Cap. 46

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"A qué viene esa cara? Quién se ha muerto? Mi alma... "

POV Fred:

-Vamos, por favor! Qué es lo que pasa?! Por qué actúas así conmigo de repente?! Hace dias que ni siquiera hablamos! Hay algo que está mal?! Por favor, solo dime! La desesperación me está matando, me ahogo en pura agonía!-este no respondió. -Freddy...!-se me escapó en un susurro, en un hilillo de voz.

-No pasa nada, nada está mal, me tengo que ir.-respondió al fin.

-No, Freddy, por favor, escu-!-y me colgó.-Freddy...?-me había colgado... Qué diablos estaba mal? Qué pasaba...?

Dejé caer el móvil y a mi mismo a continuación sobre la alfombra de mi habitación.

Mirando al techo y con los ojos muy abiertos trataba de entender qué se movía por la mente de Freddy: acaso había hecho algo malo? Había dejado de interesarse en mí? ...Acaso me estaba poniendo los cuernos con el cerillo...?

No... No había manera de que aquello pasara...

Pero y si...?

Mi cabeza se lleno de "Y si?" y estuve durante horas, tirado en el suelo, completamente consciente de estar despierto y pensando en las millones de razones por las que Freddy podría estar enfadado conmigo.

La culpa, la agonía, la desesperación me comían las entrañas muy lentamente, me estaba matando de forma literal...

-Fred... Estás bien?-el rostro de Enzo apareció de pronto en mi campo visual.

-Enzo?-pregunté temiendo estar soñando.

-Hey... Te pasa algo?-me incorporé, este se sentó en mi silla de despacho.

-Yo no... No entiendo...!-no paraba de datle vueltas.

Este suspiró.

-Se trata de Freddy, no?-le miré sorprendido, este sonrió.-Cuéntamelo todo.

Y así lo hice, le conté todo lo que yo sabía.

-Y no lo entiendo...! No quiere siquiera hablar conmigo...! Parece un maldito robot...

-Y ya me has preguntado por qué...-asentí con la cabeza.-Fred, no puedes hacer nada, me temo...-me tiré al suelo de nuevo desesperado, la respuesta de Enzo no había sido para nada satisfactoria o reconfortante.-Sólo déjale un tiempo, quizá solo haya tenido un mal día, por qué no lo intentas mañana?-me animó él.

-Supongo...

-Así, me gusta, todo se va a arreglar para buenas o para malas, solo ten fe... Y paciencia.

-Gracias Enzo...

-Bueno, mejor me voy a ir ya, si necesitas algo, házmelo saber, sí?-Sonreí y asentí con la cabeza, entonces él salio de mi cuarto.

Pasaron las horas, cenamos y yo me fui a domir esperando que todo pasara al día siguiente...

Tras levantarme a la mañana siguiente, desayunar, vestirme y prepararme salí a esperar el bus, mientras lo hacía, al estar dado la vuelta, vi como Freddy pasaba a unos metros de mi, sin pensarlo le llamé:

-Freddy!-este pegó un saltito y miró en mi dirección, al verme puso una expresión culpable, dio media vuelta y siguió su camino.

Mi corazón se partió en mil pedazos...

-Hey, tú, chico, segundo día, subes o qué?-me giré con mi ánimo por los suelos y miré a la conductora del bus escolar.-Qué? Quién se ha muerto?-insinuó con un chupa-chups en la boca.

-La lógica... Ya mismo celebran su funeral...-respondí subiendo cabizbajo.

Esta no dijo nada más, me senté en un sitio al azar y, recostandome sobre el siento, metí las manos en mis bolsillos encogido.

Cuando llegué mi mentalidad no había cambiado, pero aún así traté de actuar como si todo estuviera bien, pero eso solo me funcionó por un tiempo...

Cada día me resultaba más complicado esconder mi humor y al final dejé de fingir.

Nada cambió durante aquel tiempo, Freddy no me hablaba, nuevamente, aunque no era ese mi problema,mi problema era el sentirme culpable por siquiera saber que había hecho...

Como había prometido, Fox cada día me resumía el humor, las acciones o los proyectos de Freddy, pero todo era siempre igual, sin despegarse de Golden, con él en todo momento.

Llegó un día en el que, hablando con Fox, llorando como una Magdalena, admití que estaba apunto de dejar a Freddy, que eso sería lo mejor...

Fox sólo me dijo que insistiera y aguantara un poco más, que lo mejor quedaba solo para los que sabían esperar... Decidí replantearmelo por un tiempo más...

Y así, un día trivial, de esos dias de evaluaciones que están apunto de dar las notas, un grupo de chicas se me acercaron.

-Oye, Fred... Últimamente te hemos visto un tanto mustio...

-Así que... Nos preguntábamos si...-todas sonrieron pícaras.

-Este fin de semana va a haber una fiesta y...!

-...Por qué no te vienes?!-habían hecho un complot entre todas, casi no podía creer que se preocuparan por mí así.

-No creo, chicas, de verdad que no me siento con fuerzas...-murmuré con toda la voz que podía sacar de mi alma rota.

-Pero...-todas se giraron hacia la chica que había hablado.-Tú me prometiste que saldríamos un dia y... Bueno...! Ven este finde!

Todas comenzaron a animarme, finalmente tuve que aceptar...

Los días seguían pasando y cada dia tenía menos esperanzas de poder recobrar aquella relación, me pesaba el pecho como jamás lo había hecho...

-He escuchado que la delegada ya empezará con las clases otra vez!-escuché mientras recogía mi mesa para irme a casa un viernes tras finalizar las clases.

-De veras?! Que bien! Ha estado ausente todo el trimestre!-me giré hacia las dos personas que hablaban, eran dos chicos.

-La verdad, no había visto tanta expectación en todo el instituto hasta que llegó Fred, ella si que llamó la atención apenas el primer día.-tomaron sus mochilas y se dirigieron a la salida.

-Normal, es simpatica, tiene un muy lindo cuerpo y es un hacha en fútbol!-y finalmente se fueron.

Miré al asiento que siempre estaba libre desde que había llegado al otro lado de la sala.

Era cierto... Los deberes de la delegada los hacía momentaneamente el subdelegado... No me había casi fijado.

Tomé mis cosas con un suspiro y salí.

Mientras mi mente estaba en blanco y mi cuerpo se movía de forma automática, alguien de pronto tomó mi capucha desde atrás parando mi paso de inmediato.

"A qué viene esa cara? Quién se ha muerto? Mi alma..."

~•°-MI ANGEL-°•~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora