No me importas. | Joel Pimentel.

83.

El ascensor se detuvo en el tercer piso, caminamos un poco y entramos a la biblioteca, Joel cerró la puerta.

- Se breve.- dije dándole la espalda.

- Antes que nada, ¿estás bien? Zabdiel me dijo que estuviste anoche en el hospital.- menciono preocupado, poniendo una mano en mi hombro.

- ¿Realmente eso te importa?.- lo miré fijamente.

- Por supuesto, me asusté mucho cuando me lo dijeron.-

- Estoy bien.- dije fría.

- ¿Por qué no me llamaste?.- suspiro.- Lo lamento, se que fue por mi maldita culpa, no debiste irte así.-

- ¿Y qué querías que hiciera? Si me negaste frente a ella cuando habías dicho que lo nuestro ya no lo ocultarias... o no será que tienes algo con esa mujer?.- dije enojada.

- ¿Que?, por supuesto que no, de donde sacas eso?.-

- No lo sé, todo me parece muy claro, el día que te mire con ella estaban muy juntos y ayer me presentaste a ella como una simple alumna, no es sospechoso?.-

- Escucha.- se acercó a mi.- No es nada de lo que tu crees, fui un idiota, no se que me paso y simplemente no dije la verdad.-

- Me queda claro que te doy pena, te mereces algo mejor y claro esta... que yo no lo soy.- mis ojos se llenaron de lágrimas.

- No digas eso, eres completamente todo lo que necesito para estar bien.- acarició mi rostro.

- Tus acciones demuestran lo contrario a tus palabras.- me aleje.

- No quería lastimarte, princesa.- intento abrazarme.

- Que tal si lo hubieras querido.- de nuevo le di la espalda.

- Te juro que entre Leticia y yo no hay nada, que no sea amistad y asuntos relacionados con la empresa de ella y la mía.-

- ¿Y por eso tenías que negarme ante ella?.-

- Ya te dije que fui un idiota.-

- Todo para mí es muy claro o por qué la otra vez también ocultaste que irías a comer con ella inventando que tenias mucho trabajo.-

- Ya te expliqué.-

- Pues no te creo nada y no hay nada más de que hablar.- camine hacia la puerta pero me detuvo.

- Tu no te vas de aquí, hasta que arreglemos las cosas.-

Entonces mi telefono comenzó a sonar; era Richard, entonces Joel me lo quitó de las manos.

- Dame mi teléfono.- dije tratando de quitárselo.- Debo irme, me están esperando.-

- No te daré nada, además tu te vienes conmigo.-

Entonces la puerta se abrio, sorprendiéndonos a los dos; era Frida, entonces de ese modo aproveche para quitarle mi teléfono a Joel de las manos.

- Por primera vez, algo haces bien.- dije saliendo y empujando a Frida.

Narrador Omnisciente.

- ¡Juliana, Juliana!.- Joel alzo la voz y trató de ir atrás de ella.

- Esto no es correcto en un profesor.- menciono Frida deteniendolo, evitando que fuera detrás de Juliana.