CAPITULO 8.

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Los invitados comenzaban a llenar el salón, la música invadía todo el lugar y los meseros caminaban de un lado a otro repartiendo copas de fino champagne, sus asesores la saludaban cuando la veían y a la vez se detenía a conversar con los directores de la empresa mientras caminaba entre los invitados, agradeció enormemente que sus amigas la acompañaran, fue idea de Vanessa invitar a sus compañeras quienes se encontraban en una esquina del salón observando todo boquiabiertas.

-Ya se está llenando- decía captando la atención de sus amigas.

-Esto es increíble- escucho a Claudia -Y que vistas- la vio guiñarle un ojo a uno de los empleados -Sera una noche muy interesante, pueda que encuentre a mi futuro esposo rico- bromeaba.

-Hablando de ricos- interrumpía Diana - ¿Dónde está tu novia? -

-Me escribió hace diez minutos que venía en camino- revisaba la pantalla de su móvil para revisar si tenía mensajes nuevos.

-Te ves muy bonita Aida- Daniela le acomodaba un mechón de cabello detrás de la oreja -Los rizos te quedan muy bien-

-Gracias- respondía -Tu también te ves bonita, no sabía que tenías tatuajes- sonreía.

-Buenas noches- la voz de Helena se escuchaba por todo el salón al mismo tiempo que la música disminuía y todas las miradas enfocaban a la hermosa mujer en la tarima, tuvo que parpadear un par de veces para admirar a su novia, su cabello estaba acomodado a un lado de su hombro y caía elegantemente por su brazo, el vestido azul marino se ajustaba a la perfección a su silueta, el enorme tatuaje en su brazo izquierdo la hacían ver mucho más hermosa -Es un placer para mi darle la bienvenida a cada uno de ustedes a esta reunión- hablaba con seguridad y ella al igual que el 99% del publico estaba babeando por Helena -Primero quiero agradecer a las personas que hicieron posible que estuviéramos aquí- era imposible apartar la mirada de ella, el maquillaje resaltaba lo perfecto que era su rostro -Como también me gustaría recordar que gracias a los presentes, el sueño de mi abuelo sigue vivo y haremos todo lo posible para mantener su legado intocable, como él siempre decía "con las botas puestas y de cara al sol" sin importar cuanto cueste, felicidades a todos ustedes por hacer esto posible- extendía una copa y todos imitaban el movimiento -Por otro año más celebrando con ustedes- todos los presentes aplaudían y la música volvía a inundar el salón.

-Válgame el ángel- decía Claudia -Creo que una mujerona si me haría dudar de mis preferencias, oye rubia- se giraba para verla - ¿Cómo es en la cama? Se ve que es una fiera-

- ¡Claudia! - gritaba Diana y Daniela al unisonó.

-Lo siento, es que tengo curiosidad lésbica- bromeaba -Nunca he probado la concha ¿y ustedes? -

-Me gustan los dos- respondía Daniela.

-Yo prefiero el bate, eso de no tener que agarrar no mucho- agregaba Diana provocando que la mesa estallara en carcajadas.

- ¡Chicas! - Sentía la mano de Vanessa en su espalda - ¿Cómo la están pasando? ¡Wow! Están todas hermosas- saludaba a todas con un beso en la mejilla -Mi amor- enfocaba a Andrea quien siempre se mostraba serena, ambas lucían hermosas y hacían una linda pareja.

-Buenas noches chicas- saludaba amablemente.

-Hola- saludaban todas al mismo tiempo -Muero de hambre ¿Sabes si servirán pronto la comida? - preguntaba a Vanessa.

-Cariño, te comiste una hamburguesa hace tres horas- vio como acariciaba su rostro con ternura -Vamos a la cocina- decía convencida -Disculpen chicas, regresaremos en un momento-

-Wow- Claudia se quedaba pasmada -No sé si es el alcohol, pero las lesbianas me están calentando- bromeaba - ¿Saben que pueden quedar embarazadas entre ellas verdad? -

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