Nuevos Comienzos- Supercorp

Capítulo 58

Lena se despertó entumecida, en medio de un estado que le impedía determinar si se hallaba consciente o soñando, o si acaso se trataba de alguna especie de vigilia indefinida. Tuvo que parpadear para adaptarse a la luminosidad de la habitación; se removió algo desorientada. No recordaba gran cosa, y le costaba acceder a sus recuerdos más cercanos.

Sentía la textura del cuero por debajo del cuerpo ligeramente vestido. Achicó los ojos en tanto trataba de aguzar los oídos para aislar e identificar algún sonido.

-          Hay que hacer más pruebas. Aún no es seguro, pero las posibilidades son favorables a esa idea.- Oyó que decía una voz de hombre.

Hubo silencio por un instante.

-          ¿Se desmayó por la kryptonita?- Preguntó otra voz, esa vez de mujer. Una que le resultó enormemente conocida.

-          Así lo parece- Respondió el primero-. Expusimos a las dos a una dosis reducida que no podría resultar demasiado dañina para ningún kryptoniano. El pulso del bebé disminuyó, y ella perdió la conciencia.

-        Parece bastante seguro entonces, ¿no es así?- Comentó la segunda con una vibra de evidente alborozo en la voz.

Lena parpadeó una vez más para despabilarse. Las palabras daban tumbos en su conciencia adormecida, activando todas las alarmas sin llegar a hacerse entender del todo.

-          ¡Lena!- Alex se inclinó sobre la camilla y apoyó una mano sobre su hombro-. Venga, recuéstate. No te incorpores. ¿Cómo te sientes?

La morena se llevó una mano a la cabeza y cerró los ojos, sintiendo que todas sus fuerzas la habían abandonado.

-          Como si hubiese corrido tres días sin parar- Contestó, asombrándose de su propia capacidad de razonamiento-. ¿Qué sucedió? ¿Dónde está Kara?

-          Le dije que se marchara a hacer unas rondas por la ciudad. Su ansiedad estaba poniendo a prueba la resistencia de la estructura del edificio- Contestó Alex-. ¿No recuerdas qué sucedió?

Lena ladeó la cabeza y echó un vistazo alrededor. Estaban en un cuarto de lo que seguramente sería la DEO, rodeados de monitores y aparatos con cables.

-          Recuerdo... que estábamos haciendo unas pruebas al bebé, ¿no es así?- Dijo, atajando lo primero que se le vino a la mente, lo cual no podía ser lo último que había ocurrido, puesto que no explicaba su inconsciencia. Y no creía realmente en la posibilidad de haberse desmayado sin más.

-          Así es- Contestó Alex-. Tratamos de extraer una muestra de ADN del útero, pero no pudimos.

La otra joven alzó una ceja.

-          ¿Y eso por qué?

El agente junto a Alex, de rasgos coreanos, y esta otra, se miraron de forma extraña.

-          Al parecer es inmune- Replicó Alex-. La bebé- agregó como para aclarar.

Lena frunció el ceño y los contempló con extrañeza.

-          ¿La bebé?- sacudió la cabeza, asombrada-. Inmune... ¿como Kara?

Los otros dos asintieron despacio.

-          Basados en la historia que nos contaron tú y mi hermana- continuó Alex-, decidimos comprobar su teoría. Claro, no sin antes consultarte.

-          ¿Y qué pasó?- Inquirió Lena, transcurrido un rato de silencio en que nadie agregó nada.

-          Sometimos a la niña a una prueba con radiación de kryptonita- contó el agente-. La afectó gravemente, pero ahora está estable. Y al parecer, de alguna forma, no se sabe si por medio del embarazo o algo más, usted se volvió igual de alérgica a la kryptonita. Quizás de forma aún más grave, puesto que su organismo no es tan resistente como el de los kryptonianos. De ahí que se desmayara.