. — y si alguna vez me amaste tanto como dices, me dejes hacer mi vida, por favor.
ESTÁS LEYENDO
▬SHOOT ME DOWN: OR LOVE ME HARDER ▬PARTE 3.
Teen FictionPor fin las cosas parecen estar tomando el lugar que le corresponden; sin embargo, el proceso no será fácil para ningún miembro de Carta Blanca ni aliados. Gibrán y Samantha por fin están juntos después de haber ideado un plan perfecto para escapar...