Capítulo 75: Una batalla difícil

2.4K 268 19
                                    

Los Zetsus y revividos no paraban de venir. Había luchado ya unas cuantas horas seguidas sin descanso alguno. Aunque por el momento no era la batalla más larga que había tenido. La batalla más larga había sido contra Red, unas 15 horas de pura masacre. El no tenía comparación.

Los Zetsus caían fácil. Los más complicados eran los revividos. Con esos tenía que usar el Amaterasu si o si para matarlos. Lo bueno era que ya habían aprendido a sellar a los revividos. Eso me hacía las cosas más fáciles. Pero aún así yo tenía que seguir usando el Amaterasu para acabarlo a los que yo enfrentaba.

Mire mi espada. ¿Sería posible?

-Espada de Kagutsuchi (加具土命の剣, Kagutsuchi no Tsurugi) -mi espada fue cubierta por un manto de llama de color negro.

-¡O si! Esto es interesante. -ahora acababa con los revividos con mucha más facilidad. Cuando les daba un tajo con mi espada, los revividos eran consumidos por las llamas. No quedaba nada de ellos una ves que los cortaba.

Los revividos y Zetsus no paraban de venir. Después de un tiempo, Kurotsuchi había vuelto a luchar. Se veía más tranquila y descansada que antes. Tenía las energías renovadas.

De un momento a otro. Una gran has de lus se formó en el horizonte, no sabía que era. Sólo que había sido un gran Jutsu de nivel colosal.

Fue un jutsu de lo más grande que había visto. Me había quedado shockeado con tal demostracion de poder.

Después de unos segundos me recompuse y seguí luchando contra los revividos.

Ya se estaba atardeciendo. Estaba algo cansado ya. No había parado de luchar en más de ocho horas. Si bien podía luchar mas tiempo, mucho más. Me acabaría cansando y me desmayaria, no sería la primera vez.

¡Zas! Acababa de cortarle la cabeza a un revivido que luego se consumió en llamas. Todas las personas estaban luchando sin descanso, la mayoría de las personas ya se veían cansadas. Todos habíamos estado luchando desde temprano.

A unos setenta metros, vi aún revivido bastante peculiar, a Dan. El ex se Tsunade, el estaba luchando contra unos ninjas. Estaba por unirme a la lucha contra Dan. Pero sucedió algo que me marcaría.

-Sasuke. -escuche una suave voz atrás mío. Me giró con gran temor hacia atrás. Su cabellos negro, sus ojos cafés, su chaleco negro con rojo, sus pantalones negros. Y su casual gorro blanco. Era el....

-Rubí. -dije con la voz entre cortada. Pero las cosas no acababan ahí. Detrás de el se encontraba una mujer de lo más peligrosa-. Konan. -dije en un susurro.

Delante mío de encontraba el chico que mejor me había tratado, alguien que me mostró lo que era un hogar. No sabía que haría, no quería hacerle daño por más revivido que fuera. Y a su lado de encontraba una mujer alada que era bastante peligrosa.

-Es bueno verte, aunque las circunstancias no sean del todo favorable. -menciono Rubí con clara tristeza en sus palabras.

-S..Sapphire, falta casa vez menos para que de a luz. Ella está muy sana. Yellow dice que todo va bien y tendrá un parto de lo mejor. -le comenté con los ojos cristalinos. Antes de esto, nunca había visto a un revivido llorar. Pues a Rubí le caían unas cuantas lágrimas.

-Por favor, Sasuke. Protege a mi Sap, y a mi futuro hijo.

-Sera una niña. -el me miro por unos momentos. Parecía estar sonriendo.

-Ojala que no te maté. -dijo divertido.

-Disculpa. Pero no me puedo contener más. -dijo con clara tristeza. Apenas terminó de decirlo. Konan mando muchos shuriken de papel hacia mi. Era muy rápidos. Trate de verles a los ojos. Pero Rubí tenía los ojos cerrados, luego saco algo de su chaleco... Se había puesto unos lentes negros.

Yo soy.....SasukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora