~•°-MI ANGEL-°•~

Cap. 63

"Cuando te hayas cerca de la muerte, tus palabras son sinceras y veraces".

POV Fred:

Entonces llegué, ya podía ver la cabellera castaña de mi amado y a su lado, la rubia que iba a ser manchada de sangre.

-GOLDEN,QUÉ DIABLOS-?

-Fred!-se giró Freddy con la mayor expresión de terror en su rostro, de igual forma lo hizo Golden y, tras él, se encontraba el rostro desencajado de una muchacha de pelo rubio con mechas verdes y ojos violeta con ambas manos sujetas en el aire por el cerillo.

Estaba alucinando.

Me acerqué corriendo sin pensarlo dos veces y me interpuse entre Golden y ella.

-Qué carajos es aue estais haciendo?!-pregunté ansioso.

-TODO ES SU CULPA! TODO ES CULPA SUYA!-gritaba luchando por alcanzar a Golden pero yo la detuve.

-Chica! Chica! Para! Qué diablos te pasa?!

-DÉJAME! DÉJAME! VOY A MATARLO!-gritaba con su rostro desencajado de furia, jamás la habia visto así.

-Qué mierdas has hecho?!-me giré hacia Golden tratando de inmovilizar a Chica.

-N-no tengo idea!-se excusó él notablemente asustado.

-Para de moverte!-la pedí.

-DÉJAME! DÉJAME!-gritaba una y otra vez Chica pataleando y haciendo bruscos movimientos con una fuerza brutal, casi no podía con ella.

A nuestro alrededor la gente se paraba a mirarnos sin comprender, o comprendiendo de mala manera lo que ocurría.

-Golden, vete!-le dije sin pensarlo dos veces.

Este asintió una vez con la cabeza y caminó de espaldas viendo panorama.

-Freddy, vete con él.-le pedí a él.

Este parecia confundido y asustado, pero asintió y se fue corriendo con Golden.

-Chica, tienes que decirme lo que-.

Pero en una de esas logró zafarse y con una piedra que no había notado que tenía en su mano, impactó mi cabeza con un golpe seco.

Me quedé por unos instantes estático y, acto seguido, me desplomé sobre el suelo perdiendo el conocimiento.

-...E...! ...Ed...! ...Ios... Red...! Fred!-abrí mis ojos muy lentamente y frente a mi, la figura de un angel se hizo ver.-Oh, por dios, Fred! Fred, me oyes?!

-Uh...? Me morí...? Qué lindo angel me tocó...-divagué aún adormecido y confundido por la contusión.

-Puedes levantarte?!-preguntó com lágrimas en sus ojos.

-Uh-. No sé...-me incorporé muy lentamente y con ayuda de Freddy me logré levantar.

-Dios santo...!-me abrazó Freddy con suavidad empezando a llorar.-Por dios, Fred! Menos mal que estás bien!

Entonces noté un pinzante dolor en la cabeza, lo toqué seguido de un sollozo, entonces la palma de mi mano se volvió roja y pegajosa.

-Qué es...?

-FRED!-me giré aún atontado, confundido, no entendía nada.-CARIÑOE, ESTÁS BIEN?!-de pronto mi madre impactó contra mi, de tsl manera, que sentí que por unos segundos, había vuelto a perder el conocimiento.

-Linda...! Con cuidado!-también estaba Enzo.

-Oj, mi amor nos vamos al hospital, vamos ahora mismo!-se puso nerviosa mi madre revisando mi cabeza y tomándome de la mano mientras salía apresuradamente del parque.

-Freddy, ven también...!-escuché decir a Enzo en la distancia.

De pronto me encontré montado en el asiento trasero del coche de mi madre con Freddy a un lado y Enzo al otro.

Mis parpados pesaban mucho y sentía la tentación de cerrar mis ojos.

-No te duermas, Fred...!-me pidió Enzo.

-Vale...-respondí luchando contra mi sueño.

Apenas podía escuchar nada, mi respiración tapaba todos los sonidos de alrededor, mis ojos continuaban cerrándose.

-Je... Hace frío aquí...-murmuré sonriendo atontado.

-No, Fred, oye, no te duermas!-me pidió mi ángel.

-Está bien...

-Fred, oye habla conmigo! Si te duermes podrás no hacerlo de nuevo!-gritó Enzo.

-No pasa nada... Mi ángel de la guards bo me permitirá morir...!-señalé la figura de Freddy, de pronto el sueño de hizo más intenso y caí rendido.

Recuerdo vagamente el ajetreo, la agitación, las voces pero aunque quisiera despertar, no podía, me preguntaba si eso era el fin.

Ese irritante pitido...

No paraba de sonar una y otra y otra vez.

Me estaba volviendo loco...

Abrí mis ojos, debía ser un despertador, pero el mío no sonaba así...

-Sí. [...] Lo siento. […] Claro. [...] Adiós.-miré en dirección a la voz, la figura se giró hacia mí y tardó un oar de segundos en reaccionar.-Hijo!-corrió hacia mí y me abrazó.

-M-mamá...?-estaba conduso, pero muu despierto.-Dónde...?

-Está bien, está bien, no te pongas nervioso...-acarició mi mejilla.-Estamos en el hospital.-suspiró sonriendo.

-En en hospital? Qué ha pasado?

-Eres tú quien debería decírmelo.-susurró con voz suave.

-Fred...!-escuché la voz de enzo tras mi madre, en sus dos manos llevaba dos bebidas en vasos de papel.

-Hola...

-Cómo te encuentras?-se acercó a mí y le dio a mi madre uno de los vasos.

-Confundido... Y me duele un poco la cabeza. -admití yéndome a acariciar el golpe, entonces fue cuando noté la benda en mi cabeza.

-Bueno... Está bien que solo te duela un poco... Qué fuerte eres, Fred.-sonrió Enzo.

-Y Freddy...?-se me escapó el preguntar.

Mi madre y Enzo se miraron, entonces de apsrtsron y la hermosa figura de Freddy se dibujó tumbada, durmiendo en el sofá de atrás.

-Él está bien...?-pregunté preocupado.

-Sí,pero mevesitaba descansar, es realmente tarde...-murmuró Enzo.

-Cuánto dormí?-pregunté.

-Gracias a Dios unas horas... Tan solo son las cuatro de la mañana...

-Ya veo...

-Debería levantar a Freddy... Hsy que llevarlo a su casa...-murmuró mi madre girandose hacia él.-Pobrecito, estaba muu preocupado por tí... Casi tanto como yo...-murmuró mi madre sonriendo.

-Siento haberos preocupado...-murmuré mientras veía como Enzo se acercaba a Freddy y lo agitaba dulcemente para despertarlo.

-Hey, hola, voy a llevarte a tu casa...-le dijo.

-Fred...?-preguntó aún adormilado.

Qué lindo... Acababa de despertar después de un shock y yo era su primer pensamiento... De morir en ese momento, moriría feliz...

"Cuando te hayas cerca de la muerte, tus palabras son sinceras y veraces".