Número desconocido
Pasaron horas desde que Aaron se cruzó por primera vez en mi vida. No voy a mentir cuando digo que he estado buscándolo con la mirada parte de la noche, es atractivo y además creo que tiene mi mismo sentido del humor. Sinceramente no quiero tener pareja y mucho menos rollos de una noche o dos. Tampoco sé del sexo y no quiero entregarme a cualquiera. Creo que ya he aprendido suficiente con perder la virginidad con James.
¿Me arrepiento? Extrañamente no, creo que debería, pero aun así no me sale el arrepentimiento porque lo disfruté tantísimo, aunque fuese un juguete, su juguete. Creo que nadie podría haberme quitado la virginidad tan bien como él.
—Alexa —miro hacia Inna—, aunque no lo quieras admitir, se nota que has estado buscando al chico que te encontraste en la barra del pub.
—¿Me estabais vigilando? Sin vergüenzas... —las miro mal—. Le dije que era noche de chicas, por eso lo dejé. Es bastante mono, pero no quiero novios ni rollos, creo que lo sabéis de sobra.
—Algún día darás la oportunidad de que un chico entre en tu vida de verdad, serás feliz y se te borrará de la mente las tonterías no tener relaciones porque quieres que tu vida se centre en conseguir dinero y mantenerte tu sola e independiente —Inna se acerca a mí después de terminar de hablar y me da un beso en la mejilla—. Está detrás esperando... —me susurra. Miro hacia atrás disimuladamente pero aun así se da cuenta de que lo estoy mirando y le doy una sonrisa tímida.
—Nosotras podemos esperar un ratito por aquí cerca... —dice Lizy.
—De acuerdo... —les doy una sonrisa amplia—. Ahora vuelvo.
Camino hacia Aaron. Estoy algo nerviosa porque creí que no me buscaría, estoy orgullosa de mi persona en este momento. No es que me considero una chicas extravagantemente sexy o hermosa, pero sí soy algo atractiva.
—Hola —dice casi en un suspiro Aaron.
—Hola. Me has buscado.
—No dejaría pasar una petición de una chica tan hermosa como tú —me da un beso en la mejilla—. Entonces... ¿ya pasó la noche de chicas?
—Realmente no, pero tengo unas buenas amigas que me han dejado un poco de tiempo para poder decirte algo... —Levanta su ceja derecha para demostrar su curiosidad.
—Dime, ¿qué quieres decirme?
—Mmm, tal vez mi número de teléfono, claro, si quieres.
—Me gustaría muchísimo —Aaron está riendo, creo que está muy contenta de que le esté dando atención y aceptando conocernos. A mí también me pone contenta de una forma u otra.
—Bueno entonces saca tu móvil que te escribo el número —él hace caso de inmediato y me pasa su teléfono. Con rapidez apunto los dígitos y lo guardo en su agenda de contactos.
—Hablamos por WhatsApp, ¿no? —asiento mientras voy dando unos pasos hacia atrás y me despido con una sonrisa en los labios. Me giro para ver a las chicas que, como no, están observando con detenimiento todo lo que hemos hecho o hablado. Aunque creo que por la distancia que teníamos no habrán escuchado mucho, pero sí tienen que estar imaginando lo que ha pasado.
—Está cañón, ¿cómo se llama? —pregunta Inna.
—Sí, es muy guapo. Y se llama Aaron.
—Oh, el nombre no me gusta tanto —dice Lizy riéndose.
—No te tiene que gustar a ti sino a ella, idiota —dice Inna mientras le da un golpe flojo en la cabeza a Lizy.
—Bueno chicas, vayamos a casa que tenemos que dormir.
[...]
Me duele la cabeza. No soporto el sonido que está emitiendo mi móvil sin cesar. Intento abrir los ojos, duele bastante con la luz del sol. Parece que todavía es temprano para despertarse después de una noche de alcohol y baile salvaje. Con todo el esfuerzo que puedo hacer cojo el maldito cacharro y miro la pantalla. Son mensajes de WhatsApp. Muchos al parecer. Los abro y me encuentro un número desconocido, maldito Aaron.
"Eres tan hermosa, ¿ya me has olvidado?" El mensaje me deja confundida, pero sigo leyendo.
"Me dijeron que estuviste hablando con un chico ayer por la noche". ¿Cómo? No jodas.
"Aaron, ¿no? Parece bastante formal. Claro, de puertas hacia fuera. ¿Sabes realmente quién es?". No puede ser. Es James, estoy un noventa y nueve por ciento de que es él.
"¿Sabes una cosa? Me da igual". ¿Qué? Entonces para qué coño me escribe todos estos mensajes. Pero pensándolo mejor, ¿me está espiando? Veo que empieza a escribir de nuevo.
"Eres mía, pequeña". No. ¡No!
—¡Me cago en todo! —Lo peor es que es capaz de incluso estando en este punto, después de más de dos mese sin estar juntos, en excitarme. Odio sentirme todavía tan atraída hacia él, pero debo dejarle las cosas claras, así que cojo de nuevo el móvil y marco su número para llamarlo. Me hace esperar hasta tal punto que empiezo a desesperarme. Le vuelvo a llamar cuando me sale su contestador. El capullo sigue en línea por WhatsApp.
—Dime, Alexa —su voz es calmada. Seguro que el muy capullo tiene que estar celebrando en su mente una victoria porque yo lo estoy llamando.
—James, te sugiero que no me mandes mensajes, no me llames y mucho menos ¡me espíes! ¿Estás loco o qué coño te pasa? Tú y yo nunca tuvimos que conocernos, eres un maldito capullo. Siento mucho todo lo que ha ocurrido recientemente con tu madre, porque yo también la amaba, pero aparte de eso no tenemos nada más en común y no quiero volver a saber más de ti, así que haz el favor de dejarme en paz o tendré que recurrir a una demanda por acoso —le dejo las cosas claras y sin dejar que él me responda le cuelgo. Sienta tan bien haberse desquitado un poco con él después de estar resacosa.
Voy directa al móvil para bloquearlo en la red social y así asegurarme de que no pueda enviarme más mensajes. Veo que está escribiendo pero que después lo deja y su foto de perfil de un paisaje deja de salirme. Un momento, ¿el capullo me ha bloqueado? ¡Soy yo la que tiene que bloquearlo! Maldito infeliz, es un bipolar.
Mi día no ha podido empezar de una manera mejor. Me tiro toda la mañana limpiando mi habitación y la casa en general menos el cuarto de las chicas, ya que cada una se ocupa de su espacio personal, lo demás sí tenemos que hacerlo entre todas. Hoy estoy decida a buscar casas de alquiler baratas y que sean acogedoras.
En realidad, me emociona la idea de vivir sola en mi pequeña casita y, además recogerme algún amiguito para que me haga compañía. Lo que no sé es si pillarme un gatito o un perrito.
¿Gato o perro? Esa va a ser mi cuestión del día.
26/07/2020
¡Buenas a todxs!☺
Espero que os guste muchísimo este capítulo que madre mía el tiempo que ha tenido para que se sube.😅Gracias por todo.😍
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Ardiente Deseo I [+18]
Romance¿Será buena idea...? Una invitación a una sesión de fotos en un hotel de cinco estrellas puede cambiarte la vida para bien o para mal. ¿Quién iba a saber que el dueño del nuevo hotel iba a ser así? Tan... arrogante, calculador, maniático del contro...