Blind Kisses ゜*☆..:*･VKOOK･*:..☆*ﾟ

:*･ Dios de la Provocación ･*:

Ya había terminado el receso y aquel grupo de amigos se despidieron, no sin antes haberle preguntado a su hyung mayor por que había llegado con Namjoon y peor aún más porque estaba su lindo rostro con un ligero golpe en su mejilla. Jin solo sonrió como tonto enamorado ignorando a sus dongsaens olímpicamente ya que en su mente solo estaba lo que Nam había hecho por él y las pocas palabras que lograron compartir, los chicos se habían mirado entre ellos, dejaron ahí las cosas, ya les sacarían la ínformación a su mayor cuando estuvieran en la casa de Kook.

Sonó la campana dando aviso que el segundo periodo comenzaba, le avisaron a Jin que salindo de clases irían a casa de Jungkook a celebrar, Jin les había mirado confundido ¿de que se había perdido en este corto tiempo? Sus dongsaens le sonrieron y se fueron cada uno a su salón de clases. Dejando a su hyung con la curiosidad.

Seongwoo se encontraba pensando en que bonito seria que le pase lo mismo que a Kookie o ha Jiminie. El realmente quería hablar con su amor imposible, pero eso era... imposible. De tan solo pensarlo ya le sudaban las manos, pero... Esa escena se le hacía realmente maravillosa.

Iba deambulando tan concentrado en las escena que se creaba en su mente que no logro entender a tiempo las palabras de advertencia.

— ¡CUIDADO!

Pero fue demasiado tarde cuando volteo su rostro. No pudo esquivar aquel golpe en su estómago que lo dejo son aire por unos segundos. Cayó al suelo de rodillas tratando de respirar, más el aire no llegaba a sus pulmones. Se estaba ahogando.

— ¡hey, chico! —escuchó gritar a alguien— ¡dime que estas bien por favor!

Ongie no entendía bien las palabras por que le costaba demasiado respirar como para concentrarse en quien le hablaba o que le decían.

Sintió que su cara era tomada delicadamente por unas fuertes manos para alzar su mirada, ahora veria quien fue el causante de su desgracia. Y si antes le costaba respirar ahora sintió que el aire se le atoro en los pulmones.

Y sin más todo se volvió negro.

Daniel sabia que era un idiota por haber accedido a la estúpida apuesta que le habían hecho algunos compañeros de su salón. Habían estado en clase de deportes, ya habían terminado la clase y el entrenador les dejó para que jueguen los 15 minutos restantes, sus compañeros le dijeron para jugar fútbol pero él se había negado, no le gustaba mucho ya que él prefería guardar energías para su club de esgrima. Pero sus compañeros empezaron a bufar diciéndole cosas como: "seguro que no sabes jugar futbol" o "por que eres uno de los populares te crees especial", sinceramente él ya era especial o al menos así siempre se sentía no importa lo que que los demás digan. En fin eso le molesto y se adentró en la cancha para enseñarles a esos idiotas como es que se juega, el jugaba bien, no por las puras Jackson uno de sus mejores amigos les había enseñado bien cuando necesitaba practicar fuera del horario escolar.

Habían empezado y sin duda el había barrido con muchos de sus compañeros en el trayecto de llegar al arco y cuando se dispuso a disparar, le hicieron trampa, ¡habían dicho el nombre de la chica que le gusta como si estuviera ahi! Estúpidos tramposos, y con ese simple acto se distrajo por un segundo. Suficiente para estropearlo todo.

Lamentablemente el disparo salió todo torcido hacia cualquier lado menos al arco, pero no pensó que justo alguien pasara por ahí y por más que gritó para evitar aquel accidente, no fue así.