Ariana
El mate está lavado, se le ven los pequeños palos flotando y la yerba asentada abajo. Igual me lo tomo y no le digo nada a papá. Son tan pocos los momentos que lo tengo conmigo que no quiero la más mínima fricción en la poca porción de su presencia en mi día.
—¿Cómo te fue anoche?— pregunta mientras come un bizcochito.
—Bien, el tío de Jhoni está grave pero estable. Seguro sale adelante.
—Que bueno, me alegro... ¿y Mariano cómo lo tomó?
¡Nunca más me vas a tomar por idiota!
Me sacudo un poco ante el reciente shock. Cómo un impulso trato de mirar el moretón de brazo y arremangarlo y mostrarle a mi padre pero me contengo. No es nada que no pueda solucionar por mí misma, no hay necesidad de preocuparlo.
—Eee... bien ¿porqué habría de tomarlo mal?
—Por que fuiste ver a tu ex novio Ariana.
—No fui a ver a mí ex novio fui a ver a su tío.
—Haceme recuerdo ¿Tío de quién?— me mira sonriendo maléficamente mientras le dan un sorbo al mate.
—Basta papá.
—Simplemente no te veo tan feliz cómo cuando andabas con Jonathan.
—Ok, suficiente ¿podemos hablar de otra cosa? ¿Por favor?
—Claro, hablemos de las vacaciones.
Al oír la palabra "vacaciones", me giro para mirarlo sonreírme. La impresión es enorme. No hemos tenido en un par de años. Solo hemos sido Víctor y yo yendo a Caleta Olivia a pasar el verano con los abuelos. Lo hemos disfrutado pero el deseo de cambiar de aire era algo que siempre nos atrajo.
—¿Estás hablando en serio? Porque si es una broma, es...
—Estoy hablando muy enserio. Tu madre y yo coordinamos las vacaciones. Son 23 días. No es mucho pero pensamos que nos vendría bien salir los cuatro a San Luis... ¿Que te parece?
Me levanto y lo abrazo fuerte. Me siento muy felíz y solo quiero que termine el año cuanto antes.
—Gracias papá, en serio, muchas gracias.— le digo mientras envuelvo su cuello y lo aprieto.
—De nada mí reina, vos más que nadie lo necesitas.
Estoy en la escuela. Y no puedo dejar de pensar que está es una de las últimas veces que comparto con mis compañeros. Los momentos que quedan a partir de ahora son escasos y con una fecha de vencimiento que se aproxima a mucha velocidad.
Y estoy felíz por eso, de verdad que lo estoy. De hecho, siento el ferviente deseo de que todo termine cuánto antes. Pero eso no impide que comience a sentir una nostalgia prematura. Comienzo a analizar mí alrededor. Los chicos que me molestaban por mí gordura cuando éramos pequeños, las chicas que solían ser amigas y ahora son perfectas desconocidas, conocidos amigables con los que te compartido hermosos momentos y muchas risas.
Y del otro lado del salón... Mariano...
Su mirada no busca la mía, ni siquiera está mirando a ningún lado cerca de mi. Y yo lo miro fijo tratando de descifrar que hacer. Obviamente la respuesta es charlar las cosas y aclarar este asunto. Sé que lo hice enojar pero no voy a permitir que me vuelva a poner un dedo encima.
![](https://img.wattpad.com/cover/156531890-288-k486253.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Dentro del Fuego
Lãng mạnAño 2002. Argentina sigue sufriendo las consecuencias de la crisis económica. Ariana es una joven de familia y amigos, es amable y cariñosa y se encuentra cursando su último año escolar, pero nadie sabe (ni siquiera ella misma) que esconde un secret...