Damon&Diane

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Meliza

-Meliza espera- me detiene Elena y yo niego en su dirección.

-Si quieres sube al auto pero no quiero seguir aquí-sentención subiendo al auto para encenderlo, ella sube y nos en camino a casa.

-Meliza, seguro que Damon...

-Shhh- la callo- No quiero hablar de él, vale?

-Da acuerdo- acepta no muy contenta- Que tal si hablamos de tus planes para Nueva York.

Aprieto el volante, justo pensaba en poner las cartas sobre la mesa, quería preguntarle a Damon si quería irse conmigo pero con lo que vi, creo que ya se su respuesta.

-Me ire a la Universidad Elena, tengo mi casa propia en Nueva York porque no irme a un lugar donde se me mover y pueda está estable.- le explico- Tu harás lo mismo luego.

Asiente.

Llegamos a la casa, subo para ver a Jenna pero escucho ruido dentro y prefiero no molestar, Elena ve a Jeremy en su habitación, bajo para ir a dormir... Mañana será un mejor día o eso espero.

-Hola- caminaba por el bosque y sentía que alguien me observaba.

Avance hasta ver a Elena con un extraño hombre detrás sujetándola, ladea su cabeza y el hombre la muerda hasta matarla.

-Elena!- trato de correr pero solo me alejo más de su cuerpo, las lágrimas me inundan.

-Meliza- escucho la voz de Damon- Ayúdame!

Volteo y Esta con Elena que me sonríe con malicia... esa no es Elena...

-Katherine- murmuro y su sonrisa crece antes de besar a Damon.

Los rayos no me dejaron dormir o las pesadillas solo me sentía del mismo modo que el cielo tormentoso, los rayos y relámpagos no se hacían esperar.

-Buenos días- saludo a Jenna cuando baja tratando de ser discreta con Alaric.

-Eh... Buenos días Meliza- me saluda Alaric con una sonrisa nerviosa.

-Am... nos vemos luego- Jenna se despide empujando lo a la puerta.- Es temprano para que estes despierta.

-Si quería hablar contigo sobre mis planes...

-Si Elena me comento algo y me entristece que te vayas pero... también comprendo que te quieras ir... eres joven- me sonríe- Siempre serás bienvenida aquí Meliza.

-Gracias Jenna te quiero y siento ser una molestia- la abrazo y ella me corresponde.

-A qué se debe tanta lagrimas?-pregunta Jeremy al entrar en la cocina.

Jenna y yo compartimos una mirada antes de ir a abrazar a Jeremy.

-¿Qué? No, suéltenme- se intenta zafar de nosotras pero no lo dejamos hasta que nos abraza entre risas.

-Elena únete- le pido cuando baja con una cara de pocos amigos.

-Lo siento me esperan, nos vemos más tarde-se despide antes de salir.

Eso fue raro.

Eso fue raro

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Meliza SommersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora