El ambiente presente en la DEO era ciertamente tenso. Todos los agentes se movían de un lado a otro, preparando armas y proyectiles para enfrentarse a la amenaza que se cernía a unos kilómetros de la atmósfera, pero su bullicio era únicamente parte del protocolo. Nadie sabía a ciencia cierta cuál era el verdadero estado de la situación. Habían recibido un mensaje media hora antes, pero el dialecto era tan retorcido y extraño, que apenas pudieron traducir una palabra mediante fórmulas igualmente rebuscadas.
<<Códex>>
- Me preocupa la posibilidad de que lancen una ofensiva- Planteó Hank Henshaw, apostado frente a una pantalla donde se veían las naves alienígenas (equipadas, según su apariencia, con una tecnología que hacía de las computadoras de la organización meros juguetes de plástico) suspendidas frente a los satélites de la DEO.
- No dieron ningún aviso- Observó Alex, a su lado-. Según la información que Superman pudo aportar desde la fortaleza de la soledad antes de su viaje a la Zona Fantasma, los Acreodontes pertenecen a un pueblo guerrero. Tienen políticas y reglas. No nos atacarían sin haber dado alguna clase de advertencia o posibilidad de rendición.
- Con eso ya cumplieron- intervino Lena, parada de brazos cruzados junto a Kara, que estaba apoyada contra una mesa de vidrio con estadísticas dibujadas en la superficie-. Unas dos veces, para ser más precisa.
- Tres- corrigió Kara-. A esas cosas les gusta repetir sus ultimátum dramáticos en cada encuentro.
Se sumieron en un agudo silencio.
- De acuerdo- Dijo Hank, con aires de estar dispuesto a tomar el control definitivo de la situación-. Quiero que me comuniquen con ellos. Agente Schott, envíe una señal al casco de la flota.
- De hecho, jefe- respondió el agente en cuestión; un joven enérgico que siempre se vestía con combinaciones de camisas y sacos llamativos-, acaban de enviar un segundo mensaje. Esta vez se trata de un dialecto mayormente descifrable- presionó algunas teclas y un texto apareció en la pantalla central de la sala, substituyendo la imagen de las naves.
"Entreguen la semilla de los profetas o su planeta arderá. Tienen hasta la próxima vuelta del sol amarillo"
- Todos unos poetas...- comentó con ironía el agente Schott.
- Significa que tenemos veinticuatro horas para darles a Lena o nos atacarán- Tradujo Kara, pensativa-. Habrá que hallar la forma de repelerlos causando el menor número de daños posible.
- En términos generales, no podríamos defendernos de su ataque- Afirmó Hank poniendo las manos en las caderas-. Aún si tu primo estuviese aquí para pelear a tu lado, no podrían contra todo un ejército de Acreodontes.
- Pero ahora las cosas son diferentes- rebatió la rubia-. Lena descubrió su debilidad, y sabemos mucho más acerca de ellos que la vez anterior.
- Lena descubrió la debilidad de las hembras- rectificó Alex-. Según el registro de la fortaleza de la soledad, la piel de los machos, como descubriste durante tu primera batalla, es de distinta composición; por lo que sería difícil determinar si las bajas temperaturas le causarían el mismo efecto.
Kara frunció los labios.
- Podríamos intentar darles lo que quieren...- Sugirió Lena.
Los demás la miraron.
- ¿Qué quieres decir?- Preguntó Alex.
Kara, en cambio, creía saber a lo que se refería.
ESTÁS LEYENDO
Nuevos Comienzos- Supercorp
Fanfiction"El camino a la grandeza está repleto de cuestas y obstáculos, de amistades y enemistades, de amores y pérdidas... Pero llegarás a la cima algún día, pequeña; y cuando eso ocurra, todo lo que tuviste que pasar al fin cobrará sentido ante tus ojos" L...