Simplemente tu [Dramione]

🦁 T R E I N T A Y S I E T E🐍

Narra  Hermione

Era muy divertido cocinar con mamá y mi sue... la señora Malfoy, al igual que ellas, me había hecho una coleta alta, pero comencé a escuchar zumbidos, primero fueron leves, después de esto aumento muy rápido.

Miré a la barra y recordé que Draco había dicho que se daría una ducha rápidamente.
Me alejé de la mesa, dejando en ella mi varita, Narcissa me miró primero.

— Emilie, algo le pasa a Hermione.— Mi madre me vio, apagó el fuego de la estufa y corrió hacia mí.

— Hermione, cariño ¿Qué pasa? —
Ni siquiera podía contestarle, sentía un dolor que iba creciendo en mi cabeza. En esto, Theo llegó a la cocina, mamá me había acercado una silla, me senté pero comenzaba a sentir que el sol estaba frente a mi, tomé un plato y comencé a abanicarme, tenía demasiado calor.

— Iré por papá. — dijo rápidamente Theo y salió corriendo de la cocina.

Narra Theo

Fui en busca de papá o el señor Malfoy, alguien que me ayudara, sin querer choque con Draco.

— ¿Qué pasa Theo? ¿Por qué corres?

— ¿Haz visto a mi padre Draco?

— Si, lo acabo de saludar, entro a la biblioteca ¿Por qué? ¿Pasa algo?

— Es Hermione.

Narra Draco

Corriendo a la cocina me encontré a mi padre, quien en seguida me siguió. Cuando llegamos, Hermione estaba llorando, sus manos estaban cubriendo sus oídos, mi padre tomó su varita y lanzó un hechizo, lo había murmurado, Hermione poco a poco quito las manos de sus oídos.

—Muchas gracias Señor Malfoy.

— Nada que agradecer Hermione, además, puedes decirme Lucius.

— ¿¡Qué fue lo paso!?.- Llegó el padre de Hermione asustado.— ¿Estás bien querida?.— la abrazó, solo intento asentir, pero no pudo, comenzó lentamente a negar.

— No sé qué pasó papá.— se separaron del abrazo y me miró sonriéndome tristemente. Extendí mis brazos y ella caminó, la abracé, sentía su aroma como siempre, tan bonito y fresco. Después de que desayunamos y todos nos aseguraramos de que Herms estaba bien, todos volvimos a nuestras actividades, aunque ya había planteado con Hermione pasar la tarde redecorando el jardín del frente.

— Hermione, ¿Puedo hablar contigo?. — Llegó papá justo cuando estábamos por salir.

— ¿Pasa algo papá?.— le respondí yo antes.

— Tenenos que hablar, los tres, es algo realmente serio. — nos pusimos de pie y fuimos a mi habitación, donde tomamos asiento.

— Bien Hermione, tenemos que comenzar a entrenarte.

— ¿Por qué? ¿Pasa algo?. — tanto ella como yo estábamos sumamente nerviosos.

— Él a encontrado la manera de torturate, no te dejará en paz.

— Padre estás hablando de...

— Estoy hablando de Lord Voldemort.

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Narra Ginny

Había pasado tres malditos años Astoria y Lavander nos engañaron, tanto a Ron como a mi, nos han estado tomando para sus malditas acciones, nos han utilizado a través de Crucios e Imperios, suelen burlarse de nosotros, estuvimos a un maldito punto de conocer al señor tenebroso y para colmo, tiene amenzada a toda la familia. Dañamos a Hermione, a Harry, por culpa de estas estúpidas, pero ya no más, al fin en contre el hechizo perfecto para que se les regrese, ya no seremos marionetas.

— Bueno, ¿Están listos para dañar a la gente hoy?. — acababa de llegar Lavander.

— Claro estropajo, solo te estoy esperando. — le dije con obviedad, tenía un plan y no saldría mal.

— ¿¡Tu quién te crees para hablarme así Zanahoria!? — genial se enojó la elotito.

— Ginevra Weasley, y nunca volverás a hacerme daño, ni a mi ni a mi familia, y te arrepentirás de todo lo que hiciste. —la amenacé y ella sacó su varita, me apuntaba con la punta casi en dirección a mi pecho, espere a que diera su última palabra, como siempre.

— A mi, no me vas a andar amenazando, ¿Te crees muy buena? Adelante, hazlo.— ella acomodó su cabello hacia atrás qué tonta.

— Cruc...

— Obliviate.— la interrumpí antes de que pudiera hacerme algo.

— Lavander, ¿Qué es todo este maldito ruido? — Ohhhhh llegó la papa, es decir, Astoria.

— Obliviate. — le lancé a ella también, ambas estaban en el suelo, no pasaron 10 segundos cuando se pararon.

— ¿Quién soy?¿Dónde estoy?. —después de eso Millicent hizo lo mismo.

— Tu eres Jacinta.— apunté a Millicent.— y tu Antonieta.— ahora apunte a Lavander.— ambas venden albahaca en la orilla de la montaña pero vinieron a ver si teníamos semillas de girasol. No me pregunten para que por qué no se, se desmayaron ahorita.

— Sentimos la molestia querida, ahora nos vamos, la albahaca no se vende sola. —se despidieron y salieron de la casa.

— Hora de pedir disculpas.
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Holaaaaaa Potterheads
Siento muchísimo la tardanza, se que estaban esperando el capítulo.
Estaba algo enferma, pero ya estoy mejor, podré actualizar más.
Las amooooo y les agradezco todo el apoyo.
Pdt. Feliz día de reyes

-Sofia_RodriguezC