Madison observó cómo Zoom arrastraba a Caitlin lejos de ella. Escuchó su petulante carcajada por todo el lugar.
—¡Caitlin! —gritó mientras intentaba acercarse a su amiga, pero sus pies dejaron de moverse, como si estuvieran pegados contra el suelo.
De pronto, unas luces opacas se encendieron, había espejos por todos lados de diferentes tamaños y formas. Las luces comenzaron a tintinear mientras seguía escuchando la risa de Zoom, mientras seguía escuchando su propia voz gritar el nombre de su amiga. Hasta que la habitación se quedó en silencio.
»¿Caitlin? —susurró, esta vez sí pudo mover los pies, así que comenzó a dar sigilosos pasos hacia el frente.
Los espejos eran tétricos, sus reflejos hacían exactamente lo mismo que ella, hasta que uno en particular no lo hizo. El reflejo que tenía frente a ella tenía una sonrisa, una oscura y llena de malicia.
Madison se tocó el rostro, se observó en los otros espejos y comprobó de que ella ni siquiera estaba sonriendo.
»Basta —susurró. Su reflejo se cruzó de brazos y dejó de sonreír, aunque esta vez clavó sus ojos en los de ella.
—¿Por qué? Sólo te estoy mostrando en lo que te convertirás, en lo que eres —aquel reflejo habló, su voz sonó un poco más grave de lo que era en verdad.
—No soy tú —susurró la niña.
—Madison, Madison —el reflejo soltó una carcajada —Somos uno. Yo soy tú, tú eres yo —canturreó con algo de oscuridad.
—Mientes.
—Zoom tiene razón, querida Madi. Hay algo oscuro en ti. Yo soy esa parte. ¿No lo ves?
—Detente. No es verdad. No es verdad.
De pronto, varias carcajadas se escucharon a la vez.
»¿No lo ves? —volvió a decir su reflejo. Esta vez varias voces repitieron la pregunta, una tras otra como si de algún disco rayado se tratase.
La pequeña se cubrió las orejas y cerró los ojos.
—Basta. Basta. Por favor —pidió en voz alta, hasta que ya no pudo escuchar aquellas terroríficas voces.
Silencio.
Era un silencio casi asfixiante, aterrador.
—Abre los ojos —ordenó aquella oscura voz de Zoom. La niña se sobresaltó de sobremanera, pero, sin que pudiera controlar su propio cuerpo, abrió los ojos.
Y quiso gritar. Pero nada salió de sus resecos labios.
Nuevamente Zoom tenía a Caitlin, la ahorcaba contra la pared mientras que la otra mano de aquel ser se movía con rapidez inhumana.
—No le hagas daño —imploró entre lágrimas. Zoom tenía puesto su oscuro y tétrico traje, pero no tenía su máscara puesta.
—Tómalo como una lección por desafiarme. Debes ver cómo termino con ella. Debes ver cómo le arrebato la vida.
—¡No! —la niña gritó.
—¿No? —una carcajada envolvió el lugar —Oh, entonces, tú quieres hacer los honores. Ya veo —una maliciosa sonrisa se formó en sus labios, y Madison tembló.
—¿Qué?
—Ven aquí —ordenó el villano. Contra la voluntad de la niña sus piernas comenzaron a moverse.
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Innocent Blood [The Flash] Barry Allen / Caitlin Snow
FanfictionLa pequeña metahumana vagaba por las calles de Central City cuando aquel velocista se cruzó en su camino, cuando aquel héroe trató de mostrarle algo diferente a lo que estaba acostumbrada. Para Flash y su equipo no estaba dentro de sus planes cruza...