~•°-MI ANGEL-°•~

Cap. 19

"No sé que es lo que vi en ti, sólo se que no lo veo en nadie más".

POV Fred:

De verdad no podía creer que casi me libraba de aquella pesadilla...

Resoplé.

Si me iba a quedar dos horas aquí, casi que prefería avisar a mi madre de que no se preocupara por la comida.

Saqué mi teléfono y justo, pero JUSTO al maldito sacarlo, ese vejestorio del profesor me lo arrebató.

-Hey!-me quejé yo.

-Lo siento, pero nada de móviles, si lo quieres de vuelta, tu madre tendrá que venir por él.-sonrió triunfal.

-Mi madre no puede venir por el dichoso móvil por el simple hecho de que está siempre trabajando... Y todos lo profesores lo sabeis...-gruñí entre dientes.

-Es lo que hay, Fred, ya sabes las normas.-quería levantarme... Levantarme y pegarle la paliza de su vida!

Pero de pronto vi a alguien a quien no debí ver y... Me quedé inmóvil.

-No esperaba que tuviera que castigarte este curso... Bueno, ni este ni ninguno, eres un gran alumno y me extraña muchísimo... Pero hay que ser justos, así que, tienes que quedarte la hora de castigo.

-Sí, profesor...-murmuró Freddy.

Qué diablos podía hacer Freddy castigado? Sólo le había visto así dos veces... Y una de ellas era de cuando llegamos ambos tarde hace unos días...

Este se sentó a mi lado... Para mi desgracia.

Giré mi cabeza hacia el lado contrario al que él estaba, no quería... Hablar con él...

Pasaban los minutos y yo no decía ni mu.

Estaba recostado sobre mis brazos, mirando al lado contrario al que Freddy estaba, pero, de pronto, alguien tocó mi hombro y, por inercia, me giré.

De veras que era idiota.

Freddy me estaba pasando por debajo de la mesa un papel, pero repito, no quería hablar con él, así que me giré nuevamente.

Pareció molestarse por eso, entonces me golpeó mas fuerte, pero le seguí ignorando.

Entonces debió de cansarse de llamar mi atención, pies me soltó una patada y yo me levanté enfadado:

-Pero qué dia-?!

-Fred! Qué haces?! Estás castigado por si no te has dado cuenta! Tienes q permanecer sentado y callado!

-Ahg, si!-fue lo único que respondí y me senté de nuevo, de mala gana y de brazos cruzados.

Freddy me llamó nuevamente, perdí mi paciencia y me giré esperando así que su maldita tortura acabara.

Este con una expresión de molestia me mostró mi móvil, el cual tomaba con una de sus manos sin siquiera taparlo, osea, pura diana para profesores.

Abrí mis ojos como platos.

-Qué es lo que has-?!-susurré, pero lo suficientemente alto como para que el profesor lo oyera.

-Fred!-bajé la mano de Freddy a toda velocidad para evitar que viera el móvil.-Segundo aviso! Al tercero, te castigo una hora más! Te queda claro?!

-Sí...-murmuré al borde del paro cardíaco.

Cuando el profesor volvió a desviar su mirada miré a Freddy con los ojos como platos.