Gay One Shots ~Teen Wolf ~

Your touch [Scisaac]

La hafefobia es una fobia específica basada en un miedo irracional a tocar o ser tocado por otras personas, puede ser causada por un evento traumático que implique ser tocado. El paciente puede o no recordar el evento en cuestión. Se recomienda la terapia de exposición y la terapia cognitiva y de difusión.

Isaac había tenido problemas con que la gente le tocara desde hacía mucho tiempo. No le gustaba, no lo soportaba, le daba ganas de salir corriendo y arrancarse la piel del cuerpo y no volver a acercarse a nadie nunca más. 

No le hizo falta investigar mucho para saber que había surgido la primera vez que su padre le puso la mano encima, desde ese momento dejó de acercarse a la gente que le rodeaba y se apartó cada vez que alguien le ponía la mano en el hombro o en el brazo o en cualquier otro lugar, no le gustaba, tenía la sensación constante de que iba a ser herido. 

No cambió cuando se convirtió en hombre lobo ni cuando su padre murió, porque aunque ahora pudiera defenderse y curarse rápidamente, esa sensación seguía ahí, en el fondo de su cabeza repitiendo que alguien le haría daño.

Aún así, cuando Scott pidió empezar una relación, él aceptó. Sabía que sería complicado, pero estaba cansado de perderse cualquier cosa buena que le pasara solo por ese maldito miedo irracional. 

Scott no le haría daño.

Scott respetó todos y cada uno de los límites del rubio, preguntando siempre antes de besarle o cogerle la mano, y nunca le hizo sentir mal por ello, entendía que no era fácil para él y no iba a hacerlo peor, porque le quería, porque estaba enamorado de él aún con todos sus problemas.

Pero tras un mes de relación, Isaac sentía que Scott se estaba cansando de él. Aunque no fuera verdad, que probablemente no lo era, sentía que Scott necesitaba algo más, que quería algo que él no podía darle porque por dios, ni siquiera le había explicado todo lo que pasaba por su cabeza cada vez que aceptaba recibir contacto físico. 

No le había explicado el temblor que le recorría el cuerpo cada vez que le tocaba ni como evitaba el impulso de salir corriendo ni que su piel ardía bajo su tacto, ni que las pesadillas no habían parado todavía ni que se sentía mal. Se sentía mal novio. Sentía que no merecía la pena y cada día se preguntaba por qué Scott seguía a su lado.

Sentía que se estaba cansando de él y de todas las cosas de las que no hablaba.

Y se disculpaba siempre, cada vez que se negaba a su tacto porque simplemente no estaba en el mejor momento para recibirlo, se disculpaba con un "Perdón por no querer que me toques, no es que no te quiera a ti".

Él también estaba enamorado de Scott, tanto como el alfa lo estaba de él.

Ese día habían decidido quedar después de clases para estudiar igual que habían hecho más veces. Como de costumbre la madre del hispano estaba trabajando, así que se quedaron en el salón, comenzando a repasar las materias en las que no iban bien. 

  — Isaac —el rubio miró a su novio nada más escuchar su nombre—, ¿puedo besarte?

La pregunta le tomó por sorpresa, normalmente sabía cuando el alfa iba a pedir un beso; cuando ganaban un partido, cuando estaba tan feliz que no podía contenerse o cuando se despedían o encontraban, esas habían sido la mayoría de las situaciones hasta ahora. 

Asintió levemente, no estaba muy seguro y sabía que negarse no era un problema, pero esos últimos días se había decidido a intentar aceptar el tacto del mayor tanto como le fuera posible, quería acostumbrarse a él y dejar de tenerle miedo y maldición, por supuesto que quería besar a su novio tanto como pudiera.