Aula silenciosa, con presencia de un estudiante y otra persona por el momento desconocida. Hasta ese entonces, Jungkook, estudiante reciente de Busan, Corea del Sur, se encontraba buscando en su mochila su teléfono móvil. Buscaba, buscaba y no lo encontraba. Allí fue cuando un ruido despertó su atención. Era la voz de una persona. No podía reconocer quién era, mucho menos siendo nuevo en el lugar. En aquel momento se sintió incómodo, demasiado incómodo. ¿Quién era? En ese instante, sólo se escuchaba en todo el salón la respiración agitada del estudiante.
- ¿Buscabas esto?- escuchó repentinamente aquella voz, tan indescriptible como se oía. Con cierto grado de precaución y temor dio la vuelta, mirando hacia el o la dueña de aquella voz.
- ¿Qué?- respondió, mirando hacia la persona.
Era un hombre. Jungkook sabía que era un hombre debido a su físico y a su mirada penetrante. Aquel hombre vestía un atuendo fuera de lo normal para quién lo veía, pues tenía todo un traje negro en donde sólo se podían observar aquellos ojos agonizantes. Su mirada si bien era penetrante, se veía tan triste como si hubiera enfrentado la muerte de alguien. El hombre estaba parado allí, frente a sus ojos, cara a cara. Se detuvo unos minutos a mirar a aquel chico estudiantil, tan desconocido como él mismo para el estudiante. Jungkook estaba nervioso. Su cuerpo de a poco se paralizaba, y su rostro se volvía de a poco cada vez más pálido. Comenzó a ver todo borroso, empezó a buscar algún banco por el cual pueda mantenerse en pie. Se sentía muy mareado, como si la presencia de aquella persona habría generado tal estado. Cayendo al suelo de la baja presión que tenía, volvió a escuchar al hombre.
- ¿Por qué no me respondes? ¿Este es tu celular?
- Sí- afirmó Jungkook totalmente mareado- ¿quién eres?- se atrevió a preguntar.
En aquel instante, el hombre se detuvo por completo mientras lo miraba cómo sufría en el suelo húmedo y sucio. Al tiempo, respondió:
- ¿Tú eres Jeon Jungkook, verdad? ¿Eres el nuevo estudiante de Busan?
- ¡Sí, soy yo!- gimió- ¿puedes devolver mi teléfono? ¡Alguien está llamando!
- Qué casualidad que alguien te llame justo ahora- rió irónicamente- es un tal "Park ChimChim".- echó un vistazo al teléfono, informando el causante del llamado repentino. Luego de un momento, la llamada terminó. Observó nuevamente al joven, viendo su grado de palidez mientras se revolcaba en el suelo, intentando mantenerse de pie.
- Jimin- gimió- es mi amigo.
- Interesante, ¿también es un estudiante nuevo?
- Sí, pero él no tiene nada que ver en esto. No le hagas daño, te lo suplico.
- Tú y tu estúpido amigo ingresaron hace poco a la escuela, tomando el puesto de mi mejor amiga y yo.- gritó, pero no lo suficiente para que nadie pueda escucharlo fuera del salón.
- ¿Disculpa? ¿A qué te refieres?
- El idiota del director Namjoon junto con su estúpida secretaria Seokjin, que por cierto, lo único que sabían hacer era esconder su absurdo amor ante los estudiantes, nos descubrió a mi amiga y a mí teniendo relaciones sexuales en el baño de la escuela. ¡Por la estúpida culpa de esos par de homosexuales nos echaron y entraron ustedes, tomando nuestro lugar y logrando que todos nuestros amigos se olviden de nosotros!- gritó fastidiado, con una mirada completamente llena de rencor y odio hacia el pobre Jungkook.
- Lamento que hayas pasado tal situación, verás, Jimin y yo no sabíamos nada- respondió algo asustado, levantándose del suelo.
- Claro que no sabían nada. Todos toman a esta escuela como la "libre de problemas" cuando en realidad yo descubrí a esos dos imbéciles a punto de comenzar a tener sexo en el escritorio de la propia oficina cuando me enviaron a buscar un estúpido lápiz. Sólo intentan esconder todo lo que ocurre, pero me cansé- respondió alterado- no quiero que pases por lo mismo, mi niño...
- En serio, yo no sabía nada, absolutamente... Hubiera deseado que ustedes puedan haberse quedado en esta escuela.- respondió Jungkook retrocediendo lentamente- lo siento.
- No lamentes algo que ni sientes.- tomó unos guantes negros de los bolsillos traseros de su pantalón, y se los colocó rápidamente en ambas manos. Al instante, tomó una... ¿estatua? Sí, así era. Aparentaba ser algo pesada, pues ni él podía sostenerla con firmeza. En aquel momento, Jungkook comenzó a retroceder aún más... ¿qué hacía este loco con una estatua en la escuela, y qué hacía sacándola justo ahora? Pensaba Jungkook.
- ¡En el nombre del padre, del hijo y del espíritu santo, amén!- gritó, y asimismo golpeó brutalmente la cabeza de Jungkook con la estatua, logrando que cayera al suelo e inundara así todo el suelo con sangre, sudor y lágrimas.
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La flor de la Navidad; {BTS}
FanfictionUn instituto. Dos estudiantes desaparecidos. ¿Será cuestión de tiempo hasta que los hombres puedan averiguar lo sucedido y rescatar a los cautivos? Bienvenidx a una historia llena de misterios, en donde los participantes no sabrán de los obstáculo...