EL ELEGIDO... O NO. (En Revisión)

TORNEO 5ª PARTE

Los siguientes adversarios fueron vencidos algo mas rápido.

El primero de ellos fue un elfo, que llevaba una armadura de cuero tachonado con escamas de metal, que portaba dos espadas cortas, con la habilidad de aumentar su velocidad de ataque de un modo endiablado durante un breve periodo de tiempo, tan pronto sonó el gong, se abalanzo sobre mi ,pero lo estaba esperando, usé un SALTAR  para alzarme seis metros sobre él y antes de caer, un LEVITAR, luego lance varios rayos del escudo que aunque no le hicieron apenas daño, ya que esquivo la mayoría, consiguieron frenarlo, luego use un CAER para no sufrir ningún daño después de unos minutos, volvió a atacarme, pero esta vez mas lentamente, inmole la espada en electricidad y con unos cuantos golpes cayó al suelo con varios cortes en los brazos y en el pecho.

Al día siguiente volví al campo de combates, solo quedábamos cuatro y si vencía, la final se celebraría en el coliseo, una especie de circo romano cerca del castillo del rey, tan cerca que uno de los palcos estaba situado en el castillo.

Mi siguiente adversario resulto ser un humano de poco mas de veinte años, que llevaba también una armadura de cuero negro, pero que iba armado con una simple daga, lo MIRE y entendí por que sonreía de forma maliciosa, apenas tenia un 50 en ataque con arma, pero un 150 en proyectil mágico.

Tan pronto sonó el gong comenzó a lanzarme rayo de fuego tras rayo de fuego de forma seguida y pronto el viento producido por los rayos me cubrieron de forma que no veía donde apuntaba y si no los bloqueaba el escudo no podría absorberlos, pero de repente el escudo aumento su tamaño!

Se había desbloqueado otra habilidad y el escudo creció hasta convertirse en un ESCUDO TORREÓN, rectangular y casi tan alto como yo y mientras la tormenta de rayos arreciaba a mi alrededor yo me agache y deje que me atacara mientras que el escudo los iba absorbiendo sin que mi adversario se diera cuenta.

De repente escuche una voz en mi cabeza que me hizo sonreír:

NUEVA HABILIDAD DEL ESCUDO DESBLOQUEADA:ESCUDO TORREÓN,  EL ESCUDO CRECE PARA CUBRIR EL CUERPO DEL PORTADOR.

El escudo creció y cambio de forma, siendo rectangular y me agache detrás de él mientras que a mi alrededor se formaba una nube de polvo que impedía la visión, pero aun así seguía lanzando rayos de fuego hasta que arrecio y se asentó el polvo, al otro lado del campo el mago guerrero me miraba con una sonrisa, convencido de que su enemigo estaría muy malherido, pero sus ojos se abrieron de par en par cuando me vio, haciendo que mi escudo volviera a su tamaño normal y caminando lentamente hacia él.

De repente, se dio la vuelta y salio corriendo, hasta que salio del terreno de combate y no paro hasta que se perdió de vista entre la multitud.

después de eso me dieron como ganador y me informaron que la final seria dentro de dos días en el circo que había en el centro de la ciudad, cerca del castillo real, tan cerca que el palco del rey estaba tallado en la pared del circo, esos dos días me fueron de gran utilidad ya que debía comprar aun algunos recursos para el año que pasaría en el sótano y que me había costado todo el oro que tenia, aunque según se me dijo, simplemente por llegar a la final ya tenia ganadas veinte monedas de oro y algunas cosas mas, pero que en el caso de ganar serian cincuenta monedas de oro y un objeto "especial" aunque como el torneo era para niveles menores, no se esperaba que el premio fuera muy grande.

La paladín se había ido con su grupo, no había podido hablar con ella y al parecer el enano no quería que tuviera la oportunidad de hacerlo siquiera,ya la encontraría mas adelante, así que fui al herrero y pedí varias cosas mas, incluso gaste parte de las veinte que aun no tenia, fui al gremio de magos para pedir los libros de magia mas allá de nivel 10 y me dejaron copiar hasta nivel 20, justo lo que necesitaba, pero hasta que yo no fuera nivel 10 no podrían siquiera estudiarlos, pero si iba a estar un año entrenando esperaba por lo menos ese nivel como mínimo, aunque a cambio debería hacer una misión para ellos.

Llego el día de la final y me acerque al coliseo, era simplemente grandioso y dentro cabía casi la mitad de la gente de la ciudad, lo cual me agobio bastante, sinceramente nunca me habían gustado las grandes aglomeraciones y tenia claro que una vez pasara todo me iba a ir a una ciudad mas pequeña.

Una vez allí Skan se me acerco visiblemente asustado y me dijo que mi adversario era el que lo había derrotado a él, debía tener mucho cuidado ya que por lo que había escuchado el que mas había durado había sido el gigante, era extremadamente rápido y fuerte e incluso decían que podía volar.

Entre en el coliseo y me abrumó el ver la cantidad de gente que allí había, al menos en la mayoría de los asientos, en la parte del castillo los asientos estaban casi vacíos: solo habían soldados: unos doscientos de nivel 3; cerca de veinte de 5 y unos pocos de 8, además de una docena de magos de nivel 10 cerca del borde del campo de combate y en el palco real, un hombre que portaba una túnica negra al que no me atreví a MIRAR y detrás de el un soldado de nivel 15 que pareció mirarme y señalarme después de decírselo a su Señor, él cual solo asintió en silencio, me di la vuelta y entonces vi a mi enemigo apenas a unos pocos metros de mi.

Desde esa distancia podía notar el poder que desprendía y lo MIRE

NOMBRE: JESNNAE.          RAZA: N/A                EDAD: N/A               PROFESION: N/A                                      RESTO DE DATOS N/A

Esto no era normal, nunca había fallado, incluso había servido para el guardia de nivel 15 y si con esta tipo había fallado eso significaba que era mucho mas poderoso que yo.

-No te lo puedes ni imaginar -murmuro mi adversario-, aun no has llegado a comprender la grandeza de este mundo, pero ya lo harás.

Al parecer había escuchado mis pensamientos, ¿Quién demonios es este tío y como ha impedido que lo MIRADA? esto no era normal.

-Desde luego que no es normal -murmuro mi adversario-, y te digo que tienes razón en una de las cosas que has dicho, pero sobre todo y lo mas importante.... no soy un tío.

En ese momento trague de forma ostensible y mire a mi alrededor, buscando un modo de escapar: los demonios me habían encontrado antes de tiempo y no estaba preparado ni de lejos para enfrentarme a algo así, pero no tenia mas remedio que hacerlo así que aferre con fuerza el escudo y me prepare para que me diera la paliza de mi vida.

Tan pronto sonó el gong esperaba que me atacara con furia, pero no lo hizo, simplemente se quedo delante de mi, apenas a una decena de metros, esperando a ver que hacia yo y eso hice atacar, pero no en cuerpo a cuerpo, active el escudo y lance todos los rayos que tenia guardados que eran cerca de un centenar.

A su alrededor se comenzó a formar una espesa nube de polvo y humo a medida que los rayos de luz y fuego le golpeaban una y otra vez, otra cosa no, pero había practicado puntería con los rayos y sabia que le estaban dando, aunque no sabia el daño que estaba haciéndole, esperaba que mucho, pero cuando el escudo vació todo su contenido y la nube de polvo se asentó, el demonio, perdón: la diablesa, estaba intacta, de pie y simplemente con los brazos cruzados y cierto tono de desdén en su boca, a mi alrededor escuchaba murmullos de asombro de la gente e incluso como los soldados se ponían tensos, como si no se creyeran todo lo que había pasado, si tenia que ser sincero, yo tampoco.

-¿Eso es todo lo que puedes hacer? -preguntó con una sonrisa socarrona