EL ELEGIDO... O NO. (En Revisión)

¿Ahora quien es un despojo?

En el momento en el que iba a clavarle la espada, está se desvió sola y se incrustó en el suelo, apenas a unos centímetros de su cuello.

-Lo sabía -se rio el elfo con una mirada sardonica-, no tienes el valor para matarme.

Le pegue un puñetazo con el guantelete de metal con tanta fuerza que hizo volar por los aires varios de sus dientes y apreté con fuerza la espada, pero una voz en mi cabeza me hizo recapacitar.

-No deberías hacerlo, si lo matas te pondrás a su altura y no es algo que Jesnnae o que Iskendar querían que hicieran, ni siquiera por ellos.

Eso era cierto, el archimago había muerto por qué creía que yo era bueno, si mataba al elfo no sería mejor que él, sin embargo, podía hacer otras cosas y después de envainar a EJ al prometerle que no lo mataría, saqué la daga de la elfa, lo cuál hizo que abriera mucho los ojos.

-¿Ahora te acuerdas de mí?, está daga me la dió la elfa y a menos que me digas lo que quiero saber iré cortando cosas suplerfuas de tu cuerpo.

-No tienes lo que hay que tener para eso, Ade...Aaaaaaaaaah!!!

No estaba para aguantar sus tonterías, así que le corté la parte superior de una de sus orejas tan pronto acabó de hablar y luego para evitar que sangrara demasiado, use mi antorcha para cauterizar la herida, solo que durante el proceso quemé parte de su larga melena dejándolo calvo por un lado mientras que un olor nauseabundo, como a pelo de perro quemado, hacia el ambiente altamente desagradable.

-Esto es solo para empezar, así que mejor me digas lo que quiero saber o seguiré cortando cosas que sobresalgan demasiado.

Hizo el gesto de intentar lanzarme un escupitajo, pero antes de que pudiera hacerlo le corté la otra oreja, convirtiendole en un humano, pero no empecé a cauterizarla enseguida, ya que en esa zona habían numerosas venas y se estaba desangrando lentamente.

-¡Hablaré, pero cierra la herida!

Cuando le corté la hemorragia a las bravas y dejándolo casi calvo debido al fuego, me contó que él y la elfa eran hermanos y que después de que su otro hermano, el menor de los tres, fuera elegido por Iskendar y muriera por culpa del archimago, se quedaron angustiados ya que sus padres le habían encomendado su cuidado y cuándo murió, murieron de la pena, ya que tenían muchas esperanzas puestas en el muchacho y los dos hermanos se quedaron aturdidos e incapaces de superarlo, ademas Iskendar no les hizo el caso que ellos creían que debería haberles hecho.

Una noche recibieron una visita que les explicó que sí existía la forma de poder recuperarlo, uniéndose a Balthasar y que él tenía el poder sobre la vida y la muerte.

Ellos aceptaron sin reservas, ya que lo habían probado todo y estaban dispuestos a cualquier cosa por resucitarlos, tanto a su hermano pequeño como a sus padres.

Después de eso, reclutaron a más elfos descontentos con el consejo, para poner en marcha las órdenes que habían recibido del ser que los había reclutado a ellos.

Yo le pregunté que qué tipo de demonio era el que los había reclutado, pero el elfo se rió y me dijo que no había sido un demonio, había sido un Aviano, vió como se alejaba volando y subió a una pequeña Torre voladora que era como ellos se desplazaban mucho más rápido que con sus castillo o alas.

Estaba realmente enfadado, ¿Había alguna raza que no quisiera matarme?

Miré al elfo, ya sabía todo lo que quería saber, pero prometí que no lo mataría, así que cogí la daga y con un corte rápido lo convertí en una humana y después cauterice la herida a fondo para que no sufriera, en realidad quemé la zona a conciencia para que ni siquiera una regeneración completa hiciera que creciera algo nuevo en sus partes bajas, pero cuando empezó a gritar como una niña, le pegue un puñetazo y lo dejé inconsciente