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Narra Juliana.

Ya nos encontrábamos dentro de la sala del cine en nuestros respectivos lugares, yo disfrutaba de mi algodón de azúcar mientras miraba la película pero en sí no le estaba prestando atención ya que mi mente estaba en Joel, quién estaba serio y con la mirada enfrente, algo raro le pasaba porqué de un momento a otro su actitud cambió.
Entonces me acerqué a el y recargue mi cabeza en su hombro, tome un poco del algodón y lo acerqué a su boca pero el solo nego con la cabeza y alejó mi mano.

- No quiero, entiende.- dijo serio.

- ¿Que tienes?.- lo miré con un puchero.

- Nada, ve la película.- respondió en un suspiró.

- Te conozco y se que tienes algo, de repente tu actitud cambio.- dije aún recargada en su hombro.

- De verdad no tengo nada.- entonces acarició mi cabeza.

- ¿Me das un besito?.- mencioné con un puchero, entonces sonrió y sentí sus labios sobre los míos, el beso se profundizó pero tuvimos que parar por falta de aire.
Continuamos viendo la película hasta que finalmente termino y salímos de la sala tomados de la mano, por todo el pasillo había carteles de próximos estrenos y me emocioné al ver el de la nueva pelicula de bob esponja.

- ¿Ya viste?.- dije soltando su mano y acercandome al cartel.- Que emoción.-

- Cuándo se estrené vendremos a verla.- me volvió a tomar de la mano y nos alejamos.

- ¿De verdad?.- dije con una sonrisa y asintió.

Salímos del cine luego caminamos por el estacionamiento y subimos al auto.
En ese momento su teléfono comenzo a sonar decía "Papá" en la pantalla.


- ¿No vas a responder?.- dije tomando el telefono.

- Ya lo hubiera hecho.- respondio con la vista enfrente.

No dije más y lo dejé ahí y en todo el caminó solo fui mirando por la ventana; el auto se detuvo justo frente a mi casa.

- Pensé que seguiriamos pasando la tarde juntos.- dije desanimada.

- Tengo cosas que hacer.- dijo viendo la hora en su reloj de mano.

- Entiendo.- dije bajo, me ponía triste pues nadie me quitaba la idea de la cabeza de que algo le ocurría.- Nos vemos mañana.- me acerqué a el para darle un beso, entonces el me tomó de la nuca y profundizo el besó.

- Te amo.- dije al bajar y no obtuve respuesta.

- Hola cariño.- menciono mi madre con una maceta en sus manos venía del patio trasero, rápidamente me sorprendí pues no pensaba que estaría aquí, entonces note como el auto de Joel rápido acelero, lo bueno que de todos modos los vidrios estaban polarizados.- ¿Y ese auto tan bonito, de quien es?.-

- Es de... de una compañera, estaba haciendo un trabajo en su casa y se ofrecio a traerme.- dije normal.

- A mi no me engañas.- menciono y rápidamente sentí la sangre recorrer rapido todo mi cuerpo.- Es el muchacho que te gusta de la universidad, ya estan saliendo verdad?.- dijo con una sonrisa.

- No... de verdad que era una compañera, no tengo porqué mentirte.- dije tranquila.

- De todos modos recuerda que tu y yo tenemos una conversación pendiente.- me tomó de la mano y nos sentamos en una banca de madera que estaba en el pequeño jardín. - ¿Que ha pasado con el chico que te gusta?.-

No me importas. | Joel Pimentel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora