Ardiente Deseo I [+18]

Capítulo 44

Noticias desagradables

Ha pasado tres semana desde que no he querido saber nada más de James. Recibía muchas llamadas suyas y mensajes pidiéndome que habláramos pero no respondía a ninguna, incluso me buscó en el apartamento de las chicas más de una vez. Una de ellas tuve que enfrentarlo.

Flashback

Estoy en la cama tumbada abrazando a mi almohada, cada día que pasa debería sentirme algo mejor pero no, parece que me derrumbo por segundos cada vez más, ¿cómo un hombre que he conocido en escasos meses ha podido calarme tanto? En fin.

Lorena no me ha llamado para trabajar por lo que empiezo a preocuparme y reconsiderar si debería de conseguir otro trabajo. Tampoco he visto a Rodrigo e Inna está histérica porque pensaba que al hacerse una cuenta en la página de citas con su verdadera identidad la aceptaría, pero lleva esperando dos semanas y todavía nada. Es raro porque Rodrigo me dijo que estaba interesado en ella, también en mí pero creo que captó bien que yo no quería nada con él.

Lizy y Erick han tenido alguna que otra cita más y en todas viene ella muy contenta diciendo que se han divertido acompañado de besos, todavía no han llegado al paso del sexo, cosa que agradezco porque es demasiado pronto para ello y no quiero que Lizy sufra.

Abren mi puerta interrumpiendo mis pensamientos. Veo el rostro descompuesto de Inna y me levanto alarmada.

—¿Qué ocurre? —pregunto rápidamente mientras me levanto de la cama para ponerme enfrente de ella.

—James está otra vez aquí pero ha conseguido entrar y quiere verte sí o sí. No se va a ir hasta que te vea —dice ella susurrando.

—Maldita sea —suspiro llevando mis manos a la frente echan hacia detrás mi pelo—. ¿Qué mierda quiere? No quiero saber nada más de él.

—¿Llamo a la policía? —pregunta.

—Es una opción pero voy a intentar que se vaya pacíficamente —ella asiente y yo estoy decidida a salir de mi cueva después de dos semanas y volver a verlo.

Al pasar la puerta lo veo de pie mirando una foto de las chicas y yo, está bastante concentrado. Su aspecto es el mismo que siempre solo que en su rostro se ve cansancio y pesadez. Cuando se gira a verme me recorre por la espina dorsal un escalofrío que me paraliza. Su ojos tienen enormes ojeras, apenas tiene que estar durmiendo. Claro, la boda lo tendrá ocupado. Decido ser la primera en hablar.

—¿Qué quieres? —pregunto seria y borde.

—A ti —No te dejes llevar por sus palabras falsas.

—Qué pena, yo a ti no —le doy una sonrisa vacía.

—Tenemos que hablar —intenta acercarse pero levanto la palma de mi mano y entonces se queda quieto tensando la mandíbula.

—Solo dime, ¿Carol y tú habéis estado juntos mientras estabas conmigo? —James gruñe.

—Sí... —susurra. Aush...

—¿Has tenido relaciones sexuales a la vez que yo? —James me mira a los ojos y no dice nada. Por favor di algo, di que no al menos ese dolor me lo quitas.

—Ella y yo —no le dejo hablar.

—Vete de aquí, no quiero escuchar tus palabras vacías. Que tengas un buen matrimonio con Carol —me doy la vuelta hacia mi habitación. James grita mi nombre pero no le hago caso.

—Es mejor que te vayas James sino tendré que llamar a la policía —dice Inna mientras cierro mi puerta y se quedan ellos dos solos en el salón.