James.
—¡Pelea de gatas!—Grito al ver como las gemelas se lanzan encima de Bella, arrojando a Jake hacia la pared.
¿Debería decir gatas o de aves?
Digo...las tres tienen alas...con plumas. Aunque una las tiene negras —a veces con llamas— y las otras no tengo ni idea, aunque si son águilas deberían de ser cafés o algo parecido.
Si, definitivamente debo de cambiar lo de gatas.
—¡Pelea pajarracos!
—¡James!—Me riñe mi linda esposa querida.
Una de las gemelas sale volando sobre nuestras cabezas y obligo a Taylor a agacharse.
—¡Ten cuidado en donde piensas ser lanzada!—Le exclamo a la gemela que se está recomponiendo del golpe.—¡Casi caes sobre mi esposa y mis hijos!
Lucifer cierra los ojos y suspira pesadamente.
Seh, debe de estar lamentándose de haberse enamorado de una loca adicta a la violencia.
Bella le hace una llave a la otra gemela y la tira al suelo en un golpe seco. Pero la que previamente había sido lanzada lejos, le llega por la espalda y le entierra sus garras en el cuello y parte de su espalda. Mi dulce y pacífica hermana —nótese el sarcasmo—, la toma del cabello y la tira al suelo a un lado de su gemela, la cual llamaré Número 1.
Ver tantos rostros iguales confunde.
—¡Basta!—Jake se pone en frente de Bella impidiéndole acercarse a las chicas.—¡Carlos, hazlo!
Inmediatamente, Carlos los envuelve en un espeso humo azul y desaparecen Jake junto con sus chicas.
—Ay...estaba buena la pelea.—Finjo limpiarme una lágrima.
Taylor me da un golpe con su codo que me saca el aire.
—Uff, amor...eso estuvo bueno.—Me sobo el área afectada.
Bella se sacude el polvo —inexistente, cabe destacar—, de su ropa y se la acomoda correctamente. Suspira y levanta su cabeza, sonríe.
—Bella...—Reprende Lucifer.
—No estábamos haciendo nada malo.—Rueda los ojos y se cruza de brazos.—Solamente que entraron en el momento justo, pero equivocado, y malentendieron las cosas.
—Bella...—Adelina señala su cuello y Bella lo toca, haciendo una mueca en el proceso.
—Auch, eso aún no cicatriza.
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Averno: Los Cuatro Jinetes
Paranormal¿Qué estás dispuesto a hacer para sobrevivir? ¿Le venderías tu alma al Demonio? ¿En quién confías? ¿Quiénes son ellos cuatro? ¿Por qué Dios no te escucha? Hay miles de preguntas sin respuestas concretas, sólo recuerda una cosa: Lucifer no siempre...