XII

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Jonathan

Estoy estacionado frente a mi casa, sintiéndome raro, diferente, anómalo. Algo cambió dentro de mi, estoy seguro, lo sé, mi punto de vista es distinto, mi forma de pensar.

La realidad que percibo se ve distorsionada pero no negativamente, todo lo contrario, todo es hermoso, la pared agrietada que se ve en el frente de mi casa a adquirido un estilo rustico que antes no había notado, la enredadera en el costado de mi ventana que antes me parecía mugrosa ahora me resulta rupestre, la vereda rota que conduce a la puerta principal antes me parecía un par de piezas inservibles para romper pero ahora las observo como partes de un increíble rompecabezas para armar.

Si, lo sé, es una estupidez, es cursi y es ridículo.
Sin embargo, no puedo dejar de sentir esta ridiculez. No puedo dejar de pensar que todo esto es por Ariana, todo se volvió hermoso gracias a ella.

Y nadie había logrado eso antes. Nadie me había hecho sentir... esperanza.

-¿Entonces no es tu novia?-pregunta Magui curiosa dejando los dibujitos mientras yo barro la casa.

-¿Cuantas veces me vas a preguntar lo mismo?

-¿Se dieron besos? ¿Como en "Yago: Pasión Morena"?*

-Magdalena ¿A que hora vas a lo de Chechu?

-Me dijo que tipo seis de la tarde por ahí. Vamos a hacer Pastaflora.

-Se dice "Pastafrola" y no vas a ir hasta que hagas la tarea de Naturales.

-¡Pero hoy es Domingo!-Resonga haciendo su cabeza hacia atrás.

-Ya estabas atrasada. Si no hacés esa tarea no te llevo a ningún lado.

-¡Jhonatan!-grita caprichosa.

-Magui.-dice mi tío con seriedad apareciendo desde el baño.

-Ya voy.-refunfuñando acepta y se va a su cuarto.

-Asique...-comenta mi tío sentándose en el sillón.-¿A mi si me vas a decir si pasa algo o no con esta chica?

Su rostro muestra la curiosidad pura. No podría mentirle aunque quisiera, él lo sabe, me conoce bien y tiene el factor de trayectoria a su favor. Él una vez fue adolescente, fue rebelde, creció, tuvo novia y se metió de lleno a la vida criminal. Si hay alguien capaz de guiarme por este camino llamado vida... definitivamente es él.

-Me pasan cosas con ella, pero todavía no es nada serio. Simplemente estamos viendo como sale.

-Ok. Pareciera que te precipitás para darme información. Esto no es un interrogatorio Jonathan, es una simple pregunta amistosa.

-Ya sé. Es que, no quiero que pienses que esto puede distraerme de mi trabajo.

-Yo sé que no. Ese es el problema, desearía que las circunstancias fueran otras.-dice y comienza a mirar al suelo dejando en evidencia alguna especie de pesar que le carcome.

-¿A que te referís?

-Me gustaría que tu vida fuera otra. Que seas un simple estudiante universitario preparándose para sus exámenes.

-Me gusta mi vida tío. No la paso mal y soy bueno en lo que hago.

-Si pero el precio que estás pagando no se debe tomar a la ligera. Te das cuenta que cada vez que salís en un auto a la madrugada automáticamente tu vida comienza a pender de un hilo ¿no?

-Tío...

-¿Que vas a hacer Jhoni? Si a mi me pasa algo ¿que vas a hacer?-su voz se quiebra, solo un poco pero se quiebra al fin.

Dentro del FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora