Naruto Shippuden / Iridiscencia

Capítulo 7: Mensaje entregado

Sobresaltada por el sonido de la puerta siendo golpeada, los papeles en la mesa donde Karin dormía volaron por todas partes, todavía cansada, con los ojos no abiertos completamente fue a la puerta.

«Que desastre... que bien empiezo mi día».

La puerta volvió a sonar.

—Ya voy...

«Me disculparé con Anko», pensó Karin, suspiró, «ojala fuera tan sencillo con Tsunade...»

Abrió la puerta, pero no era la persona que esperaba, de hecho, no lo conocía.

—Disculpe, Karin-san —dijo el AMBU—. Hokage-sama la llama, debe ir inmediatamente.

Se marchó sin más.

Karin cerró la puerta, sus pensamientos rápidos, no se movía y sus manos comenzaban a sudar.

Se mordió las uñas, pero finalmente, tenía que ir, no podía hacerla esperar.

Ya se había cambiado, cerró la puerta, bajó por la escaleras, mirando al frente, al encontrarse con personas intentaba aparentar estar relajada, no tensa.

En la calle divisó el edificio Hokage, tenía que estar relajada.

Sabía que no debería avergonzarse a sí misma, un hombre la miraba, pasó por su costado, una mujer la miraba, pasó por su costado.

«¿Me consideraran normal?», pensó Karin.

Otra cuestión es que la vieran como una extraña, alguien que no pertenece, sabía que no podía confiar en el color de su cabello, siempre le hacía sentir rara frente a los demás, como cuando en una conversación lo primero... lo maldito primero que veían era el cabello. No los lentes, no la boca, no el pecho.

«¿Quiero que me vean el pecho? ¿Soy pervertida? ¿Eso es lo que soy? Aunque tampoco hay mucho que ofrecer... debo de dejar de pensar así».

Incluso si Ino fuera más... bonita que ella, todavía había cosas que ofrecer, que no daría por el cuerpo de ella... poniéndose a pensar en lo que hubiera sido de su vida con otro cuerpo, las cosas que haría...

«¿Sería más fácil pedir perdón? Con lo que tendría más... ánimo y eso...»

«En primer lugar ¿por qué dije eso? ¿Algo del subconsciente que investiga Ino? A me gustaría preguntarle a la torpe, con sus misiones con el Equipo Asuma, no ha tenido mucho tiempo para hablar con ella».

«... Al tema, ¿Soy estúpida? ¿Llego hasta perra? No, ese es un término inadecuado, no es que me pare lanzando al primero que vea, solo puedo decir eso de Hajime, incluso así... ahora que no lo veo hace tres años, me pregunto si lo encontraré y me dirá que soy atractiva y nos iremos a casa, ese será el fin de la historia, al menos la mía, los demás pueden continuar, pero yo con él no tendríamos mucho que contar, ese sería el punto final»

La secretaria con una sonrisa radiante, le dijo adelante y ella subió hasta su oficina.

«Aunque no sé si pueda ayudar a Hajime, ¿quiere ser ayudado? No puedo encargarme ni de mis cosas y quiero hacer eso, también menos mal que no le tengo que decir nada a Sakura... y aquí estoy, pensando en cosas inútiles, nunca aprendo, nunca aprendo».

Agudizó su olfato, buscando en la oficina, en las escaleras antes de entrar.

Se detuvo en seco.

 «¿Ese es su olor? Está con Tsunade, incluso hay más personas...»

Tragó saliva y sentía frío en su cuerpo, eso que las mañanas de Konoha eran bastante cálidas.

«¿Estarán hablando de mi? Si es eso, puedo ocultarme, no quiero que me vean, pero Tsunade me ha llamado ¿una reprimenda? Algo así sera...»