CAPÍTULO 32. Búsqueda y rescate

4.1K 387 3
                                    

Los gritos y los sucesivos disparos ensordecieron el lugar. Todos estaban tirados en el suelo cubriéndose sus cabezas intentando protegerse.

-¡Tenemos que salir de aquí o nos matarán!- exclamó Curtis entre tanto ruido.

Lucy y Emma no podían parar de llorar. Estaban frente al cuerpo ensangrentado de su amiga Margaret y con gran impotencia no sabían que hacer salvo suplicar que finalizase todo aquello.

-¡Emma!, ¡tenemos que usar tu Dobrian para poder escapar!.

Agachada y pegada a la pared, alargó su brazo para alcanzar la mochila y sacar de su interior el libro mágico. Abrió la página 26 de éste, pero antes de pronunciar palabra dos soldados con metralletas irrumpieron en el escondite.

Emma ordenó a todos tomarse de las manos incluyendo el cadáver.

-¡¡A casa!!- gritó con gran fuerza mientras el libro los engullía y les hacía desaparecer del lugar.

                                • • •

Aterrizaron en el centro de un descampado abandonado. Todos estaban sanos y salvos, habían regresado al planeta Tierra. Excepto uno.

-¿Dónde está Cristine?- preguntó Lucy.

-Joder, joder, ¡mierda!. ¡Está muerta!. ¡Margaret está muerta!-dijo Curtis desesperado pasándose las manos por su cabeza.

-¡Cristine!, ¡Cristine!- gritaba Emma con todas sus fuerzas.

Buscaron y miraron por todos lados pero no dieron con el rastro de su amiga. Había desaparecido.

-Tenemos que regresar a Kendratán. Tiene que seguir allí y está en peligro.

-Curtis, si regresamos estamos perdidos. Nos matarán- respondió la joven.

-Y si no volvemos por ella, posiblemente ya este muerta- añadió Sullivan.

-¡¿Soy la única que se preocupa por la fallecida?!- lloraba Lucy desconsolada.

-Mantengamos la calma. Tenemos que avisar a la policía de este asesinato y después regresaremos a Kendratán.

Y eso hicieron. Durante tres horas estuvieron testificando en la policía, inventando por supuesto una historia falsa para no delatar a ningún Aclaryel.
Aunque, sabían que estaban en problemas. El Árbol Sagrado había sido destruido, su amiga había fallecido, tratándose además de la hija del mismísimo Fitzgerald Strauss. ¿Qué iban a hacer cuando le dieran la noticia?, ¿qué hay de Jake?. Todo era muy confuso, especialmente para Emma.

Mientras intentaban aclarar todo ese asunto, decidieron ocultarse en su casa. Allí estarían protegidos, aunque fuese por poco tiempo. La policía resguardó y acompañó al grupo de amigos hasta la casa.

Charlotte, la madre de Emma, abrió la puerta cuando sonó el timbre. No pudo creer lo que veía ante sus ojos. Su hija había regresado después de días en paradero desconocido.

-¡¡Emma!!- saltó a sus brazos con múltiples lágrimas que brotaban de sus ojos.

-Hemos encontrado a su hija y a sus  amigos, señora Stevenson. Están todos bien, quédese tranquila.

-Gracias Agente, se lo agradecemos de todo corazón. Chicos, pasad por favor.

                                • • •

-Tomad, un poco más de sopa. Está caliente, os vendrá genial.

-Gracias señora Stevenson, pero...

-Nada de peros, jovencito- interrumpió a Curtis.- Acábate el plato y luego discutiremos sobre qué hacer o no.

-Mamá, debemos regresar a Kendratán. Una amiga nuestra aún permanece allí y no sabemos qué habrá sido de ella. Debemos rescatarla.

-Hija, me temo que eso no será posible. Tu Dobrian está debilitado. Mira el libro.

Emma se acercó para echarle un vistazo y comprobó que estaba prácticamente chamuscado. Como consecuencia de tanto uso, éste había sufrido daños irreparables. Sabía que si lo volvía a utilizar, acabaría por desintegrarse y desatar terribles consecuencias. Pero no había otra opción, debían salvar a Cristine.

Pero en aquel instante, todos sus planes se desintegraron al recibir una llamada muy especial. Charlotte se apresuró a coger el teléfono y pudo identificar una voz perfectamente reconocible. Fitzgerald Strauss.

-"Entreguen el cuerpo de mi hija Margaret Strauss esta noche a las 2:30h en la calle Bakery Downfourd, número 13. Espero no hagan caso omiso a esta llamada, porque esto sí es una advertencia de muerte".

ElementosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora