La tormenta arreciaba con fuerza mientras que la lluvia tintineaba en mi armadura y la verdad es que no tenía claro hacía dónde ir, desde la plaza en la que me encontraba salían cuatro calles de unos doce metros de ancho y no sabía por cual de ellas ir, podría haber enviado algún constructor a investigar, pero solo me quedaban siete peones y no sabía si más adelante me harían falta, además no dejaban de sobrevolarme varias manticoras y sabía que cuando menos me lo esperara, me atacarían y no me apetecia enfrentarme a ellas, tenía activadas múltiples PIELES DE PIEDRA, pero no sabía si frenarían sus enormes púas.
Decidí aventurarme por una de las callejas y por si acaso, decidí lanzarme una INVISIBILIDAD MEJORADA que me hacia invisible a la visión normal y a la infravision y me acerque a investigar, pero el corredor apenas media poco más de cincuenta metros de largo y daba a otra plaza similar en la que había estado, aunque en el interior solo había una enorme masa de agua, como un lago, pero de él veía salir un gigantesco tentáculo como los del Kraken.
Estaba harto de todo esto, así que simplemente lancé una TORMENTA DE RELÁMPAGOS y freí al Kraken, pero cuando su cuerpo estaba comenzando en flotar en el agua, escuché unas carcajadas atronadoras en el cielo y de repente una luz azul me envolvió y me teletransportó a la plaza principal.
En ese momento percibí un movimiento extraño en el cielo y al girarme a mirar ví tres púas de la cola de una manticora que se dirigían hacia mí a toda velocidad y tuve que saltar hacia atrás para esquivarlas mientras lanzaba un TELEQUINESIS para desviarlas lo justo para que no me dejarán como un colador.
Desenvaine la espada y lancé un relámpago que, aunque impactó en la manticora, apenas si le hizo daño.
Después de eso, me volvió a lanzar tres púas, dos de las cuales desvíe con TELEQUINESIS, pero la tercera impactó en mi escudo y se quedó incrustada en él, algo que no había pasado nunca y decidí ir a las bravas antes de que una de sus púas me atravesara, así que en el momento en el monstruo pasó por debajo de mí, usé un SALTAR y me dirigí en línea recta hacia él con la espada preparada e incluso sonreí al escuchar gritar a EJ de emoción.
La manticora solo pudo girar un poco su cuerpo antes de que mi ataque la alcanzará y en vez de cortarle en cuello, le cercene una ala y mientras la bestia se estrellaba en el suelo con un fuerte golpe yo usé un CAER para aterrizar sin ningún rasguño.
La bestia parecía aturdida por el impacto, pero yo no las tenía todas conmigo así que decidí esperar mientras no dejaba de mirar al resto de manticoras por si acaso alguna de ellas me atacaba, aunque ninguna se movió de su posición, todas estaban al parecer mirando con atención el combate en el que yo me estaba enfrentando a una de sus compañeras.
En el momento en el que yo fui atacar al monstruo, éste me miró con su cara humana, una cara que me observaba con odio, furia y depravación.
De repente, su gesto se convirtió en una sonrisa maliciosa y rugió con fuerza atronadora, parecía el rugido de un león y cuando me alcanzó ese rugido, me hizo volar con los aires, ya que ese rugido llevaba consigo un hechizo de IMPACTO que me hizo volar durante diez metros y aunque caí con un sonoro golpe debido al metal de mi armadura, esta evito que yo sufriera grande daños.
La manticora se arrojó sobre mí, abriendo su enorme boca e intentando comerme entero, pero antes de que pudiera hacerlo, metí mi mano en su boca y clavé con fuerza mi espada en su paladar, dejandola clavada y usando un SALTAR hacia atrás, la bestia cerró la boca instintivamente esperando acabar con mi vida, pero en vez de eso, hizo que la espada se clavará hasta el fondo del paladar llegando a su cerebro y matándola instantáneamente.
Después de eso me senté en el suelo, ya que había sido una lucha corta, pero intensa, estaba agotado, la mantícora había desaparecido como habian acabando haciéndolo todas criaturas de esta torre y a unos metros de mí estaba EJ en el suelo farfullando y gritando maldiciones por haberle hecho eso, que si yo no sabía que iban a desaparecer, que si no hubiera conseguido matado y hubiera salido volando lo hubiera perdido etc etc.... desvaríos que ha veces me desquiciaban.
A veces estaba contento de tener alguien con quién hablar, pero había otras que me encantaría poder callarle la boca para siempre.
Me levanté muy despacio, la recogí y ya puse en su funda, después de eso me volví a lanzar la INVISIBILIDAD MEJORADA y esta vez antes de meter la pata miré las cuatro salidas de la plaza por si acaso había alguna diferencia, pero lo que me llamó la atención es que cada salida daba a una criatura a la cual me había enfrentado antes, dónde estaba el Kraken la vez anterior seguía estando el Kraken, en otra la hidra, el minotauro y el jabalí de arimanto, estuve unos minutos sin saber que hacer pensando en que pasó debería dar, incluso los mire y me di cuenta que todos eran de nivel 50 mientras que yo ya había llegado al nivel 60, aunque no fueran tan poderosos como yo estaba convencido de que debía enfrentarme a ellos de una forma concreta o si no tendría que volver a enfrentarme a las manticoras y no me hacían ninguna maldita la gracia.
Pero entonces recordé que mi primer desafío en esta Torre había sido el jabalí de Arimanto así que decidí enfrentarme a él y aunque era mucho más grande que yo, sus habilidades de combate no estaban a la altura de a mía.
Después de vencerlo yo esperaba algo: un sonido, una musiquita, algo que indica que había tenido razón, pero tal cosa no sucedió y decidí avanzar hasta el siguiente monstruo.
La verdad es que eran fáciles de vencer debido a la diferencia de niveles, aunque habían algunos a los que no quería enfrentarme y uno de ellos era Polifemo, pero no era el mismo al que yo me había enfrentado, físicamente si que lo era, pero sus ojos eran completamente blancos y por mucho que yo intenté hablar con él, no soltó ni una sola palabra, así que acabé con él lo más rápidamente que pude para irme de allí lo más pronto posible.
Fui acabando con todos siguiendo el orden y por fin pude ver al que no me había enfrentado mientras llegaba allí y descubrí que era humano, algo que no comprendí hasta que lo MIRÉ y si hubiera podido mandar a la mierda a la Torre y a este mundo lo haría, mi adversario real, el que se había suicidado para que yo pudiera seguir subiendo en la Torre era el mayor guerrero que la antigua Grecia había dado y seguramente en su piso tendría a sus mejores hombres, a sus trescientos espartanos.
Leónidas no hizo ningún movimiento cuando me acerqué a él, pero paro mi espadazo como si nada, el era nivel 50 también, pero sus habilidades eran mejores que las mías, al menos las defensivas, pero mis hechizos hicieron la diferencia, pero no me causó alegría la victoria, cada vez tenía más ganas de salir de allí y ver a la gente que había conocido aquí, nunca diría esto, pero echaba de menos a Alan, pero también a Bowie y, aunque no lo reconocería, echaba mucho de menos a Gloria.
Fui derrotando uno a uno a todos mis adversarios sin usar a los constructors, pero con todos los hechizos a mi alcance hasta que después de derrotar al último de ellos me ví teletransportado de nuevo a una explanada gigantesca en la que, en kilómetros alrededor, no crecía nada.
De repente, escuché un aleteo en el cielo, pero la criatura que lo producía estaba a cientos de metros de distancia de mi, pero su forma era extraña y cuando se acercó un poco más ví lo que era y supe quién era y solo pude suspirar con resignación, ya que la criatura que se aproximaba había derrotado incluso al poderoso Zeus.
La parte inferior de su torso, dónde deberían estar sus piernas eran dos colas de serpiente inmensas, su parte superior era humana, pero su boca estaba llena de colmillos y dientes triangulares como los de un tiburón y dos ascuas rojas brillaban en sus ojos, su pelo eran serpientes como los de medusa y dos enormes alas de murciélago surgian de su espalda.
Su tamaño era gigantesco, uno solo de sus dedos era de mi tamaño, mientras que su cuerpo superaba con creces los sesenta metros de altura y pude ver su sonrisa triunfal mientras aterrizaba despacio, a unos doscientos metros de mí.
TIFÓN, padre de los monstruos y destructor de dioses había llegado.
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EL ELEGIDO... O NO. (En Revisión)
FantasyDespués de salvar a un muchacho de ser atropellado por un camión y morir en su lugar, soy transportado a un mundo de fantasía, donde descubro que el muchacho había sido elegido para salvar a ese mundo y que debía morir en la Tierra para poder ir all...