Nuestro Tiempo

CAPITULO 25.

***4 meses después***

Megan descansaba sobre el pecho varonil de su esposo cada tanto acariciaba su abundante barba mientras trataba de mantener sus pensamientos en orden, los últimos meses fueron de los más difíciles ya que con la llegada de Sasha las cosas estaban un poco extrañas, ya no poseía el mismo acceso que solía tener a documentos e información militar que era de muchísima importancia a la hora de planear el siguiente movimiento de MRLL.

- ¿Qué pasa querida? - alzaba la vista enfocando el rostro de su amado esposo - ¿No puedes dormir? -

-No cariño- se incorporaba lentamente y cubría su cuerpo desnudo con la camisa de su esposo -Me siento estancada-

-Ten paciencia- escuchaba -Ya estás aquí, pronto sabrás que hacer y nosotros actuaremos, no puedes tener el control de todo y lo sabes, estábamos preparados para toda clase de situaciones-

-Pero no para estas- respondía en un susurro -Mi plan no era este, se suponía que a estas alturas Bandek estaría entrenando a mis hombres y ella lideraría mi batallón... Eso no salió bien- con molestia -Necesito pensar en algo más, no puedo quedarme de brazos cruzados y ver que es lo que Spencer planea, pueda que la haya subestimado antes... Al pensar que no tenía la experiencia que Bandek o Vielman, se que no es una asesina como ellas, pero conozco a alguien peligroso cuando lo veo y ella... Siento que va por algo y esta esperando para actuar, tenemos que estar listos para eso y lo peor... Es que no sé cómo prepararme-

-Tranquila querida- sentia los brazos de su esposo rodearla con firmeza -Casi no nos vemos, disfrutemos estas pocas noches juntas... Hace tiempo no te tenía en la cama-

-Tienes razón mi amor- se giraba sacándose la camisa para volver a la cama con su amado Víctor, amaba a ese hombre desde que tenía memoria, en sus brazos no existían preocupaciones, miedos, solo eran ellos dos, los mismos jóvenes de 15 años que se enamoraron.

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Aida terminaba de guardar las ultimas cosas en su closet mientras le daba un ultimo vistazo a su nueva habitación, después de varios meses lograron conseguir un hermoso e inmenso apartamento en las afueras de la ciudad, recordaba las infinitas discusiones que tuvo con Helena porque insistió hasta el cansancio para mudarse juntas y al final ella decidió quedarse siempre con las chicas. Escuchaba como Diana le decía que era una tonta ya que con Helena no le faltaría nada, no tendría que pagar nada, cosa que ella sabía perfectamente, porque a pesar que su novia le prometía que compartirían gastos ella sabía que Helena no permitiría que ella aportara algo, todo el tiempo deseo obtener y lograr cosas por su cuenta, no quería depender de ella y tampoco deseaba ser una carga para Helena. Desde que llego a la ciudad pudo lograr cosas por ella misma y fue algo que la hizo sentir muy bien, deseaba seguir alcanzando cosas que hace años solo pensarlas era imposible.

-Aida, ven a ver como nos quedo la sala de estar- enfocaba a Sandra en la puerta de su habitación, ese era otro detalle que Helena no sabía.

-Ahora voy- respondía animada, para ella también fue sorpresa cuando Diana le informo que Sandra viviría con ellas un tiempo ya que también había perdido todo, el apartamento era muchísimo mas grande que el anterior y tenía habitaciones hasta de sobra. No sabía como se lo tomaría su novia ya que no había tenido tiempo de hablar con Helena debido a que la empresa se estaba mudando a otro edificio y había estado muy ocupada en los últimos días.

- ¡Aida ven a brindar! - se acercaba tomando la delgada copa de champaña que Diana le extendía -Por un nuevo comienzo y por nuestro nuevo hogar-

- ¡Salud! - enfocaba a Daniela y a Claudia super emocionadas. Sandra la observaba con una enorme sonrisa.

-Recuerden que mañana todas tenemos que estar libre para la cena, Vanessa esta emocionada que cocinara tacos para todos- pedía Daniela -Me pidió que se los recordara-